Me encuentro camino al médico, estoy nerviosa y me es miedo encontrarme con algo malo.
- Ya Danna no será tan malo
- Tía me es miedo que me digan que me voy a morir o lago así
- No exageres Danna Sullivan, aun estas joven y puede dar más, además ya te vas a hacer cargo de la empresa.
- ¿Eso claro sólo la central?
- Desde la central dirigirás las demás
- Esta bien
Mi teléfono suena.
“ en el cine a las cinco de la tarde....que no se te olvide
Bss. Damián ”
Sonrío como una tonta al ver ese mensaje.
Llegamos hasta el hospital, he decidido que será un hospital público en el cual me he de atender, mi tía y yo discutimos pero al final aceptó que lo hiciera.
Sacamos ficha, esperamos un tiempo prudente y por fin escucho mi nombre.
Entramos al consultorio la doctora me mira con una sonrisa en la cara - Bien señorita Sullivan digame lo que le pasa.
- Pues mi tía insistió en que viniera
- Me alegra que Mariza te haya obligado
- Pues tiene que ver con mi corazón, en ocasiones siento que late muy fuerte y en otras muy lento y me canso, me desmayé un día y de repente se le llegan al olvidar las cosas - Ya veo - se levanta y camina hasta mi- voy a revisar tu respiración y los latidos de tu corazón
-Esta bien
-¿ Tuviste un familiar con problemas cardiovasculares?
- Yo....no se
- Su padre- dice mi tía
- Bien pues tendré que mandarte a hacer unos estudios
- ¿ Es grave?
- Puede ser lo si no lo tratamos a tiempo
- Esta bien
Me hace un orden para hacer los estudios - Es en una semana, en cuanto tengas los resultados vienes de nuevo
- Si, claro
Nos vamos del hospital - Podemos ir a un particular
- No veo nada de malo en asistir a los hospitales públicos por eso pagamos impuestos tía
- Esta bien
Me lleva a comer, últimamente he tenido mucha hambre, entramos a una cafetería, lo que me recuerda que no he ido a trabajar además de que debo renunciar para así poder cumplir con la empresa.
Desayunamos un poco de fruta, pan y un café, gran desayuno.
Después de estar un buen tiempo en ese establecimiento, volvemos a casa, me preocupa mi salud, se que Damián va a preguntar sobre lo que ha dicho el médico.
Pronto llegan las cinco de la tarde me encuentro en el club, llego hasta donde hay un spa.
Pregunto por Damián pero no trabaja ahí, un chico muy amable me dice cual es el lugar en el que el trabaja.
Después de caminar mucho llego hasta donde me han indicado, entro al lugar, una chica que supongo es la recepcionista me mira indiferente
- Hola buen día ¿ Aquí trabaja Damián Siller?
- Si ¿ Quien lo busca?¿ Tiene cita?
- No...pero
- Esta atendiendo una clienta - escucho una voz a mis espaldas
- Pero te puedo mostrar algo
- ¿ Claro?
Me lleva hasta su oficina, me siento en frente del escritorio -¿ Que eres de Damián?
- Su amiga
- Mmm ya veo por eso sales con el a diferentes lugares?
- Los amigos podemos salir
- No Danna
-¿ Como...
-¿ Como se tu nombre?
- Si
- Lo que representa una amenaza para mi lo investigo
- Ya veo
- ¿ Conoces los masajes con final feliz?
- Es de esos masajes en donde sales con una carita feliz en la frente - la mujer ríe
- No, me sorprende tu inocencia
- ¿ Tiene que ver con sexo?
- Exacto veo que eres inteligente
- Y eso nos lleva a:
- Nos lleva a decirte que Damián da masajes con final feliz
Me sorprendo ante tal confesión- No lo creo
- Mira por ti misma
La pantalla de su computadora muestra un vídeo......es el y esta follando a una mujer
- Es montaje
-Lo puedes encontrar en ese lugar
- Quiero una sesión ahora mismo
- No creo que el quiere algo así
- Pagaré muy bien
- Se ve que no tienes ni do de caerte muerta
- No me subestime señora
- Esta bien le diré
Toma el teléfono y marca un número, en la pantalla se ve que contesta.
No cabe duda que es verdad lo que veo.
Inhalo comienza a palpitar mi corazón, es lento pero es suficiente para mi.
Se ve que discute pero al final acepta
- Ve, el te espera
Me alisto para ir.
Llego al lugar y el no esta, me subo a donde da los masajes, llega.
- Bien será rápido
Comienza a masajearme, sus manos son revitalizantes.
El masaje se extiende hasta mi ingle, me rosa levemente la feminidad, trato de reprimir un gemido - No te tenses solo disfruta - se un de la tabla de masajes, el me masajea la cintura
- Muy bien - escucho que abre un preservativo. Me levanta la cintura
Entre en mi.
Sus movimientos son frenéticos, adentro y afuera, trato de no disfrutarlo pero fracaso en el intento, es delicioso, sabe lo que hace.
Escucho un gruñido por parte de el, se que esta listo, que se va a correr.
Llega a su clímax con la pequeña diferencia que yo no.
No me he corrido pero sobre todo no he sentido su líquido dentro de mi.
Me siento fría, sale de lugar, me acomodo el cabello, es distinto a lo que a penas he probado de el.
No fue atento, no me beso, solo lo hizo y ya.
- La sesión ha terminado - le urge irse
- Te dije que no lo olvidaría
- ¿ El que?
- No olvidaría nuestra cita, por primera vez nadie la ha interrumpido
- ¿ Danna?
- La misma - me toma de los hombros, aparta el cabello de mi rostro.
No puedo mirarlo a los ojos
- Danna......yo
- Damián ¿ A caso me mentiste?
- No, te dije que era masajista
- Pero no me dijiste que eras un masajista sexual, es como si venideras tu cuerpo
- No, no lo hago
- Te pagan por esto
- Danna escuchame
- No, no quiero oírte, sueltame
Me levanto de la camilla ,voy a la salida, no quiero que me siga pero lo hace, va tras de mi.
No tengo mas opción que salir del spa y correr aunque este medio desnuda.

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El Masajista
Teen FictionDanna es una chica que lleva una vida cómoda sin embargo está llena de miedos e inseguridades. Todo cambia cuando conoce a Damián, un hombre que insiste en tener un encuentro con ella. Portada hecha por: @LuzuMartinez QUEDA ESTRICTAMENTE PROHIBIDA ...