Los treinta y cinco candidatos sobrevivientes de las pruebas físicas, se encontraban de nuevo en el gran comedor para desayunar después de su día de descanso.
Ahora ese comedor empezaba a verse vacío, pues ya muchos de sus compañeros habían sido enviados de vuelta a sus hogares.
Keira tomó la palabra:
—Muchas mesas se han quedado con uno o dos candidatos. Así que habrá una restructuración, las mesas deben estar completas, porque es importante el apoyo que os deis unos a otros. Ya estáis fuera de vuestras familias y amigos, así que no vamos a hacer que también os sintáis solos aquí.
»Como sois treinta y cinco, ocupareis las siete mesas primeras.
»El sistema de descalificación de las pruebas mentales e intelectuales, será diferentes al de las pruebas físicas. Por los siguientes cuatro días empezando desde hoy, los treinta y cinco continuaréis hasta el final, o sea que no iremos descartando a unos cuantos día tras día. Y después de todas las evaluaciones, al finalizar el último día, mencionaremos los nombres de los tres que pasaréis a ser Los Conectores de Aurin.
»Ahora podéis juntaros como queráis, pero las siete mesas deben de estar completas. Buen desayuno.
»Cuando acabéis, nos vemos aquí en una hora, en la planta tercera del edificio, donde están las aulas que hemos preparado para vuestra evaluación mental.
»Hasta luego.
Así se despidió la doctora Keira.
Todos los candidatos se levantaron de sus respectivas mesas y se pusieron a ocupar las siete primeras de la sala.
Rash y Abigail se unieron a la mesa en la que estaban Peter, Alex y Dharanna.
Alex, tomó la palabra después que empezaron todos a desayunar
—¿Qué os pasa que estáis tan callados hoy? Parece que hayáis venido de un entierro.
—Eso mismo me pregunto yo —dijo Dharanna.
El caso es que, tanto Rash, como Peter y Abigail, estaban pensativos y echaban de menos a Gia, Ricky y Cristy. Esa mañana en especial no estaban muy motivados.
Ninguno de los tres dijo nada, se limitaron a levantar la cabeza y a mirar por un segundo a Alex y Dharanna, y continuaron desayunando.
—Bueno, Alex —dijo Dharanna—, estos tres son unos aburridos.
—No, a lo mejor es que ya se están preparando para las pruebas intelectuales, —contestó riendo Alex.
—Vale, ahora veremos musculitos si también tienes un cerebrito ahí dentro —contestó sarcásticamente Rash a Alex.
—Vaya, si también habla nuestro payaso de Rash.
—¡Haya paz! —Tomó la palabra Abigail—. Por lo visto, todos estamos un poco tensos esta mañana.
—Entonces, sonó la melodía de costumbre, para indicar que ya era la hora de acabar de desayunar.
—Vale, te ha salvado la campana —le replicó Rash a Alex—, pero luego nos vemos en el segundo asalto —respondió como si estuvieran en un cuadrilátero de boxeo.
Se dirigieron todos a la planta tercera del edificio.
Allí estaba el profesor Ciro que situó a cada uno del grupo en una mesa con un ordenador moderno de última generación.
—Bueno, chicos y chicas, durante el día de hoy, evaluaremos vuestra habilidad y velocidad mental para resolver problemas, acertijos, y cosas por el estilo. Examinaremos además qué tal andáis de memoria y de conocimientos generales.
ESTÁS LEYENDO
Los Conectores 1: Descubriendo Aurin (Completa)
Science-Fiction¿Qué harías si descubrieras que no existes realmente, pero al mismo tiempo eres una pieza clave para la supervivencia de millones de seres...? ¿Qué harías si tuvieras una cualidad única especial, y por ello corriera peligro tu vida? Descúbr...