27 de octubre, 2016.
—Ahg, mi pulso es un asco para esto. —Espeté alejándome de ella para no mancharla de pintura.
— ¡Vamos! Ya casi terminas, solo falta un ojo.
—Amelia, la línea me quedó horrible.
—Pásame un espejo, veamos el "desastre" —hizo comillas con sus dedos— que hiciste.
Le tendí uno de mis espejos de mano y dejé que se viera. Se examinó el maquillaje en silencio total, moviendo el cuello y rostro en diferentes direcciones para apreciar el maquillaje desde diferentes puntos.
Debo admitirlo, me encanta todo lo que tenga que ver con la estética de una persona, ya sea maquillar, peinar o incluso vestir. Esa iba a ser mi carrera en la universidad y realmente estaba emocionada por iniciar pero..., por culpa de ciertas circunstancias no pude ingresar.
Suspiré con algo de nostalgia.
—Eres una mentirosa. —Me acusó, y yo simplemente la miré con ojos abiertos como platos.
— ¿Qué?
— ¡Está quedando espectacular! Sigue, falta realmente poco.
—Pero es que...
—Alexa —me miró con mucha seriedad—, si no terminas este maquillaje te golpearé.
Resoplé dándome por vencida y volví a tomar el pincel para terminar el delineado felino en su ojo izquierdo.
Dado a que estamos en esa fecha del año en la que, tanto niños como adultos se disfrazan, Amelia ha elegido vestirse de bruja —muy original de su parte—, pero no es el disfraz típico de las brujas; este lleva un corset negro con lentejuelas, una falda hasta las rodillas junto con un par de pantimedias de araña negras, y una túnica haciendo juego. Ah, sin olvidar el clásico sombrero de las brujas.
Al ver el disfraz por primera vez me quedé muy shockeada, pues es una combinación entre una bruja sexy y una recatada..., muy a lo Amelia.
— ¿Ya sabes qué te pondrás para la fiesta? —Me preguntó mientras yo me ocupaba de pasar la última capa de rímel por sus pestañas.
—No pensaba disfrazarme pero, decidí al final por un traje de...
— ¿Playboy? Tienes cuerpo para ser una conejita. —Comentó, interrumpiéndome.
Me separé de ella y la observé con una ceja alzada.
—Si me llego a disfrazar alguna vez de conejita, sería para mi pareja, no para una fiesta donde probablemente esté también mi padre.
Eso me tenía pensativa y nerviosa. La fiesta a la que asistiremos Amelia y yo fue organizada Sienna Ford, la madre de Jayden y Halle, y una vieja amiga de mi padre y de Amelia. Estudiaron en la misma universidad.
Esto implica que veré a mi padre hoy, después de casi un mes sin hacerlo y eso me preocupa. La relación que llevo con mi padre es un tanto mejor que la que llevo con mi madre, pero no es muy buena tampoco, al menos con él no discuto tanto..., al menos.
—Hablando de parejas... ¿Qué ha pasado entre tú y ese chico de ojos claros? —Suspiré—. ¿Cómo se llama?, ¿Sean?
—Sí...
— ¿Terminaron?
—Ni siquiera hemos iniciado algo, Amelia.
—Entonces ¿están peleados?
—Se puede decir que sí.
— ¿Y ahora qué fue?
Resoplé y me ocupé ahora de pintar sus labios de un color purpura bastante oscuro, casi de color negro.
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Mala Combinación. (Saga L.A. #1)
Teen FictionÉl: calmado cual río después de una fuerte tormenta. Ella: una furia hecha mujer. Él: paciente cual pereza. Ella: El día que se repartió la paciencia como virtud, Faith hizo la fila para la impaciencia. Él: Optimista. Ella: Pesimista. Aunque se lla...