Universe and U

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Cuando desperté a la mañana siguiente, percibí que estaba sola en la cama, miré al reloj y vi que todavía eran las 07:30 de la mañana. La puerta del baño se abrió lentamente y Emma apareció enrollada en una toalla y con el cabello mojado, hacía tanto tiempo que no presenciaba esa escena.

Continúe observando a Emma cambiarse, una sonrisa boba nacía en mis labios, entonces ella se viró y se quedó mirándome con una mirada tímida.

«Podría quedarme mirándote horas» comenté sentándome en la cama.

«¿Ah sí?» preguntó Emma acercándose a mí, sus labios me tocaron provocándome una ola de sensaciones por todo mi cuerpo, poco a poco el beso se hizo más intenso y más urgente, hasta que ella se distanció «Voy a preparar nuestro desayuno»

«Eso puede esperar» dije atrayéndola para otro beso

«Olvidé lo insaciable que eres» dijo quitándome la parte de arriba del pijama «¿No trabajas hoy?»

«Más tarde» murmuré mientras distribuía pequeños besos por su cuello.

«Óptimo» dijo Emma sacando el resto de prendas.

Estaba en el despacho resolviendo varias cosas cuando Neal apareció trayéndome el informe. Me di cuenta de que esa sería una buena oportunidad para tener una conversación sería con él y comunicarle que Emma volvería a su cargo.

«Sheriff, tenemos que hablar» dije colocándome mejor en la silla

«¿Sobre?» me preguntó mientras se sentaba

«Bien, sus días en este cargo están llegando a su fin» dije con una pequeña sonrisa

«¿He hecho algo que no le ha agradado?» Neal preguntó serio

«Emma retomará el puesto en breve» él me miró confuso «¿Qué pasa?»

«¿Cambió de idea? Porque ayer mismo Emma me dijo que no volvería» dijo él ajustándose la chaqueta

«¿Eso dijo?» Neal confirmó con la cabeza «Claro que lo dijo»

«Disculpe, pero, ¿usted tiene algo contra mí, Regina?»

«Para usted es Alcaldesa Mills, sheriff» respondí secamente «Puede marcharse»

«Con permiso» y tras decir eso, se marchó

Con ayuda de David y de Ruby traje todas mis cosas para la mansión, colocamos todo mientras Cora preparaba el almuerzo. Les había contado mi plan a David y a Cora, y por supuesto les había gustado, ahora solo tenía que ponerlo en práctica.

Regina llegó, saludó a todos y me empujó para el cuarto, al cerrar la puerta, noté lo sería que estaba.

«¿Cuándo ve lo ibas a decir?» quebró el silencio

«¿El qué?»

«Que no pretendías regresar a tu antiguo cargo» respondió Regina cruzándose de brazos de forma autoritaria «Me tuve que enterar por Neal»

«Te lo iba a contar ayer, pero estuvimos muy ocupadas» sonreí sentándome en la cama «Disculpa por no haberte informado primero, pero quiero pasar más tiempo contigo y recuperar el tiempo perdido, si es posible»

«¿De verdad?» preguntó ella más calmada, entonces me levanté y fui hacia su dirección, envolviéndola en un abrazo apretado.

«De verdad, mi amor» le susurré depositando un beso en su mejilla «¿Vamos a almorzar?»

«Vamos»

Todo aconteció con normalidad, charlamos, reímos de algunas cosas, entonces miré a Ruby que me hizo una señal positiva, cosa que no pasó desapercibida para Regina. Después del almuerzo, David y Ruby se fueron, y Cora se fue a ver su serie preferida. Al llegar al cuarto me encontré a Regina saliendo del baño, me eché en la cama y me quedé mirándola.

«Gina...» ella no me miró «Amor...»

«Hm»

«¿Qué te parece si tenemos hijos?» ella me miró sorprendida, me senté para mirarla mejor

«¿De verdad?» dije que sí con la cabeza «Emma, ¿me estás diciendo que quieres un hijo?»

«Claro, creo que ya es el momento» entonces Regina se lanzó a mi regazo y me beso «¡Wow!»

«No sabes qué feliz estoy al oír eso» pude notar que sus ojos estaban brillantes, ese siempre fue su sueño «¿Estás segura?»

«Sí, lo estoy, antes estaba algo insegura, pero ahora sé que estoy preparada»

«He esperado tanto por esto» dijo Regina descansando su cabeza en mis hombros

«Cuando estés lista solo tienes que decírmelo» ella alzó la cabeza y me miró durante unos minutos, y entonces una sonrisa nació en sus labios «Por tu expresión va a ser pronto»

«Pero no es tan fácil» confirmé con la cabeza «¿Por dónde empezamos?»

«Vamos a tener que averiguarlo» respondí besándole la cabeza, nos quedamos echadas en silencio disfrutando de la mutua presencia, hasta que mi móvil comenzó a sonar «Un momento, Gina»

Me encontraba tan feliz, primero no me creía que mi sueño de ser madre se estaba empezando a realizar. Cogí mi móvil y tecleé el número de Belle y esperé

«Belle, no te lo vas a creer» le dije tan pronto como atendió

«¿Qué fue?»

«Finalmente voy a realizar mi sueño» respondí animada

«¿Vas a hacer un dueto con Shakira?» preguntó riendo

«Eso todavía no» respondí saltando de la cama «Emma quiere tener hijos»

«¿QUÉ?»

«Eso mismo, me lo acaba de decir» respondí contenta «Estoy que no quepo de felicidad»

«Regina, eso es fantástico» dijo Belle también animada «¿Y cuándo pretendes hacerlo? ¿Vais a optar por la adopción?»

«Todavía no sabemos» respondí viendo que Emma había vuelto al cuarto «Ya vemos»

«Bien, tengo un amigo que es médico, os puede ayudar con eso» sugirió Belle

«Buena idea, voy a hablar con ella»

«Cualquier cosa, llámame, ¿ok? Estoy muy feliz con esta noticia, ahora te dejo, tengo que irme»

«Cuídate»

«Tú también» cortó la llamada.

Miré a la rubia de mi lado y la besé, volvimos a abrazarnos, Emma me hacía caricias en mis cabellos mientras yo trazaba dibujos aleatorios en su brazo.

«¿Regina?»

«Hm» ella se salió del abrazo «¿Qué pasa?»

«Tengo algo para ti» Emma se levantó y caminó hasta su bolso y vi que sacaba una pequeña caja de terciopelo de él. «Bueno, no tuvimos la oportunidad de celebrar nuestros tres últimos aniversarios de boda, ya que estaba en coma. Nuestro matrimonio, antes del accidente, no iba muy bien, nos distanciamos, peleábamos más, y hacía bastante tiempo que no hacíamos el amor» ella rio agarrando mi mano y sacó mi alianza «El día del accidente había salido antes de la comisaria y había ido a una tienda a comprarte un regalo, escogí el anillo más hermoso y decidí que de esa noche no pasaría»

«Emma, ¿qué...»

«Todavía no he terminado» me interrumpió colocando su dedo en mis labios «En aquella cena yo te iba a hacer una pregunta, pero no tuve la oportunidad» mis ojos se estaban humedeciendo ante cada palabra que Emma decía, entonces abrió la caja dejando ver una alianza y se arrodilló a mi lado, agarrando mi mano «Regina Mills Swan, ¿te gustaría casarte conmigo otra vez?»


Losing your memoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora