Cuando el caballo empezó a correr hacia el Sur, que es donde se encontraba el palacio. Jimin y J-hope se mantenían en un completo silencio, lo único que se podía escuchar eran las caminadas rápidas del caballo junto con el sonido del aire chocar con los oídos, ya que, en ese momento, iban demasiado rápido. En la mente del mariscal, no rondaba otra cosa más que Taehyung. De verdad estaba preocupado y no lo podía disimular, ya que cada cierto minuto, este le preguntaba al que comandaba el caballo, cuánto tiempo faltaba para llegar al reino. Pero la respuesta siempre hacia que la presión en su interior aumentara más.
-"Ya falta poco."-.
No fueron ni diez minutos, cuando J-hope logro ver una parte del palacio. Dio unas cuantas palmaditas al estomago de Jimin para que se diera más prisa y, después de un momento, ambos se encontraban ya al frente de la gran puerta. Un soldado a cargo de la vigilancia fue el que les dio acceso para poder entrar, ya que reconoció en seguida al guardián y al amigo del príncipe.
Después de entrar, el caballo aun no había parado, pero, sin embargo J-hope dio un peligroso salto para correr por sí mismo a las puertas principales, aun con las palabras de advertencia de Jimin, este solo se levanto del piso, ya que había caído mal y se adentro al palacio lo más rápido que pudo. Sabía que estaba sobre actuando pero no podía evitarlo, tal vez la vida del príncipe estaba en peligro, o la de alguien más, no lo sabía, pero la duda lo estaba carcomiendo por dentro. Así que sin poder esperar a Jimin, se dirigió a la primera sirvienta que se encontró y con voz desesperante, empezó a exclamar.
-"¿Donde está el príncipe? ¿Paso algo malo con la guerra de los gemelos? ¿Dónde está el rey? ¡Por favor diga algo!!"-.
Y en ese momento, sintió como un brazo lo jalaba lejos de la criada, quien miraba con cara de espanto al mariscal. Jimin lo detuvo del pecho y con voz calmada empezó a hablar.
-"Debes calmarte primero, no deberías actuar así, en primer lugar. Nada malo le ha pasado al príncipe, ¿Te queda claro?"- dijo Jimin mientras con una mano soltaba poco a poco el pecho de J-hope y este, abrió los ojos al escuchar lo que había dicho su amigo. El príncipe se encontraba bien. Una paz empezó a sentirse en su pecho y soltó un suspiro de alivio silencioso. Pero entonces la pregunta era ¿Que había pasado de malo, si no era el príncipe?
-"Jimin, explícame lo que está pasando, por favor"- hablo J-hope mientras se alejaba un poco y pedía disculpas a la sirvienta de hace un momento. El nombrado solo, cerró los ojos por un momento y soltó un suspiro asintiendo con la cabeza. "Por favor sígueme."
Jimin empezó a caminar tranquilamente mientras J-hope, levantaba una ceja siguiéndolo de inmediato. Un poco lento, ya que los golpes que había recibido no eran broma, se sentía mal físicamente y no había duda de que necesitaba un doctor. Pero no quiso decir nada aun. Se posicionó aun lado de Jimin y se limitó a mirarlo con curiosidad mientras ponía una de sus manos en el estomago. Comenzaba a dolerle.
-"¿Como supiste de la guerra?"- Preguntó el mariscal mientras desviaba su vista al frente. Jimin hizo lo mismo y aclaro su garganta antes de hablar.
-"Yoongi y yo tuvimos algo de contacto durante estos últimos días, pero a última hora me aviso lo de la emboscada y vine lo más rápido que pude. Deberías agradecérmelo, creo que hoy salve tu vida."- Habló con voz tranquila mientras seguía caminando. J-hope se limitó a mirar el suelo mientras hacia unas muecas por el dolor.
-"En ese caso, muchas gracias."- Dijo y como respuesta recibió una pequeña sonrisa de Jimin.
-"Deberías ir al médico después de lo que te voy a mostrar, veo como te agarras las costillas y tu cara de dolor expresa todo."- Habló Jimin pero J-hope, no le prestó atención, la única cosa que rondaba su mente era más importante para él.
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Silenciosa Lealtad •|Vhope|• TERMINADA
RomanceJung Ho Seok, un mariscal de campo, el mejor de su clase a sus 20 años logra las mejores victorias, es el hombre mas joven que a conseguido ser un excelente soldado. Su nombre aparecerá en los libros, estatuas y mas allá de un idol de la historia. S...