'El Escritor' • YoonMin | Completo✔

XI 'Abuela'

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YoonGi

Jiminnie estas despierto?

Podemos hablar?

Estas enojado?

Jiminnie, me dormí anoche

Jiminnie

Hyung lo siente mucho  (ಥ_ಥ) 

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Gruñó frustrado. El menor no estaba en linea y ni siquiera había visto los mensajes.

Al menos no me ha bloqueado aún... Pensó y se levantó de la cama dispuesto a tomar una ducha, antes de partir hacia el colegio. Tenía mucho tiempo, ya que había despertado dos horas antes y la institución quedaba a tan solo seis cuadras desde su casa.

— YoonGi, tienes una llamada — le dijo extrañada su madre, entrando a la cocina, era muy temprano. El nombrado se levantó de la mesa bajo la atenta mirada de sus dos padres y con una tostada a medio terminar, tomó el teléfono curioso de saber quien era.

— Diga...

— Tenemos que hablar — el blanquecino reconoció la voz, tensándose en ese instante. — Es urgente... Nos vemos en donde siempre después de clases... — YoonGi colgó. Sabía que nada bueno vendría.

— ¿Quién era? Es muy temprano — habló en tono reprochardor su padre sin apartar su vista del periódico que tenía entre las manos.

— Un compañero... Me llamó para pedirme que no olvidara llevar el libro que me prestó para devolvérselo... — mintió ágilmente y volvió a desayunar, con una preocupación latente en su ser.

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— Lo lamento mucho... — el menor lo miró con culpa y pesar. — No sabía que tenía estos sentimientos y ahora... Entiendeme, por favor que, no puedo pasarlos por alto, me costó mucho darme cuenta... No quice hacerte daño — YoonGi seguía sin mirarlo, sin hacer sonido alguno, ni siquiera mutando su semblante serio, desde que su pareja le confesó que no había aguantado y lo había engañado, con aquella persona a la cual el menor ahora sabía y le confesó que amaba. — ¿No dirás algo... Hyung? — YoonGi cerró los ojos instintivamente. Le dolió y mucho escuchar aquel "hyung", salir de esos labios. Aquellos los cuales le susurraron miles de apodos tiernos, que el mayor odiaba pero aún así aceptaba porque al menor le encantaba.

— ¿Qué quieres que diga? — su tono era monótono y distante, tratando de guardar lo poco que le quedaba de dignidad y orgullo al darse cuenta de que todo esto le afectaba demasiado, ya que por él, había quebrantado un poco, sus muros de protección que años le costó reforzar para no ser herido. 

— Yo...

— ¿Quieres que te aplauda? Bien, lo haré... — le interrumpió haciendo el gento que había nombrado. El menor abrió sus ojos sorprendido por aquello y ahogándo un sollozo, ya que hasta ese momento recién se dio cuenta de que YoonGi realmente lo quería y que sus sentimientos, a pesar de que pocas veces lo hacía notar, estaban allí y que el mayor estaba afectado por todo lo que pasaba. — No puedo creer que caí bajo los encantos de un mocoso mimado que solo jugó conmigo, como si fuese uno más... — soltó con saña y cegado por el dolor, sin importarle el contrario. Pensar que me sentía mal, sintiendo que te engañaba, por mandarme mensajes con Jiminnie y no queriendo darte mi número... Su mente no dejaba de reprocharse miles de cosas. — No vuelvas a llamarme o buscarme — finalizó tomando su mochila, saliendo de la cafetería, que para suerte de ambos estaba vacia y nadie logró ver el espectáculo, más que él dependiente del lugar que no prestó atención.