Cada Curva Decide...

''En 30 segundos te puede cambiar la vida''

¿Qué es la vida en 30 segundos? Un ejemplo, que justo en la última curva del circuito, cuando vas a pasar línea de meta en posición de podio y tu compañero de equipo cometa un error y os caigáis los dos. Y por esa equivocación, favorezcan a los otros dos pilotos que vienen detrás. Esto sucedió en el Mundial de MotoGP en 2016. Andrea Iannone tira a su compañero de equipo Andrea Dovizioso cuando ambos estaban en posición de podio por detrás de Marc Márquez. Al final, los que subieron al podio junto a Márquez, fueron Valentino Rossi y Dani Pedrosa. A estos cuatro pilotos les cambió la vida en menos de 30 segundo.

Como a mí. Después de varios meses estudiando idiomas. Me fui al extranjero a buscar futuro. En Japón, entré a trabajar en la fábrica del Repsol Honda. Y adivinen qué, estudié tanto para terminar siendo lo que siempre dije que no haría. Era la paragüera de Marc Márquez señores.

Mi vida había cambiado por completo, pasé de ser la simple hermana de dos pilotos. A ser la famosa paragüera del equipo Repsol Honda. Mucha gente me trataba bien, pero una gran mayoría me insultaba. Decían que yo era una caza fortunas. Hasta llegaron a inventar que estaba saliendo con Marc. Mi relación con él era muy cordial desde que nos conocimos. Pero de ahí a tener una relación con él. No lo veía.

Yo, la verdad, aspiraba a ser algo más. Mánager, asistente personal, directora de algo. Pero tuve que conformarme con ser paragüera, a pesar de que mis hermanos tenían un buen estatus económico, yo preferí crear el mío propio. No iba a estar toda la vida dependiendo de ellos. Y por eso es que acepté trabajar para Marc sólo esta temporada. Me pagaban muy bien y por fin podría ser una emprendedora más sin tener que pedir apoyo económico a nadie.

En una semana comienza el Mundial de MotoGP. Equipaje, pasaporte y billetes de avión para volar a Qatar. Tras unas cuantas horas de avión, controles y ''fans'' intentando ver a algún piloto, salí del aeropuerto y tomé un taxi que me llevara al hotel. No iba con el equipo porque ellos venían desde España y yo de Japón.

Ya en mi habitación deshice la maleta y acomodé cada cosa en su lugar. Cuando terminé me tumbé en la cómoda y cálida cama. Cálida, por el calor que hay en Qatar. Inconscientemente, me levanté y encendí el aire acondicionado volviendo de nuevo a la cama.

Me estaba quedando dormida, justo cuando suena el teléfono de la habitación.

-Hello, who's calling? (Hola, ¿quién llama?)-Pregunté en inglés.

-Miss! I'm the receptionist at the hotel. Here, someone ask for you. His name is Emilio Alzamora.(¡Señorita! Soy el recepcionista del hotel. Aquí, alguien pregunta por usted. Su nombre es Emilio Alzamora.) -Qué le costó al pobre pronunciar el apellido del representante de los Márquez.

-Oh yeah! I go down immediately. (¡Oh si! Bajo inmediatamente.)

Colgué el teléfono y corrí a calzarme los zapatos que me quité al llegar. Tomé la llave electrónica de la habitación y opté por bajar por las escaleras. Eran solo tres pisos y el ascensor tarda siglos, aparte de que no me gustan.

Al llegar a recepción, el mismo señor que me hablaba al teléfono, me señaló hacia una especie de recibidor. Allí estaba el señor Alzamora esperándome, pero no estaba solo. Marc, también se encontraba allí.

Al principio creí que algo malo iba a pasar. Pero mis cierto nervios se esfumaron cuando Emilio y Marc me explicaron el protocolo. Lo básico lo sabía, proteger al piloto con el paraguas en la parrilla de salida, sostenerle una toalla para el sudor, mantenerle el bote de agua y mantenerme callada y sonriente para no desconcentrarle. Pero, tenía que saber la temperatura del agua y de la toalla al gusto de Marc, ya que en unas carreras hace más calor que en otras. También por el lado de la moto en que tenía que ponerme, cualquiera diría que es un maniático o supersticioso. Por otro lado, Emilio me entregó un calendario con los horarios de cada uno de los GP's.

Para cuando terminamos era la hora de cenar. El equipo, fuimos al bufet del hotel y cenamos juntos. No hizo falta presentaciones porque ya nos conocíamos todos.

Mañana comienza por fin la temporada de motociclismo. Y sí amigos, no me iba mucho ese mundillo dije alguna vez. Pero entre mis hermanos, los Márquez y amigos se encargaron de que yo formara parte de este. Ahora soy una más, que por formar parte del Repsol Honda tengo que animar (de puertas para afuera) a los dos pilotos (Márquez y Pedrosa), pero yo le tenía especial apoyo y confianza al pequeño de los hermanos Márquez. Sí, a Álex, porque yo si veo que tiene futuro y no ando diciendo que es hermano de. Lo que ha conseguido ha sido por mérito suyo.

Tocaba irse a la cama. Me había pasado varias horas hablando con Santi (mecánico de Marc), y aunque mañana no tocase levantarse temprano ya que en Qatar se corre de noche, yo estaba exhausta del viaje. Me despedí del equipo, fui a la habitación, me metí en la ducha y tras unos delicados minutos me tiré en la cama sin deshacerla ya que a pesar del aire acondicionado se notaba el calor. Me dormí.

Salto en el tiempo al final. A partir del siguiente capítulo empieza la emoción.

Vaya carreritas está haciendo Marc. ¡Vamos campeón esa es la línea!

Y Álex, casi la tuvo en Jerez. Pero va Pistolas, que no pasa nada. De los errores se aprende. Y verás como pronto estás ahí delante dando guerra. Ánimo campeón.