●○Extra 1○●

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Taehyung se sentía frustrado. Llevaba consigo demasiados secretos y de a poco comenzaba a sentirse cada vez más afixiado por ellos.

Amaba a sus dos mejores amigos al mismo tiempo y la situación lo traía mal, porque constantemente tenía que cuidar a ambos de todos los demás pretendientes -incluidas mujeres- que merodeaban alrededor de JungKook y JiMin.

Por momentos, no podía concebir la idea de que alguno de los dos estuviese con alguien más, pero por otros, trataba de mentalizarse que ambos no le pertenecían y debía dejarlos en paz con sus celos. No podía elegir a JungKook, porque amaba a JiMin y no podía confesarse a JiMin porque posiblemente este le rechazaría, porque JungKook sufriría o porque no le atrae de esa manera.

Sea como sea, Taehyung no podía siquiera pensar en perder a alguno de los dos. Por eso salía con diferentes personas, tratando de olvidar los sentimientos que sus dos amigos le generaban y debido a eso ahora estaba de novio, hacia más de dos meses, con un muchacho que había conocido desde niño en su ciudad natal, pero que dejó de frecuentar cuando se mudó a Seúl.

Le pesaba, algunas veces utilizar al muchacho, pero el de repetía, una y mil veces, que era necesario. Pero aún así sus sentimientos no desaparecían y todo empeoraba cuando alguno de sus dos amigos se sentía mal al no conseguir algo que no podía o cuando algo le salía mal. Taehyung no podía limitarse a sólo observar y callarse cuando, por ejemplo, a Jung Kook perdía -algo que no sucedía seguido, ya que la mayoría de las veces ganaba- una pelea en un torneo Taekwondo, o cuando JiMin se frustrada al no poder dominar un paso de baile.

Por eso, es que se concentraba en satisfacer y hacerlos sentir bien, aunque sea un momento a ambos con un regalo, unas palabras o lo que fuere e incluso se involucraba a tal punto de tratar de hacer las mismas actividades que los dos, para poder ayudarlos. Aunque no le salía muy bien que digamos, debido a que no podía igualar el talento de los otros dos en sus áreas particulares.

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Soltó un suspiro cansado cuando por cuarta vez, llamó a JiMin y este sólo rechazaba su llamada. Le había pasado lo mismo con Jungkook y no entendía que debían estar haciendo, para que ninguno le contestara.

Se levantó de su sofá, salió de la casa y le pidió a su chófer personal que lo llevase a casa de JiMin. 《SI Mahoma no va a la montaña, la montaña va a Mahoma》pensó mientras ya en el auto, se dirigía a casa de su amigo.

Al llegar, tocó la puerta de entrada un par de veces y fue recibido por Jin, quien encantado le dio paso libre a la casa y le dijo que Jimin estaba arriba, en su habitación junto con Jung Kook. Fruncio el ceño, pero asintió y se dirigió escaleras arriba en busca de sus amigos.

Una vez arriba se preocupó al no oir ruido alguno y con preocupación se adentró a la habitación, abriendo la puerta de golpe y haciendo sobresaltar a JungKook, quien extrañamente estaba arrodillado en el suelo, al lado de la puerta del baño de JiMin, la cual estaba entreabierta, claramente espiando por ella.

Se acercó y miró en dirección donde el menor estaba viendo hace unos segundos y se sonrojo al ver a Jimin de esa manera. Miró a JungKook que estaba petrificado en el suelo y abrió la boca para decir algo, pero el menor se abalanzó sobre el tapándole la boca y lo sacó de la habitación.

— ¡¿Qué demonios...?! — JungKook le regañó con la mirada cuando el mayor elevó la voz y Taehyung carraspeo. —¡¿Qué demonios estabas haciendo ahí viendo a JiMin masturbarse?! — exclamó en un susurro. Vio como el menor se sonrojaba y alzaba sus hombros con inocencia.

— Jimin se metió detro del baño porque no lo dejaba leer tranquilo la nueva actualización de su historia favorita en wattpad... — en cuanto el mayor escuchó el nombre de la famosa app, rodó los ojos. — ¡Me aburro cuando comienza a leer y me ignora! Es frustrante, parece como si se fuera a otro planeta — hizo un berrinche.

'El Escritor' • YoonMin  | Completo✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora