Supernatural - Nefilim

Capítulo 2

Me quedé inmóvil por unos segundos, tratando de procesar lo que Sam y Dean acababan de decir.

-Entonces...¿nos ayudas?-dijo Dean haciéndome reaccionar.

-Escucha no sé como quitarte esa cosa, tampoco sé porque su amigo les dijo que podía hacerlo, pero sólo sé que mientras más lejos este de esa cosa estaré segura.- dicho esto me alejé del impala rumbo a casa.

-Espera, Nia.- llamó Sam saliendo del auto junto a Dean.

-¿Qué?-dije girándome hacia él.

-Por favor, escucha, si sabes de la marca supongo que serás una cazadora, ¿cierto?

- Algo así.

-¿Algo asi?- interrumpió Dean.

-¿Estaban siguiéndome y no saben nada sobre mi?

-Puede ser.- bufé.

-Sé todo sobre el tema pero mi tía, quien fue la que me enseñó todo eso, no me dejaba cazar.

-¿Entonces eres como una cazadora sin acción?-habló Dean.

-Si algo asi.

-¿Al menos podrías decirnos todo lo que sabes de la marca? Tal vez sabes algo que nosotros no.-dijo Sam.

No sabía si confiar en ellos, en especial teniendo la marca de Caín cerca. Hasta donde sé todo aquel que la posee termina por convertirse en demonio, pero no cualquier demonio, sino uno muy poderoso y venga ya que yo no quiero tener problemas con un demonio, al menos no ahora.

-Vale, pero no aqui.

Los tres subimos al impala y nos dirigimos al motel en donde se hospedaban, en realidad se encontraba muy cerca. Entramos a la habitación y Dean se sentó en el sillón mientras que Sam seguía de pie a mi lado.

-Okay todo lo que sé es que la marca obviamente le pertenecía a Caín y que la primera arma solo funciona si tienes la marca. Todo aquel que lleva la marca se convierte en demonio, en uno muy poderoso para ser exactos. La marca también te protege de hechizos evitando que mueras fácilmente. Pero no sé como quitarla, lo siento. Su amigo se debe haber equivocado de persona.

El celular de Dean sonó apenas terminé de hablar, miró a Sam y luego contestó el teléfono.

-¿Enserio eso es todo lo que sabes? ¿Ningún otro dato más?-Preguntó Sam.

-Lo siento.-dije sinceramente.- no sé como ayudarlos.

Dean terminó la llamada y se escuchó un revoloteo de alas detrás de mi, giré a ver y había un tipo de ojos azules y gabardina que me miraba. Asustada retrocedí.

-Él es Cass, nuestro amigo, el que nos habló de ti.- respondió Sam.

-Hola.-habló el tipo de la gabardina.

-Dice que no sabe como quitar la marca, tal vez te equivocaste de persona, Cass.-habló Dean.

-No, no me he equivocado, Nia puede ayudarlos, ella es un nefilim.-todos giraron en mi dirección apenas Castiel terminó de hablar.

-¿Un ángel?- dije intercambiando miradas con Sam y Dean- ¡¿un ángel?!

-¿Un nefilim?-preguntó Dean.

-Okay ya les dije todo lo que sé sobre la marca, no los puedo ayudar, adios.-dije mientras salía de la habitación a paso rápido.

Sam intentó detenerme pero no me alcanzó.

***

Camino a casa empezó a llover así que trate de caminar más rápido aún. Los pensamientos inundaron mi cabeza ¿Como podría yo salvar a Dean de la marca de Caín? Solo era una simple chica que tenía conocimientos de cazadora gracias a su tía, cualquier cazador podría ayudarles más que yo. Aunque yo era un nefilim o eso me dijo mi tía al cumplir los 15 años. Se supone que los ángeles matan nefilims ya que bueno, dicen que somos una "falla", que los ángeles y los humanos nunca debieron estar juntos.

-Eso no es cierto.- habló alguien detrás de mi, sacándome de mis pensamientos .

Me giré y vi a Castiel, retrocedí casi instantáneamente.

-¿Que cosa no es cierto?-pregunté asustada.

-Que los ángeles matan a los nefilim porque son una "falla".

-¿Estabas leyendo mis pensamientos?

-Si.-dijo acercándose a mi.-Nia yo no voy a hacerte daño.

-Eres un ángel, ¿porque no lo harías?

-La razón por la cual matamos nefilims es porque su poder es mucho más fuerte que el nuestro y para evitar que se salga de control los eliminamos.

-¿Y porque no me matas a mi? Yo me puedo salir de control.

-No eres como cualquier nefilim, tu padre es Miguel, un arcángel, así que eres mucho mas fuerte. Por eso intentamos matarte de pequeña, así no podrías desarrollar tus poderes.

-Pero sigo aqui, ¿no se supone que debería estar siendo buscada por los ángeles ya que soy un peligro?

-Ellos piensan que estas muerta.

-¿Porqué?

-¿No lo recuerdas?-negué con la cabeza.- Cuando tenias 10 años grabé un hechizo en tus costillas, eso impidió que los ángeles te encontraran, Miguel había hecho lo mismo con tu madre apenas se conocieron. Y ese día tu madre chocó, así que los ángeles las dieron por muertas.

-¿y porque no me matas ahora? Quiero decir ya me encontraste, ¿no?

-No soy ese tipo de ángel, estar con los Winchester cambió mi forma de ver las cosas.

-Vale imaginando que te creo, ¿con mi poder podría quitarle la marca de Caín a Dean?

-No lo creo, ya que tus poderes no están muy desarrollados aún, casi parece que no los usas.

-Si, es que me encanta decirle a todo el mundo que soy hija de un arcángel y una humana y que tengo poderes.- respondi sarcásticamente.

-¿Porque harías eso?-preguntó inocentemente. Rodee los ojos.

-Escucha me gustaría saber mas de mis poderes y eso pero está lloviendo, son casi las 11pm y debo llegar a casa.

-No hay problema.- Castiel me tomó del hombro y aparecimos en la puerta de mi casa.

-¿Es normal que tenga ganas de vomitar después de esto?- dije intentando calmar las náuseas que había provoca el viaje.

-La primera vez, si.

-Gracias por traerme.

-De nada.

-Yo...-dije girándome hacia donde estaba Castiel pero él ya había desaparecido.- adiós.