Scorbus (HP)

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Scopius miraba a su miope mientras éste intentaba estudiar, aunque a decir verdad Albus parecía confundido con cada palabra por las que sus ojos pasaban. Era divertido verlo así, se desconectaba de todo intentando comprender pero no lo lograba; no hasta que Scorpius decidía acercarse y explicarle.

Todavía no quería ir, le gustaba la escena. El cabello de Albus para todas direcciones, sus anteojos en la punta de la nariz, y sus labios apretados entre cada suspiro cansado. La mano derecha sobre la mesa, no dejaba de dar golpes con los dedos, impaciente.

Una sonrisa ladeada apareció en el rostro de Malfoy, tal vez si esperaba un poco más Albus terminaría pidiéndole ayuda. Eso completaría el combo de ese día.

Se levantó y caminó hacia los libreros, fingió rebuscarse algún título. Albus clavó los ojos en la espalda del rubio.

¿Por qué demonios no venía a ayudarlo? ¡Scorpius sabía que era un asco estudiando sólo!

Lo detestó en esos momentos, dejó de observar su espalda forrada con la camisa blanca que últimamente parecía quedarle pequeña. Se avergonzó ya que antes de mirar su pergamino le echó una mirada al trasero del chico. Sí, sus pantalones también le estaban quedando pequeños.

Debería comprarle un uniforme nuevo... O debería concentrarse en la maldita tarea.

Scorpius escucha el gimoteo de cansancio por parte del Potter y sonríe, tal vez en poco tiempo se lo pediría. Alargó un brazo para tomar uno de los libros y darle una mirada.  Había pasado al menos dos minutos así cuando escuchó que echaban para atrás una silla.

Voltea confundido, su rostro choca con el de Albus. Él no tenía una mirada muy amigable, y sus gafas estaban a punto de caerse.

— ¿Qué tengo que hacer para que me ayudes? Sabes que no entiendo ni la punta de esto, Scorpius.

Su furia le hizo reír, subió una mano para acomodarle las gafas. Se inclinó hacía él y depositó un pequeño beso en sus labios. Los hombros de Albus bajaron y su mirada de odio fue reemplazada por una de sorpresa.

—Pedirlo bien y sin estrellarme contra los estantes estaría bien —comenta, devolviendo el libro a su lugar. Siente que el otro lo rodea con los brazos—. ¿Qué?

—Y ahora ya no quiero estudiar —confiesa el Potter, con las mejillas rojas.

Vuelve a besarlo, más profundo y más lento que antes.

Merlín, pensó Scorpius mientras sentía que el otro le recorría la espalda con las manos. ¿Desde cuando era Potter quien lo arrinconaba en medio de la biblioteca? Al parecer su novio estaba aprendiendo bien.

—Debería comprarte otro uniforme —susurra contra sus labios cuando apenas se separan, jadeando—. Éste ya te va quedando pequeño.

—Huh, lo noté —ríe y abre los ojos para mirarlo—. ¿Es culpa del uniforme todo esto?

Albus sigue con los ojos cerrados, simplemente asiente y vuelve a besarlo.

James estaba a unos metros, perplejo y algo traumatizado con la escena. Retrocedió sobre sus pasos mientras maldecía a ese par, que siempre se ponía intenso justo cuando él planeaba ir a molestarlos.

Un momento, aún podía hacerlo.

Corrió hacia ellos y sacó un sobre de su bolsillo, lo lanzó directo a la cabeza de Albus.

— ¡Al cuarto y con protección! ¡El que sean dos chicos no quiere decir que no la necesiten!

Su hermano se volteó para verlo abochornado y furioso.

— ¡Te odio, James!

Mientras el mayor de los Potter corría, chocó contra una persona. Al entornar la vista se encontró con la bibliotecaria y su cara de pocos amigos.

—La biblioteca no es para correr, gritar o perder la virginidad. Se van ahora o los llevo con la directora.

—Sólo quiero resaltar una cosa, señorita —James alza un dedo, y luego señala al par—. Ellos ya no son vírgenes.

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Miss_Stilinski_ Scorbus es vida, es amor, al igual que el jamón 🌚

Versatiles One Shots.Where stories live. Discover now