El clan MacFusty: Expedición a las Islas Hebridas: 5 parte

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Habían pasado tres días desde que hubo finalizado la expedición para que el Señor Scamander conociera a Brownie.

Tres días en los que, debido al temporal que asolaba la región, fue imposible que el Magizoologo volviera a casa.

Desde entonces vuestra relación se había vuelto completamente formal e incluso volviste a llamarle por el apellido, igual que él a ti...en resumidas cuentas: había mucha tensión entre vosotros.

Eras incapaz de olvidar el momento en que vuestros labios se unieron, bajo las estrellas y escondidos en la oscuridad. Tu que nunca te dejabas llevar, temias que Scamander pensara que fueras de esas que se besaban con cualquiera...cuando eso sólo te había pasado con él.

Suspiraste buscando cómo hablar con el joven. Ni siquiera sabías cómo sacarle un tema así e intentar restarle importancia...mientras tu cabeza recreaba una y otra vez ese beso con el que soñabas cada noche.

Saliste de tu cuarto con paso firme y con el corazón inquieto. Sabías que en cuanto el tiempo amainara él se iría y tu tenías mucho que aclarar, de modo que te plantaste delante de la habitación de invitados, con la mano levantada para llamar la puerta.

Pero no te atrevías.

-Joder _____,sólo hazlo y ya está...

Tu corazón iba más rápido y bajaste la mano para volverla a subir y llamar muy rápido.

Cuando oiste la silla al otro lado de la puerta tu cerebro estalló en nervios y te sentiste completamente incapaz. Giraste por completo sobre tus pasos para dar media vuelta y huir...y fue cuando chocaste con un poderoso torso.

Habrías caído al suelo de no ser por tu hermano Sam que, realmente confundido por tu extraño comportamiento, había agarrado tu brazo impiendo la caída.

La puerta en ese momento se abrió, y Newt os miró un tanto sorprendido sin saber que decir.

-Señor Scamander la comida está lista. Ha llegado una lechuza para usted.______¿Qué diablos haces corriendo por el pasillo?

Miraste a tu hermano y te incorñoraste muerta de vergüenza.¿De veras pasaban éstas cosas en la vida real?

Con toda la dignidad posible te incorporarte y carraspeaste para encontrar una voz que parecía haber abandonado tu cuerpo.

Finalmente la encontraste.

-Quería hablar con el señor Scamander. Pero supongo que puede esperar.

El mago te miró pero no dijo nada, oportunidad que aprovechaste para ir a la cocina y eludir la situación

Era evidente que no iba a ser fácil.

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Newt se sentó frente a ti y aunque desvió la mirada sentiste cómo sus ojos te observaron por un intenso y perturbador segundo.

Si había algo que Newt no podía quitar de su cabeza eras tú:

Tus labios, tus ojos, tus manos....se le erizaba el bello de la nunca si recordaba el beso de los días anteriores y te grababa a fuego en su mente cuando tenía su oportunidad para adorar tu presencia.

Eso por supuesto dentro de la formalidad. Pues hablar contigo se había convertido en una especie de reto que no conseguía superar.

Quería hablar contigo ¿pero cómo hacerlo sin temblar?

Cuando se sirvió la comida y el resto de tu familia se puso a charlar tu te refugiaste en tu plato y escuchabas con interés las pocas veces que Newt abría la boca. Generalmente para responder alguna pregunta dirigida directamente a él.

Momentos: Newt Scamander y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora