Survivor Series: La Serie de los Sobrevivientes©

12. Estratégicamente Perdida

NARRADOR
OMNISCIENTE

Acacia seguía consternada después de lo que había presenciado, su mente divagaba sobre la crueldad que yacía en el corazón de Vince, si es que poseía uno. En la mente de Acacia por un momento apareció una voz que resonaba una cita de un poema que ella escuchaba a diario cuando sus padres discutían por razones que hasta el día de hoy Acacia desconoce.

Pero Acacia no podía retener el poema, así que como no podía eliminar la imagen de cuerpos ensagrentados yaciendo en el frío pavimento mientras el hedor putrefacto a sangre y pólvora invadían sus fosas nasales.

Acacia había sido encerrada en una habitación a petición de Shane para segun el lograr tranquilizarla, pero era en vano Acacia sollozaba en silencio mientras su cabeza estaba posicionada ladeada en la pared, mientras veía fijamente a la nada.
Acacia escucho el rechineo de la puerta y este mismo hizo que estremeciera, encontrándose con la mirada fría de Stephanie McMahon, una mujer que irradiaba poder desde el sonido de sus tacones contra el suelo hasta en la manera en que posicionaba su espalda erguida.

- Deligiannis...

Stephanie posicionó una bandeja en una mesa con lo que parecía comida tapada con un utensilio de hierro en el cual Acacia podía ver su reflejo, que la dejaba perpleja al notar el aspecto cansado de su rostro, y como parecía haber bajado de peso desesperantemente.

- Te traje tu comida, necesitas comer.

Stephanie no pudo evitar verla de pies a cabeza al exclamar estas palabras en un tono agresivo pero a la misma vez despectivo sin tener que levantar exageradamente el tono de su voz.

- Shane me dijo que tenía que hacer una prueba. -exclamó mientras jugaba con los tenedores de lo que parecía Plata, Acacia no conocía la plata, el acero y el hierro era a lo mínimo que aspiraba un habitante de Smackdown.

- Cariño no harás la prueba, alguien más la hizo por ti. - exclamo despreocupada Stephanie mientras examinaba la horrible habitación en la que estaba Acacia.

Acacia sintió como su estómago rugia de hambre, así que tímidamente retiró la tapa para encontrarse con la terrible imagen de una carne que parecía cruda, Acacia no estaba acostumbrada a comer carne cruda, la carne de Smackdown, cuando había, al menos era cocida con algunas verduras. Acacia de la impresión dejo caer la tapa de hierro y Stephanie la vio confundida mientrass fruncia el ceño.

- Eso es lo que comerán en el entrenamiento, órdenes de mi padre y no tienes ninguna corona para dartela al menos cocida. - espetó friamente Stephanie.

- Pero esto es inhumano - exclamó con un tono de consternación. Stephanie soltó un bufido seguido de una risa baja que hizo a Acacia maldecir en sus adentros.

- ¿Porque te metiste a esto? - exclamó en una risa irónica. - Esta es la vida de los sobrevivientes, en el area de la guerra no tendrán carne cocida ni siquiera tendrán algo con que cocinar la carne. Tal vez este mi querida Acacia, no es lugar para ti - exclamó antes de salir de la habitación dando un portazo.

Claramente este no es un lugar para mi - pensó Acacia mientras seguía jugando con el tenedor en lo que al parecer enserio era su comida, estaba hambrienta pero no sabía como iba a ingerir esto, pero sin más, agarro el cuchillo y el tenedor y comenzó a cortar un pequeño trozo de carne cruda. Acacia visualizo por última vez el trozo de carne cruda en el tenedor,cerro sus ojos y seguido de un suspiro acerco el tenedor a su boca. Pero justo cuándo la joven iba a introducir a su boca el alimento, la puerta de la habitación se abrió lentamente dejando ver el cabello castaño de su compañero de equipo, Allen Jones.

¿Qué hace el aquí? - pensó Acacia mientras lo veía sorprendida y retrocedía un poco.

- No te haré nada - murmuro mientras cerraba la puerta sin hacer tanto ruido. - Vengo a traerte esto - susurró con una sonrisa antes de sacar de su bolsa, una pechuga de pollo que obviamente estaba cocinada de lo mejor.

- No es necesario - exclamó Acacia desviando la vista, estaba hambrienta. Pero simplemente el orgullo le impedía aceptar la ayuda.

- Estás muy débil, come esto.

Allen miró a Acacia con sus ojos azules que irradiaban algo, para Acacia era súplica pero para Jonathan Good, quién vigilaba las cámaras de seguridad en sus tiempos libres, esa mirada significaba algo, Amor.

SEGUNDA SEMANA DEL ENTRENAMIENTO

ACACIA
DELIGIANNIS

Me levanté de mañana antes que todos, Randy había hecho la prueba que me correspondía. No entiendo porqué pero la hizo, el es el más callado de todos con el único que habla es con Bray y después de lo que le dijo a Colby no emitió palabra alguna.

Fui al gimnasio que nos correspondía a Smackdown y comencé a golpear un saco de boxeo, una vez, dos veces, tres veces.

- En ese ritmo no ganarás una guerra, querida. - una mujer de maquillaje y ropa en tonos dorados se le acerco a Acacia, Acacia giro su vista algo confundida y dudo en siquiera entablar una conversación con ella.

- Mi nombre es Wendi Ritcher - la mujer se posicionó enfrente de ella y le extendió su mano, Acacia algo dudosa vio su mano para luego darle un apretón de manos.

- Aca... -

- Acacia Deligiannis, lo sé querida. - Acacia no pudo terminar de presentarse porque al parecer esta mujer ya la conocía y muy bien. - Smackdown ¿No? Una mujer de sangre azul en la guerra, interesante - la mujer mientras exclamaba estas palabras seguía apretando su mano con la de ella.

- Pero a este paso - hizo una leve mueca de desaprobación - serás la primera que maten en la guerra, y no es por ofender. -finalmente soltó su mano.

Acacia hizo caso omiso y siguió golpeando el saco de boxeo, sus nudillos ya estaban lastimados y ella ya se sentía sin fuerzas.

- Te propongo algo, querida. - la mujer saco un cigarrillo de Firecrest de su bolsillo y comenzó a fumar, Acacia arrugo la nariz al sentir el horrible hedor a la droga.

- No me drogare, gracias. - espetó de mala gana.

- Yo no he dicho eso - sonrió burlesca - querida, lo que te propongo es esto. Yo te puedo entrenar para la guerra, y lo haría gustosa. - exclamó ahora seria.

- Ni siquiera se de donde viene, ni quien es ¿y voy a aceptar que me entrene? - exclamó burlesca Acacia seguido de un bufido.

- Si así lo quieres esta bien - se puso en frente de Acacia y sin que ella quisiera le dio un apreton de manos. - Soy Wendi Ritcher, vengo de la tierra dorada y soy tu entrenadora - exclamó cara a cara con Acacia quien la veía con los ojos llenos de sorpresa.

¿La tierra dorada?... ¿Qué es eso?

    《♡》

Renaci de las cenizas...
Bueno eso no.
Anduve un poco desaparecida debido a que no había descargado Wattpad por la razón de que soy pobre, Enserio siento no haber podido actualizar antes.
Espero les haya gustado este capítulo.
¿Que les parecio este capítulo?
Les adoro demasiado.
🌼
Con amor, Eli.