Parte 5

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La banda de la universidad sonaba fuerte con sus enormes tambores. Toda la cancha estaba repleta de jugadores entrenando, en unos cuantos minutos el partido empezaría y yo notaba como mi mano enlazada con la de Dylan empezaba a sudar.

Lo solté de inmediato.

-¿Que pasa amor? -Me preguntó

-Voy con Gigi a buscar algo de tomar -Le sonreí- ¿me esperas aquí?

-Claro. No te tardes

Salí de las enormes gradas con Gigi para buscarnos algo de "tomar"

-¿Quieres beber algo? O solo querías salir del lado de Dylan

No Respondi

-Oye, Quiero desearle buena suerte a Daniel antes de que empiece el partido, ¿vienes?

-¿ A los camerinos?

-Te puedes quedar afuera vigilando, no será mucho tiempo, el entrenador no puede verme allí, enloquece un poco cuando encuentra a una chica.

-Esta bien, rápido

Ese plan no me sonaba del todo bien. Ethan era capitán del equipo y de seguro estaba en los camerinos para ese entonces. Espero no encontrármelo ni de chiste.

Seguí a Gigi hasta la puerta de los camerinos del gimnasio y algunos chicos ya salían con sus uniformes, listos para darlo todo en la cancha.

- Esperare aquí - Dije - Te ayudo a vigilar por si el entrenador viene. - después de todo se supone que no deberíamos entrar a los camerinos.

- Esta bien. Volveré en seguida.

Gigi entró y me quede esperando fuera recostada a la pared. Cada vez que la puerta se abría mi corazón empezaba a latir con fuerza ante la idea de que podría ser Ethan. Algunos chicos se detenían a darme cumplidos. Traía puesto un jean oscuro y zapatillas blancas, arriba una blusa sin mangas de seda negra y por si hacía frío llevaba una chaqueta de jean que había enrollado en mi cintura. Mi cabello estaba suelto y traía un poco de maquillaje, no suelo usar demasiado pero si lo suficiente para realzar las buenas partes de mi rostro.

Después de unos minutos escuche el sonido de un silbato y después la voz gruesa del entrenador quien regañaba a todos por no estar listos aún.

- ¿¡Donde diablos están Woods y Fuller!? Esos malditos.

Los chicos se abrían paso conforme el entrenador caminaba a través del pasillo y yo no quería que me mandara a comer mierda lejos de aquí, especialmente por qué el entrenador podría ser brusco y un completo imbecil cuando del juego se trataba. Eso sin mencionar lo pervertido que podría llegar a ser. Si encontraba a Gigi dentro con Daniel quién sabe que podría pasar.

Rápidamente abrí la puerta de los camerinos y entre sin pensarlo demasiado. Gire mi cabeza a ambos lados, a la izquierda loquers de los chicos y a la derecha vapor que emanaba de las duchas.

- ¡Gigi! - susurre. Me agaché ligeramente inspeccionando el lugar. No había rastro de Gigi.

Los gritos del entrenador se hicieron cercanos y empecé a temer por mi integridad. Voltee hacia atrás y la puerta hizo ademán de abrirse. En milisegundos las opciones pasaron mi mente. Si corría a los casilleros me atraparía, si corría a las duchas el vapor me escondería hasta llegar a un cúbiculo y esconderme allí.

Corrí a la derecha y la puerta se abrió de golpe dando paso a los gritos del entrenador. El vapor me escondió por unos segundos mientras buscaba en donde meterme. Maldije mentalmente mi idea de las duchas puesto que el entrenador se dirigía hacia aquí.

- ¿Qué demonios? - Me giré al escuchar una voz varonil y entre el vapor pude ver a la persona que había estado tratando de evitar.

Ethan estaba duchándose, desnudo. Bueno, no es que uno se duchara con ropa. Mi mirada de sorpesa recorrió su cuerpo sin querer y lo pude ver en todo su esplendor. Su cuerpo tenía gotas por todas partes y su cabello y rostro estaban mojados, su torso marcado en perfectos cuadros terminaba en dos líneas que se cruzaban al final en una perfecta V para después dar paso a su más enorme cualidad. Abrí mis ojos y mi boca y lleve mis manos a mi rostro.

-¡Oh Dios! - Solté algo culpable por haber visto tanto de Ethan junto, y más por haberlo disfrutado.

- ¡Te lo advierto Woods! si estás aquí retrasado por qué alguna mujerzuela te la está chupando te voy a suspender.

La voz del entrenador se hizo cercana y yo quería desaparecer. Ethan rápidamente me hizo una señal de acercarme a él. Yo negué y él me tomo del brazo y me agaché bajo la regadera empapándome por completo de agua.

- ¿Algún problema entrenador?

Puse mis manos en mi frente tratando de bloquear la vista que tenía de Ethan, me refiero, toda la vista que tenía de Ethan.

- Si, tengo un problema ¡y eres tú! Quiero que bañes ese trasero y lo muevas a la cancha ¡ahora! Tienes 10min Woods.

Los pasos del entrenador se hicieron lejanos al tiempo en que iba gritando "Fuller" sin parar, ahora iba tras Daniel, sinceramente no importaba si lo encontraba con Gigi, ahora tenía mis propios problemas, como por ejemplo estar mojaba.

Ethan siguió con su baño tranquilo como si yo no estuviera en la esquina acurrucada. Me miró de reojo y me hizo un ademán de que me quedara allí. Rodee mis ojos y trate de pensar que iba a hacer ahora.

Después de lo que me pareció una eternidad, escuche la puerta de los camerinos cerrarse de golpe y me levante de prisa quedando entre la pared y el cuerpo desnudo de Ethan.

- ¡Esto todo es tu culpa! - Lo acuse- ¿que se supone que haré ahora? ¡estoy completamente mojada y tú eres la razón!

Ethan mordió su boca y entrecerró sus ojos. No entendía por qué de pronto su expresión había cambiado a lujuria en cuanto hablo:

- Así que soy el responsable de que te mojes. No me siento del todo arrepentido. - El agua de la ducha caía sobre ambos. Como un rayo me golpeó la comprensión de mis palabras que, si, habían sonado con doble sentido.

Recargue mi cuerpo contra la pared y empece a respirar con dificultad. Ethan se acercó más a mí y algo punzante pego en mi cadera.

Oh. Mi. Dios.

Un hormigueo repentino subió por todo mi cuerpo y sentí una corriente electrizante, estaba agitada y no sabía por qué. De pronto sentí unas ganas terribles de besarlo, besarlo y besarlo aquí, bajo la ducha, eso y un montón de otras cosas que no era capaz de admitirme a mí misma pero que si golpeaba mi mente con imágenes repentinas de Ethan y yo.

Acorte la distancia que nos separaba y lo tome del cuello para atraerlo a mi. Creo que no se esperaba que presionará mis labios con los suyos. Rápidamente Ethan tomó el control de la situación y me presionó a la pared como si intentara traspasarla. Sentí su legua abrirse paso en mi boca y no pude evitar soltar un ligero gemido, Ethan era delicioso. Sus manos fueron a mis caderas presionándome a él. Me sentía tan exitada, tan deseosa de hacer cualquier cosa con el, allí mismo en las duchas. El agua continuaba cayendo sobre nosotros mientras Ethan pasaba una mano por mi cintura y metía otra bajo mi camisa tratando de encontrar el broche de mi sujetador.

- ¿Ethan? Que mierda haces

Una voz varonil hizo que me separará de inmediato y muy a mi pesar. Parpadee en confusión e Ethan agacho su cabeza para controlar su respiración.

Si alguien me encontraba aquí con Ethan, sería el fin.

Holly en problemasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora