Eileen era la mejor en casi todo, eso la hizo muy famosa, más de lo que ya era, tenía muchos amigos pero siempre estaba con unos pocos, sabía que la mayoría sólo la querían para que les ayudase, no le molestaba pero no quería ser solo un objeto para eso. Era muy amigable y todos la querían no había motivos para que alguien la odiara pero como siempre, la envidia humana era algo que parecía no tener fin, así también había gente que la aborrecía. A ella no le importaba eso, mientras no se hiciera algo en su contra o la de sus amigos. Quería que eso desapareciera, pero no se puede ayudar a quien no quiere ser ayudado.
Estaba en 3ero, aún se veía más pequeña, pero ya había crecido, su pelo era más largo, era la diferencia más notoria.
Conforme pasaba el tiempo, su cuerpo cambiaba, para Severus era difícil, quería protegerla de todos, antes está fácil, solo eran golpes y raspaduras, pero ahora los muchachos la acechaban, y por supuesto él no creía que ninguno le llegaba a los talones, no aceptaría a ninguno nunca. Era su niña. Lo único que le había dejado Hermione, debía protegerla.
Para su suerte, conforme pasaba el tiempo, a ella con sus 15 años aún no manifestaba ningún interés en alguien.
El tiempo parecía volar, los años habían sido justo como antes de estar con Hermione con la diferencia de tener a Eileen ahora.
Ese septiembre comenzaba su 5to año en Hogwarts. Severus había tomado su decision sin contarle a nadie, se lo diría a ella la última noche que estaría en casa.
S:¿ya tienes todo listo?
E:si, papá, todo listo. Ya revise.
S:este año habrá muchos cambios, no creo que lo sepas.
E:pero siempre hay muchos cambios. Siempre nos cambian de profesor en DCAO, creo que es la más notoria.
S:este año volveré a impartir clases. Iré contigo en el tren. O podemos ir a parte, cuando enseñaba siempre llegaba unos días antes al colegio, pero ahora podemos salir más temprano y llegar unas horas antes.
E:pero cómo, ¿por qué no me habías dicho nada?
S:porque ya había tomado la decisión.
E:pero....
S:la botica se quedara a cargo de Julián. Lo veré un fin de semana al mes. Así pasaremos más tiempo juntos.
Eileen se veían sorprendida y algo confusa, no se imaginaba cómo sería tenerlo en el colegio. Había oído cosas de él, como persona sabía que todos se equivocaban con él, claro que era enojon y su perspectiva con ella cambiaba radicalmente con porque era su hija y por ende se comportaba muy diferente con ella que con los demás, pero era buena persona.
Y como profesor, no quería comprobar cómo era, en ese aspecto sabía que no cambiaría y sería igual de estricto, claro, tal vez menos atemorizante, pero aún así, era raro.
Se había quedado revolviendo su comida pensando, ni tenían mucho tiempo ya y sabía que se lo había dicho un día antes a propósito.
