13. Patuxent

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* Cindy narra*

Examiné al chico de arriba a abajo, pero seguía sin conocerle.

— Un momento...— dijo Drew.

— ¿ Eres el de la otra fila cuando lo de Megan?— preguntó Drew.

— Si... Yo también te vi a tí, pero a ella no— dijo perdiendo un poco su seriedad.

La chica que estaba en aquel momento se dejó ver más, parecía tímida.

— No... No puede ser— dije con lágrimas en la cara.

Fui corriendo hacia ella.

—¡ Tara!— grité emocionada.

—¡ Cindy! Creía que estabas muerta— dijo Tara aguantando sus ganas de llorar.

— A mi también me dijeron que estabas muerta— dije comenzando a sospechar.

—¿ Por que mi grupo me dijo que Tara estaba muerta?— grité enfadada al chico que le faltaba el brazo.

— Porque Tara nos pertenece, y para que tú no fueras en nuestra búsqueda, te dijeron que estabas muerta— explicó.

Me acerqué a el y le pegué un bofetón en la cara.
El otro que lo acompañaba sacó el arma.

— Bajad el arma, solo me ha pegado un bofetón, no es nada grave— dijo él.

— Me llamo Tom, este es Cameron y ella como ya sabes Tara— dijo Tom con tono agradable.

— Soy Cindy— dije ofreciéndole la mano fríamente — y este Drew— añadí.

— Encantado, pasad— dijo Tom.

— ¿ Y para qué queremos pasar?— dije haciendo que se notase que teníamos otras cosas que hacer.

— Porque intuyo que estáis perdidos y habéis topado con Patuxent, os podéis quedar, os llevaremos a Alexandria, pero hoy no, tenemos cosas que hacer— explicó Tom cruzando la enorme valla de chapa.

—¿ Pasamos?— preguntó Drew.

— Si, supongo que tendrán comida— dije con hambre.

Escuchamos un disparo del hombre que estaba en el puesto de vigilancia.

—¿ Por que disparas?— preguntó Tom.

— He visto algo moverse muy rápido— dijo el guardia.

—¡ Yo también lo vi, antes de llegar aquí, pero no sabía que era!— expliqué.

Drew cruzó la valla, mientras yo subía al puesto de vigilancia.

— Déjame los prismáticos por favor— le dije al vigilante.

Miré a través de ellos para ver si lograba ver que era aquello que se movía tan rápido.

—¿ Crees que nos está espiando?— preguntó el vigilante.

— No lo sé, pero sea lo que sea es malo para nosotros, sabe dónde vivís y supongo que sabrá donde vivo yo— expliqué con miedo.

—¿ Y si es un espía de Megan?— preguntó el vigilante.

—¿ Para que quiere espiarnos? ella ya sabe donde vivimos—

— Para saber si hemos traído más cosas "para ella" o si estamos planteando algo contra ella— explicó el vigilante.

Me quedé pensando durante unos segundos.

— Ahora vengo, necesito hablar con Tom— dije bajando del puesto rápidamente.

Fui al sitio donde se encontraba Tom.

— Hola Cindy, ¿ Ocurre algo?— preguntó Tom.

— Necesito hablar contigo— me apresuré a decir.

—¿ De que se trata?—

— Los de Alexandria estamos planteando una guerra contra Megan, quiero saber si tú también te apuntas— expliqué.

Tom se quedó pensando durante un buen rato.

— Debo plantearmelo más a fondo— respondió con voz de desconfianza.

—¡ Pero juntos podríamos matarla!— dije desesperada.

—¡ Ya te he dicho que tengo que consultarlo más a fondo! Ahora iros a vuestra habitación, que se está haciendo de noche— dijo Tom marchándose.

Escuchamos un grito del vigilante y fuimos rápidamente a ver qué pasaba.

—¿ Que ha pasado?— dijo Tom subiendo al puesto de vigilancia con los demás.

— No... No lo sé... Estábamos vigilando y charlando, pero dejó de hablar, miré y la vi muerta— explicó el vigilante con miedo.

— Joder, mirad, parece que le han disparado en el cuello— dije tratando de saber que es lo que pasó.

— No pudo ser un disparo, todos lo abríamos oído— explicó el vigilante.

— Debemos enterrarla... No se merecía eso...— dijo Tom cogiéndola en brazos.

La chica despertó en forma de caminante y Tom la tiró sin querer a la parte de abajo.
Tom bajó y le clavó el cuchillo en la cabeza.

                 Al día siguiente

— Lo siento— oí decir a todos al que parecía ser el novio de la chica de ayer.
Cerré la ventana y eché las cortinas para cambiarme.

— Drew, ¿ Estás listo?— dije tocando la puerta del baño.

— Si— respondió abriendo la puerta.

Nos acercamos a la puerta principal de Patuxent.

— Gracias por habernos cuidado Tom— agradecí amablemente.
— No hay de qué— dijo abriendo la puerta.

Antes de irme besé a Tara para despedirme.
Salimos y volvimos a notar esa sensación de estar sobreviviendo ahí fuera.

—¿ Estás bien?— le dije a Drew.

— Si, ¿ Y tu?—

— También estoy bien, ah, toma esto— dije sacándome una barrita energética del bolsillo que robé en Patuxent.

Llegamos a un sitio extraño, como un edificio.

—¿ Entramos?— preguntó Drew.

— No lo sé, es muy extraño—
Drew siguió andando hacia el edificio demostrándome que si quería entrar.
Un hombre muy extraño salió a toda leche del edificio.

—¡ Debéis iros de aquí ya!— gritó sujetando a Drew de los hombros.

—¡ Suéltale!— grité apuntándole.

—¿ Por que debemos irnos?— preguntó Drew asustado.

— He programado esto para que explote, hay muchos muerto y personas malas ahí dentro— explicó.

Drew salió corriendo empujando al hombre extraño haciendo que se doblase el tobillo.
Corrimos tanto como pudimos pero el edificio explotó.

Un Mundo Inesperado Vol. 2 Parte 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora