Decidí prender la ubicación de mi móvil. No sabía que más hacer, Mel y yo estábamos sin armas, yo podría pelear sin armas pero me preocupaba ella, que le hicieran daño porque digamos que no es de las personas más fuertes o ágiles.
- Escúchame, cuando cuente hasta 3 corres sin mirar atras, ¿vale? No quiero que pidas ayuda.- Mel me miraba con terror.
-¿Debo dejarte aqui?- susurró exaltada.
- Yo puedo arreglármelas, pero no si estás aquí.
-Okay correré pero prométeme que estarás bien.
- Lo prometo.
En ese instante dos chicos se acercaron a la piscina. -Ya saben que los vimos- pensé. Puedo contra dos, creo.
En eso otro chico sale y se pone un poco más adelante de los otros dos, parecía el que daba las órdenes.
- Mierda. -
-Pero que tenemos aquí.- dijo el 3er chico.- ¿acaso no es la chica nefilim?-sonrió.
-¿Que quieres?- dije sin más.
-Bueno ya sabes, tu sangre.
-¿Porque querrías su sangre?-intervino Melissa.
El chico giró la vista hacía ella.
-¿tu amiguita?- sonrió con malicia.- Al parecer no sabes con que clase de personas te juntas-le habló a Mel.- déjame explicarte, tu amiguita nefilim tiene una sangre que me hará mas fuerte así que solo la exprimiré hasta dejarla sin una gota de sangre.-
-Uno...-susurré cerca a Mel.
-Así que hacemos esto por las buenas...
-Dos...
-O por las malas.- dijo enseñando sus colmillos.
-¡Tres!-Mel empezó a correr. Tomé unos flotadores y se los tiré en la cara con la esperanza de hacer tiempo para que saliera.
Intenté coger una pala que estaba tirada en un rincón, pero uno de los vampiros me tiró a la piscina.
-Esto se vuelve divertido.- habló.
Uno de los dos vampiros sobrantes entró a la piscina a buscarme mientras que el otro tenia a Melissa acorralada.
Sali de la piscina lo más rápido posible y cogi la pala, esquivé uno de los golpes del vampiro, le di unos en el estómago haciendo que se retorciera un poco, luego le tiré la pala en la cabeza, esto hizo que cayera a la piscina.De un momento a otro el vampiro con quien había estado hablando me tiró contra la pared haciéndome caer en una mesa que termine rompiendo.
-Tu sangre o la de tu amiga, tu escoges.
El que había acorralado a Melissa la tenía en sus brazos con un cuchillo en el cuello.
No había manera de salir de esta.
-Déjala ir.- ordené.
-Tu sangre.
Sentí una electricidad inmensa en mi, estaba cabreada.
-Dije que la dejaras ir.- dije fríamente. Mis puños se cerraron casi por instinto.
Sentí sangre caer de mí nariz. Lancé el cuchillo a la piscina. Lo hice, no sé como pero lo hice. Melissa pisó con fuerza al vampiro que la tenía lo cual hizo que la soltara.-¡Corre!- Mel se puso a correr y salió de aquel lugar. Solo quedábamos ellos y yo.
Logré coger el cuchillo de la piscina y apuñale a uno, con mucho esfuerzo logré cortarle la cabeza. Me golpearon en el estómago, luego en la pierna haciéndome caer. Uno me jaló del cabello haciendo que vea su rostro.
-No sabes lo bien que se sentirá beber tu sangre.- le escupí la sangre que chorreaba de mi boca debido a los golpes. Tiró de mi y me lanzó contra un armario.
Sentía dolor en todo el cuerpo, no podía pararme, no tenía fuerza. Escuche la puerta abriéndose pero no vi quien era. Me percaté del rostro del vampiro, sorprendido-asustado. Escuche a alguien siendo apuñalado o mejor dicho decapitado. El vampiro me hizo un corte en la mano y luego se hizo uno a él, junto nuestras sangres y me sostuve del suelo, estaba mareada. Me estaba convirtiendo en un vampiro.Vi a Dean con un machete lleno de sangre, iba tras el vampiro que me convirtió, este solo reía. Todo estaba borroso, me eche en el suelo por la falta de fuerza. Después de un rato Dean se acercó y me abrazó.
-Dean...-le mostré mi mano.
-Estarás bien, tranquila.
Lo último que recuerdo es a Dean cargándome.
ESTÁS LEYENDO
Supernatural - Nefilim
De TodoNia, uno de los pocos nefilim que quedan en la tierra, ayuda a los Winchester a deshacerse de la marca de Caín, pero mientras los meses pasan sus sentimientos por el mayor de los Winchester crecen. Tendrá que aceptar que su vida dió un cambio radic...