Esto es para siempre.

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Narra Luna

Estábamos volviendo con Matteo, acompañados por Gastón y Nina. Regresábamos de un reencuentro con todos nuestros amigos, incluidos Ámbar y Simón.

En el auto invadía un silencio tranquilo, mientras que de fondo se escuchaba la canción ''Crazy In Love''.

-¿Y...? ¿Para cuándo un sobrino?- Comentó Gastón.

-Eso, ya llevan dos años de casados, ¿nunca tocaron el tema?- Siguió Nina.

Le dediqué una mirada rápida a Matteo, quien estaba conduciendo.

-La verdad, nunca tuvimos posibilidad de hablarlo-afirmé.

-Aprovechen su edad, un hijo siempre es una bendición- dijo Nina.

-Imagínense las Lunitas y los Balsanitos que pueden cuidar y darle mucho amor.

Miré a Matteo de reojo y tenía su vista fija en la autopista, se giró al verme para regalarme una sonrisa. Apoyó su mano en mi pierna, acariciándola, luego atrapó mi mano y pude sentir su calidez y seguridad.

Creo que ya era el momento.

(...)

Llegamos a casa, deje las llaves en la mesa y me dirigí al baño.

Me cepillé los dientes, me miré de reojo al espejo y a un costado estaba Matteo apoyado en el marco de la puerta.

-¿Tú que piensas?-lo miré confundida, no entendía de lo que estaba hablando-Hablo de formar una familia de tres.

-¿quién sería el tercer integrante?

-Dale Luna, sabes de que te estoy hablando. Quiero tener un hijo con vos, para que juntos lo cuidemos, lo apoyemos y le demos todo el amor que puede nacer de nosotros.

-¿Y si todo sale mal? Si buscamos ese hijo tan esperado ¿y no lo encontramos?

-Lo afrontaremos de todas las formas posibles, porque amándonos nos damos esas fuerzas para seguir intentándolo.

Me quedé callada, de verdad deseaba con todo mí ser poder ser madre, y darle esa felicidad a Matteo, porque sé que dentro de su corazón anhela ser papá.

-Lo entiendo Luna, vamos a dormir y cuando tengas ganas, lo volvemos a hablar.

-Sí Matteo, quiero intentarlo. Porque sé que aunque me derrumbe siempre estarás ahí para reconstruirme. Quiero ser feliz a tu lado, quiero ser feliz siendo madre y formando nuestra familia.

-¿Enserio? Me haces el hombre más feliz de toda la faz, te prometo que todo va a estar bien, todo está bien.

Me tomó de la mano, fuimos camino hacia nuestra cama. Con Matteo hacíamos el amor muy seguido, siempre cuidándonos y hacer cada velada especial. Hoy era diferente, hoy empieza un largo camino por recorrer y hoy le entrego totalmente mi alma, mi ser y todo mi amor.

-Te amo-dijo Matteo en un susurro que termino siendo una beso tierno y a la vez apasionado.

-Te amo para toda la vida, Matteo-dejaba pequeños y fugaces besos por todo mi rostro, bajando hasta mi cuello.-Mi corazón late muy fuerte, no puedo creer lo que está pasando.

-Bueno Luna, tienes que creerlo porque esto es real y verdadero.

Comenzó a bajar el cierre de mi vestido, dejando besos húmedos en mi espalda. Me aferró a él volviéndonos a unir en un beso cálido y lleno de deseo. Saqué de a poco su remera, pude apreciar el gran físico que poseía, ¡mi esposo era un Dios griego! Este hombre nunca pierde el tiempo.

Me recostó suavemente en la cama, nuestra cama, regalándome besos por toda mi silueta. Mi pequeño cuerpo quedó debajo del suyo, podía sentir sus músculos tocar mi abdomen. Su miembro rozó mi feminidad, creando un ambiente lleno de pasión. Se deshizo de su pantalón y con él se fue su bóxer.

Eliminó mi ropa interior, quedando completamente desnudos. Lanzó un gruñido que se retuvo en el aire. Los dos conteníamos una excitación que estaba a punto de explotar.

-¿Sabes? Cuando te conocí no tenía idea de que íbamos a terminar de esta forma, pero algo de que sí estaba seguro es que sigo enamorado de ti como la primera vez-entró en mí como un huracán, destruyendo todo el mal que se acumulaba en mi cuerpo. Recorrí todo su cuerpo, despeinando su alborotados rulos-Fuiste un antes y después en mi vida, llenaste todo de color vivos como tú, eres la mejor persona que tengo a mi lado.-Entraba y salía de mí, haciéndome gemir. Repetía su nombre cada cinco segundos.

-Matteo...Me traes locamente enamorada.-dije en un susurro.

Con su dedo índice recorría cada centímetro de mi piel haciéndome retorcer de placer.

Matteo se tumbó en la cama al lado mío, recobrábamos la respiración mientras sonreíamos.

-La mejor noche de mi vida.

-Nuestra mejor noche, te amo, te amo.

Nos tapamos con las sábanas blancas, me recosté sobre él mientras acariciaba mi cabello.

Le di un beso puro, lleno de energía y fe. Íbamos a formar una familia tarde o temprano y no podía despegar la sonrisa de mi rostro.

-Buenas noches, amor. Que duermas bien.

-Que sueñes conmigo-dije.

-Y con nuestro bebé.

-Te amo.

-Para siempre.

Caímos en un sueño profundo después de habernos sentido únicos, especiales y verdaderos.

(...)

Estaba asustada y llena de fe al mismo tiempo. Había hecho el test de embarazo, tenía que esperar unos minutos para que haga efecto y ver el resultado. Había pasado una semana y media después de aquel acto de amor que había quedado en nuestras mentes créanme, nunca lo olvidaríamos.

Nos encontrábamos Matteo y yo, tomados de la mano y dedicándonos sonrisas alentadoras para lo que iba a venir.

-Amor, ya debe estar. Dale, anda.-dio unos leves golpecitos en mi espalda.

-Tengo miedo.

-Shh, sea lo que sea, recuerda que estoy para vos pase lo que pase.

-Te amo mucho.

-Y yo a vos, dale, mucha suerte.

Entré al baño y cerré la puerta con cuidado. Allí se encontraba la respuesta, tome el test, ¿Cuántas rayitas tiene?

Narra Matteo.

No lo iba a negar estaba muerto de nervios, me recorrían en todo el cuerpo.

La vi salir del baño llorando.

-Mi amor, ¿Qué tal?

Se tapó la boca y comenzó a hacer unos movimientos con la cabeza.

-Amor, ¿está todo bien?

Me extendió el test y lo tomé temblando.

-Mi amor-la miré-¡Estamos embarazados!

Vi aquel objeto que marcaba dos rayitas, levanté mi vista para ver a mi mujer, a la mamá de nuestro futuro bebé...AL AMOR DE MI VIDA.

-Te amo, soy la mujer más completa del universo. Te amo y estoy ansiosa por empezar este gran futuro con vos.

-Te amo Valente, esto es para siempre.

n/a: espero que es haya gustado, no es tan hot como podían esperarse pero algo es algo, decidimos ponerle mucho amor a este capitulo ya que eso nos trasmite esta pareja. Comenten que les pareció, les recomendamos no sacar la novela de sus bibliotecas ya que podemos hacer capítulos extras si así o prefieren para no abandonar esta bella historia. 

Los amamos. ♥

Con amor, Lu y Flor.

Conmigo no, Valente. [Lutteo] #SevillaAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora