DESCENDIENTES DE LA OSCURIDAD [VIXX] ©

INTRUSO

La cafetería estaba repleta de estudiantes, muchos se apresuraban en comprar su respectivo desayuno para poder encontrar una mesa sola, Jaehwan y Hyuk habían tenido suerte, pues habían salido temprano y comprado su comida antes de toda la conglomeración en la caja.
También se sentían tan afortunados cuando les avisaron que el profesor de cálculo faltaría a las dos clases seguidas. Dos horas libres eran de lo mejor así podrían dividirse los trabajos en equipo y adelantar lo mejor posible, además toda la universidad se sometería a una remodelación y las vacaciones se adelantaron dos semanas.
Era una verdadera suerte.

Hyuk se dispuso a comer su pastel de chocolate, tomó la cereza que le daba aquel toque delicioso al pan dulce y la mordió, estaba disfrutando de ello cuando se dio cuenta del viaje astral de Jaehwan, el rubio no sacaba de su cabeza la noche anterior, que en esos momentos se preguntaba si acaso los vecinos de enfrente habrían escuchado los santos gritos y si también los de abajo habrían sido molestados por el ruido del mueble.
Jaehwan quitó su mirada de la mesa y la posó en las mesas del final de la cafetería, ahí estaban los brabucones de la universidad, pues en su poca estancia en ella se había enterado de varios rumores de ellos y su vestimenta también los hacia ver que tipo de chicos eran.
Pero de todos ellos uno captó su atención, un chico alto, de cabellos rubios teñidos, medía al menos uno noventa, no era muy atractivo pero su musculatura lo ayudaba, lo llamativo aquí era que el chico no le quitaba la vista de encima a Hyuk, luego algo le dijo a uno de sus compañeros y después se rieron.

Jaehwan sintió un escalofrío en su cuerpo y tamborileo sus dedos en la mesa para llamar la atención del menor. Y lo logró, Hyuk alzó la mirada curioso.

H- ¿Pasa algo? - cuestionó tomando de su jugo de naranja. Jaehwan se acercó más a la mesa y disimuladamente habló.

K- Un chico te está viendo- dijo seriamente. Hyuk negó confundido y luego Jaehwan le señaló la dirección con sus ojos, fue entonces que el castaño miró hacia allá, fue coincidencia que sus ojos se toparan con los del hombre, éste le sonrió sensualmente, una sonrisa incómoda para Hyuk que lo hizo voltearse enseguida.

H- Quizás no es a mi - concluyó viendo a la mesa de al lado donde el grupo de animadoras tomaban su desayuno, éstas susurraban algunas cosas para mirar hacia la mesa de los brabucones.

K- No lo creo Hyuk, siento que ha visto cada movimiento tuyo y apenas nos dimos cuenta.

Antes de que el castaño pudiera contestarle la campana del regreso a clases sonó. Ambos chicos tomaron sus mochilas y dando algunos empujones salieron de la cafetería, tenían dos largas horas libres así que su destino era el jardín trasero de la Universidad.

Jaehwan caminaba con dificultad, en esos momentos no sabía si odiar al lobo o amarlo por tan digna y apasionada noche, sin embargo no podía decirle eso a Hyuk, aún.

H- Jae, ¿encerio te caíste? - preguntó de nueva cuenta - Me dijiste que no pudiste colgar bien el cortinero pero no es para tanto - Kenny fruncio el ceño, Hyuk no era ningún tonto, y a decir verdad su departamento se parecía al del castaño, una caída de un pequeño banco al suelo no le dejaría tan lastimado el trasero.