El Masajista

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Lo miro, veo como duerme, es lindo tenerlo a mi lado, no me imagino en otro lado que no sea con el, lo empiezo a querer es poco pero lo quiero, quiero que este a mi lado mucho tiempo aunque el me haya dicho que no puede, se que es mentira y también se que el puede darme mas, se que el puede tener una relación.
Damián despertaba poco a poco - Hola- me sonríe - ¿llevas mucho tiempo despierta?
- No, apenas unos minutos ¿por?
- El helado se derritió
- Mmmm,no, mi tía de lo llevó
- ¿ Tu tía nos vio dormidos?- parece asustado
- Solo dormíamos no hicimos nada malo
- Se puede mal interpretar, no quiero problemas
- ¿ Quieres que te de problemas?
- No Danna es sólo que...
- Damián..... Es el momento
- Danna no le voy a faltar al respeto a tu casa ni a tu tía
- Damián mi tía no esta
- Pequeña alborotadora
- Sólo te alboroto a ti
- Eso espero
- ¿ Por quien me tomas? - me coloco sobre el, quedamos frente a frente, le doy un beso casto - No te hagas del rogar se que lo quieres al igual que yo
- Lo quiero pero es el momento - beso su clavícula, mordisqueo un poco- Buen intento - su miembro rosa mi feminidad, gime un poco - Danna para o no me voy a controlar - muevo las caderas un poco mas, de pronto me encuentro con la espalda pegada al colchón - Las reglas del juego las pongo yo nena- sonrió victoriosa, por fin.
Comienza a recorrerme el cuerpo, su boca me recorre, desciende poco a poco por mi cuello, se deshace de mi blusa.
Me siento doblegada, mis manos pasan por su cabello, se pone a mi altura, no tardo mucho en quitarle la playera, se que trata de controlarse.
Tiro de el pero no cede, aun así logro tenerlo debajo de mi, le beso el torso, siento su piel mientras desabrocha mi sujetador, mis manos llegan  hasta el cinturón, lo desabrocho, mis manos son un poco torpes aun así consigo desabrochar el botón y el cinturón de Damián, su boca atrapa la mía, mis manos siguen haciendo su trabajo, acaricio su erección, la tela del bóxer esta estorbando mucho, sus manos toman mi cintura de manera firme, vuelvo a estar debajo de el, mi mano no se mueve de su lugar pero.....me toma la muñeca y la quita, ¿ A caso le ha molestado ?
Veo que me he equivocado cuando soy despojada de mis  pantalones y bragas, estoy totalmente expuesta a el.
Mi respiración se torna entrecortada lo quiero ahora.
- Vamos a ver que te puedo dar, ponte boca abajo - enseguida lo hago.
Escucho como los pantalones caen al suelo, la cama se hunda bajo su peso y en menos de un minuto lo tengo sobre mi, sus manos me recorren la espalda, enseguida siento que los músculos se me tensan- Tranquila, relajate - se me dificulta un poco el respirar ¿porque no lo hace y ya? Salgo de mis pensamientos al sentir sus dientes morder mi hombro, siento una punzada dolor y  de placer.
Casi puedo escuchar su sonrisa- Damián
- Shh, nada de Damián ahora vamos a ver que tan receptiva eres- su voz es profunda ha cambiado un poco, gimo al sentir uno de sus dedos en mi interior - Estas muy mojada Danna - mueve un poco, eso hace que mi pequeño manojito de nervios estalle
- Aún no empiezo Danna - me muerde una nalga, sus dientes se encajan aun mas haciéndome soltar un leve grito.
Me voltea, estamos de nuevo frente a frente, sus ojos muestran deseo, excitación. Esta muy cerca de mi lo puedo sentir a punto de entrar en mi, levanto las caderas, lo provoco un poco, me inmoviliza.
Toma uno de mis senos lo estruja un poco- No me torturse mas Damián
- No lo hago, es sólo que si te escuchó gritar mi nombre quiero que sea con provecho
- Damián- trato de cerrar las piernas
Para evitar que haga eso, se hace para adelante, me levanto un poco al sentirlo casi dentro, aun no me llena pero al menos....... por fin se adentra le encajo las uñas en los hombros, me duele, me siento totalmente empalada - Estas muy estrecha ¿te hago daño?
- No, no estoy bien - unas lágrimas se me escapan- Pronto me voy a amoldar a ti
Damián esconde la cara en mi cuello, me besa, me muerde, tal vez tenga algunas marcas el día de mañana pero esto lo vale.
Esta quieto, me muevo un poco- Eres muy impaciente Danna
- Damián no me sigas torturando
Se mueve un poco, de nuevo siento esa excitación.
Coloca los brazos al costado de mi cabeza, no quiere echar todo el peso sobre mi.
Arremete contra mi, una y otra vez, dentro y fuera, nuestros cuerpos chocan.
Esto me gusta, cruzo los pies por encima de su espalda, lo acerco mas a mi.
Mis labios están hinchados de tanto besarlo pero no quiero parar quiero mas de el, lo necesito, lo deseo con tantas ansias.
Deseo que se quede a mi lado por mucho tiempo, quiero que sea algo mas que esto, quiero que el sea solo para mi.
Acelera sus estocadas- Damián- digo al sentirme cerca, a nada de llegar a mi clímax
- Dámelo Danna vamos dámelo
Sin mas explotamos juntos, lo siento llenarme de el.
Cae encima de mi, me aplasta un poco pero lejos de molestarme me gusta, me gusta esa cercanía.
Su espalda sube y baja, es una respiración un poco agitada pero se recupera poco a poco, no se mueve.
Se ha quedado dormido, sonrió también estoy cansada y sólo quiero dormir, lo abrazo, por un momento quiero que este momento nunca termine, mi corazón late un poco lento pero aun así estoy contenta.
Lo abrazo, lo pego mas a mi, cierro los ojos y me dejo llevar por ese bello aroma.
Por su cercanía y por mi cansancio.