how to save a life| evak. (gay)

fourteen

Narra Isak.

"Soy un chico y tengo novia"
Auch.
Eso definitivamente había dolido.
Ahora mi cuerpo estaba más tenso que antes, antes estaba nervioso por el hecho de que Even estaba curando mis heridas mientras yo estaba semidesnudo, peor ahora estaba tenso porque estaba aguantando las ganas de pararme de la cama y pegarle un puñetazo.
-Listo.- Dijo para luego cerrar el botiquín he irlo a dejar al baño.
Ni siquiera me tome la molestia de ponerme una camiseta, digo, él es un chico y tiene novia, no debería porque incomodarle lo que usaba o no usaba ¿no?
-Puedes irte.- Dije frío mientras vendaba mis manos para tapar las heridas. Ya que probablemente hoy vendría Jonas a la fiesta y no quería escuchar sus sermones.
-Voy a barrer los vidrios del baño primero.- Dijo Even para luego ir al armario de la limpieza y sacar una escoba.
-Puedo hacerlo yo.- Dije con la mandíbula y los puños apretados.
-¿No puedes simplemente acostarte y cerrar la boca?- En estos momentos lo único que quería era tomar esa maldita escoba y pegarle con ella en la cabeza.
La voz de Jonas apareció en mi mente.
Controla tus impulsos.
Comencé a inhalar y a exhalar en un intento de calmarme.
Cuando ya estaba lo suficientemente tranquilo me acosté dándole la espalda a Even.

(...)
-¿Quieres algo de comer?- Dijo Even cuando ya había terminado de barrer los cristales.
-Estoy bien, puedes irte.- No sabía si este chico era lo suficientemente inteligente como para notar que lo único que quería era que desapareciera de mi vista.
-¿Qué está mal contigo?- Dijo algo exaltado. Aún así dándole la espalda pude adivinar que estaba con los brazos cruzados y la mandíbula tensa.
-Quiero estar solo.- Dije. En parte era verdad, odiaba mentir pero supongo que esto no contaba como una mentira.
-¿Me estas echando? Porque te recuerdo que fuiste tú el que me pidió que me quede.- Siempre digo cosas que no debería decir cuando estoy dormido.
-Si, y ahora te estoy pidiendo que te vayas.- Dije levantándome de la cama enfrentándolo.
-Ok, me iré.- Even tomó su chaqueta y sus zapatos y se dirigió a la puerta.- Traeré a mi novia a la fiesta de esta noche.- Dijo para luego cerrar la puerta, dejándome con la palabra en la boca.
Ahora solo quería volver a golpear algo pero no ganaba nada lastimándome.
Fui hasta mi habitación y busque mi teléfono, cuando lo encontré le marque a la única persona que podía ayudarme.
Un pitido.
Dos pitidos.
Tres pitidos.
-¡Buenos días!- Escuche la voz de Jonas al otro lado de la línea.
-Seré directo, necesito tu ayuda.- Casi nunca le pedía favores a Jonas, está era la excepción, aparte de que me lo debía por haber pagado su maldita deuda de su maldita droga.
-¿Pasó algo?- Dijo un poco preocupado.
-¿Cuando fuiste a esa fiesta, ¿no conociste a ninguna chica?- Si Even traía a su novia a mi casa, no me iba a quedar sentado ahí mirando como un idiota mientras se besaban.

¿Donde quedo el Isak tímido? No lo sabía, pero quizás este Isak era mejor.

Me pidieron que haga los capítulos más largos, así que aquí lo tienen. Quizás no sea tan tan tan largo pero iré alargándolos de a poco.
No quiero que piensen que Isak cambio ta que no es así, ahora solo está un poco ciego y confundido.

Dato curioso sobre la escritora; Si no escucha música se le hace difícil escribir.

All the love.