1. No debí pararme de la cama.

53 6 3
                                    

Lola.

-¡Maldita sea!- gruñí al ver que mi despertador sonaba, eran las 6:00 am eso indicaba que era otro maravilloso día para ir a clases.

-No quiero ir a la escuela- dije entre dientes me quede un rato tirada en la cama, realmente ir a la escuela, a esa aula donde todos gritan, murmuran, pasan chismes y cuentan sus tragedias no era muy lindo que digamos. -Aunque... debo ver a Sebastian, - di un largo suspiro- mi novio.- dije algo desanimada mirando la nada en mi habitación, recordé que el pasa mas tiempo con sus amigos que conmigo ''Solo me pregunto ¿Por que ya no llama?'' pensé al no querer levantarme de la cama.

Mientras hacia el intento por levantarme, mi celular comenzó a timbrar, pensando que era alguna alarma lo tome y me di cuenta que era una llamada de un numero desconocido dude en contestar pero al ver la insistencia opte por finalmente contestar.

-¿Bueno? ¿con quien hablo?

-¿Eh? ¿Lola?- reconoci aquella voz detras del otro lado de la linea.

-¡Sebas! No tienes idea del gusto que me da oírte...- mi emoción era mas que obvia pero fue apagada por su manera seca de contestar.

-Si, si, a mi también - trate de disimular ante su indiferencia.

-¿Quieres que salgamos hoy?- lo que me responderia a continuacion no me lo esperaba.

-Eso te iba a pedir que nos vieramos- Antes de poder emocionarme por verlo -Lola ... Tenemos que hablar- eso no se escuchaba bien sentia una leve presion en el pecho ''¿Sobre que desea hablar? acaso piensa....''

-Lola- volvio a llamarme y asi me saco de mis pensamientos.

-C-Claro ... ¿Saliendo de mi trabajo te parece?

-Me parece bien.

-Bien, entonces...te quiero.

-Adiós- colgó de manera fría que me dejo algo pensativa ''Debe estar ocupado o nervioso '' -Si eso debe ser- suspire.

-Bien ya me contara cuando nos veamos- me levante finalmente de la cama y fui a prepararme para ir a la tortura escolar.

-Al menos lo vere hoy- con una sonrisa forzada vi una vez mas el reloj y me di cuenta que ya se me habia hecho tarde.

-¡Demonios!- exclame saliendo de mi casa, trataba de concentrarme en llegar a tiempo cuando vi a Alan

-¡Alan!- llame su atención se volteo a verme.

-Oh Lola, me da gusto verte- me abrazo con fuerza y yo le correspondi al hacerlo se quejo de dolor.

-A mi tambien pequeñin - dije algo sarcastica ignorando por el momento su quejido de dolor

-Callese ''Prisidinti''- dijo divertido para molestarme

-Jajajajaja, antes de que empieces....- hice una pausa dramatica.-¿Me dices la razon de tus golpes?- me cruce de brazos mirando seria.

-N-No se de que hablas- note su nerviosismo.

-No soy tonta ¿Sabes?- Arquee la ceja mostrandole un gesto en mi rostro de ni tu te la crees -Fueron esos chicos ¿verdad?- lo vi a los ojos pero este evitaba mi mirada.
Era claro que queria esquivarme, como la mayoria de las veces.

-...Si...- dijo para si mismo pero igual lo escuche

-¡Se acabo! ahora si les daré su merecido!-

-Lola espera...- detuve mi paso al escuchar la suplica de Alan -Si lo haces me buscaran en la salida - con sus ojos cristalizados no puede evitar hacerle caso.
Siempre sabe como hacerme cambiar de opinión.

¿Porque el amor es así? [Detenida]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora