Mientras mi mente lo recuerde y mi corazón no deje de latir

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[Narra Marc]

Tres días después del accidente recibí el alta médica, cuando ya me encontraba casi al cien por cien, pero justo había pasado ya una semana y Ella seguía en su sueño profundo. Y no soy de rendirme, pero juro que esto me estaba agotando.

Veinte de diciembre, a cuatro días de celebrar la Navidad y no me apetecía para nada. Álex, mi madre, mi padre, mi abuelo, hasta mis tíos intentaban que volviera a ser el Marc de siempre, pero sin ella a mi me faltaba una gran parte de mi vida.

Esa mañana me levanté del incómodo sillón del hospital, por séptima vez en la semana me acercaba a Ella, le daba un beso y le susurraba al oído...''buenos días petita, ¿hoy si me vas a dar el gusto de ver tus hermosos ojitos? T'estimo''. De pronto siento como su mano agarra la mía con fuerza, pero su cara no gesticula nada.

Marc: -¿Petita? Petita despierta, por favor.- No obtuve respuesta, su mano volvió a estar como al principio.

Me pasé casi toda la mañana a su lado menos el rato que fui a hablar con el doctor, mientras, estaban sus hermanos en la habitación. Por la tarde vinieron sus mejores amigos, sus padres, y algunos de nuestros amigos en común.

A la hora de cenar Pol me pidió que fuese a casa y descansara y comiera algo que lo necesitaba y hoy se quedaba él en el hospital.

***

Álex: -Hey Marc, ¿alguna novedad?

Marc: -No. Bueno, esta mañana me ha apretado la mano.

Álex: -Ya es un paso.

Marc: -Voy a darme una ducha he intentar dormir algo para mañana volver al dichoso hospital.

Álex: -Germà, deberías comer algo. Va, ve a ducharte y baja que ya te preparo algo yo.

Marc: -Si no me lo dices ni me acuerdo de comer. Gracias germà.

***

[Narra Elena]

Ya sólo faltaban tres dichosos días para Navidad y mi hermana seguía ahí como una manta sobre la cama del hospital.

Me levanté el jueves con un ánimo de perros, estando en mi estado es normal, pero sumándole que ya estaba harta de tanto hospital encima que mi hermana siga en esa situación sin mejora ni peora, pues me ponía aún peor.

Álex se quedó la noche anterior en casa, después de hacerle la cena a su hermano, según me contó, vino del hospital con los ánimos por el suelo y que cada vez estaba más cansado y desesperanzado con este tema.

Entonces ambos, Álex y yo, pasamos por casa de los Márquez para recoger a Marc e ir al hospital.

Marc: -Hola.- Dijo desganado.

Elena: -Cunyii, ¿has podido descansar?

Marc: -Algo.

Elena: -¿Dónde está Marc y qué has hecho con él? La positividad, ¿la dejaste tras la puerta al salir?

Marc: -Tu no lo entiendes...Sin tu hermana...

Elena: -Ya ya, ya sé que me vas a decir. Cunyii tienes que pensar que Ella se va a poner bien. Y que tarde o temprano vais a estar juntos, formaréis una hermosa familia y todos felices. Verás que sí.

Álex: -Germà...Lena tiene razón. Piensa que esto es sólo un bache en el camino. La vida es es como una montaña rusa, con altibajos siempre. Nena...¿y ahora tú?¿Por qué lloras?

Elena: -Nada, el embarazo que me tiene sensible.- Mientras decía esas palabras, en mi mente se formaba un revuelo de cosas que no era capaz de exteriorizar.

Al llegar al hospital, Marc fue directo a la consulta del doctor para saber cómo progresaba mi hermana. Álex y yo nos dirigimos a la habitación donde se supone estaba Pol.

Elena: -Hola.

Álex: -Hola.

Pol: -Hola.- Nos respondió mi hermano medio adormilado.

Elena: -Nada nuevo ¿verdad?

Pol: -Pues la verdad sí. Anoche...Ella ha vuelto a apretar mi mano.

Elena: -Ha vuelto, ¿cómo que ha vuelto?

Álex: -Ayer lo hizo, pero con Marc.

Marc: -Ya estoy aquí. Hola Pol. Chicos...¿me dejáis un rato a solas con Ella, por favor?

Pol: -Claro. Yo...voy a ir a casa, luego vengo.

Elena: -Nosotros esperamos fuera, cunyii...ten fé, Ella va a volver con nosotros.- Le di un abrazo a Marc, después Álex y yo salimos del cuarto y esperamos en la salita contigua.

[Narra Marc]

Otro día que sentía el peso del mundo en mis hombros. Ver a la mujer que amo en ese estado me estaba dejando a mi sin apenas ganas de nada. Llamadme egoísta, pero lo único que quiero es a ella.

Comencé a hablarle al oído, agarrando sus manos y depositando besos en su cara.

Marc: -Hola petita, ¿sabes cuánto tiempo llevas tumbada en esta cama? Casi dos semanas. Amor, faltan tres días para Navidad, y no se si es mucho pedir, pero el único regalo que pido es que abras tus ojitos, que me mires y me digas que me quieres. Porque ¿sabes qué? Yo te voy a amar, mientras mi mente lo recuerde y mi corazón no deje de latir. Ella, teníamos un futuro juntos, y si me faltas yo...- Justo empezó a apretar de nuevo mi mano, con más fuerza que la vez anterior. Y ahora síque intentaba mover sus ojos. -Petita, petita soy yo, Marc, ¿me puedes oír verdad? Princesa, tranquila todo va a estar bien. Te lo prometo.- Empezó a moverse. Entonces llamé al doctor, que en cero coma vino y me pidió que saliese de la habitación para revisarla.

Hola Hola corazones!!

Sé  que he tardado un poco en escribir, pero tenía el móvil roto📵(ya tengo uno nuevo😁😄😊)

Espero que os esté gustando 💓💗💕💞💖💝💟💘

Saludos💋💋💋

Cada Curva Decide...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora