Is this love

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Seis meses...

La casa era una algarabía. Emma ayudaba a David con la decoración del cuarto de nuestros hijos mientras mi madre preparaba el almuerzo junto con Mary, mi pequeño Adam estaba jugando a los videojuegos con Ruby y Neal en el salón. Mi barriga estaba enorme y ya me dificultaba el caminar, me pasaba la mayor parte del día echada en la cama sin hacer nada y ya me estaba empezando a irritar profundamente.

«¿Cómo está la embarazada más bella del universo?» preguntó Emma entrando en el cuarto con una bandeja «Lo traje para ti, mi amor»

«Emma, quiero salir de aquí» dije poniendo morritos «Estoy cansada de quedarme todo el día acostada»

«Lo sé, mi amor» se sentó a mi lado y comenzó a pasar la mano por mi barriga y en ese mismo momento los bebés empezaron a moverse «Creo que saben quién soy»

«Claro que lo saben» Emma rozó su nariz con la mía haciéndome reír «¿Cómo va la decoración?»

«Ya está todo listo para la llegada de estos pequeños» respondió depositando un beso en mi barriga y después posó sus labios en los míos en un beso dulce y apasionado que poco a poco se hizo más intenso y urgente, pero entonces la puerta se abrió y apareció mi madre.

«¿Molesto?» preguntó con la más cínica de las sonrisa en los labios

«Claro que no, suegrecita» respondió Emma devolviéndole la sonrisa, cosa que irritó a mi madre.

«¿Ha pasado algo, mamá?» pregunté descansando mi cabeza en el hombro de Emma

«Solo vine a avisar de que el almuerzo está listo» respondió fusilando a Emma con la mirada.

«Voy a tomar un baño» dije intentando levantarme, lo que resultó ser misión imposible, entonces Emma agarró mis manos y me ayudó «Gracias»

«Ven, voy a ayudarte a tomar el baño» dijo besando mi cabeza.

Siete meses...

«Entonces, ¿todo está bien con nuestros hijos?» preguntó Emma mirando a Whale.

«Todo está perfecto» sonrió dándonos una foto de la ecografía «Ahora solo tenéis que estar alerta, ¿ok? Cualquier cosa, llámenme»

«¿Van a nacer a su debido tiempo?» pregunté agarrando la mano de Emma

«Todo indica que sí» respondió Whale

«¡Gracias por todo!» de camino a casa pasamos frente a una tienda de ropita de bebé, le pedí a Emma que parase y así lo hizo. Cuando entramos, me quedé encantada con el sitio, ya teníamos ropas para nuestros pequeños, pero cuando veía esas ropas siempre tenía ganas de comprar más «Mira Emma» le dije enseñándole un vestido rosa precioso «Vamos a llevar dos»

«Sí, señora» Emma sonrió agarrando mi mano, compramos diversas prendas y juguetes para nuestros hijos. Al llegar a casa fuimos al cuarto de nuestros bebés para guardar las cosas «Dentro de poco estarán aquí con nosotros»

«No veo la hora, ¿lo sabes?» Emma me abrazó por detrás, nos quedamos así abrazadas un buen rato, mirando cada detalle de aquel cuarto, hasta que escuchamos voces en la planta de abajo, eran mi madre y Adam «Vamos a comer algo, estoy hambrienta»

«Siempre estás hambrienta» le di una pequeña palmada en su brazo haciéndola reír.

«¡Ma, mamá!» exclamó Adam acercándose a nosotras «¿Cómo están mis hermanitos?»

«Están bien, cariño» respondí revolviéndole el pelo

«Dentro de poco, estarán aquí, pequeño» comentó Emma cogiéndolo en brazos «Ahora vamos a comer porque tu madre está hambrienta»

Ochos meses...

El día estaba lluvioso y frío. Llamé a Mary para pedirle que se quedase con Regina y Adam mientras yo iba a trabajar. Las horas pasaron rápidamente y enseguida anocheció. Hice una ronda más. Mi móvil comenzó a sonar sin parar, cuando miré la pantalla, el nombre de Mary parpadeaba.

«Hey, ¿ha pasado algo?» pregunté deteniéndome frente a Granny's

«Emma, es la hora»

«¿Hora de qué, Mary?» pregunté corriendo hacia el restaurante, que estaba lleno, y cuando estaba saludando a Ruby escuché un grito de fondo «¿Mary?»

«Emma, tus hijos van a nacer» decía Mary agitada «Ven rápido a casa»

«Ok...»

Me quedé paralizada en el mismo sitio mirando a la nada. Entonces, ya era la hora. Mi cuerpo fue movido y cuando me vi a Ruby de frente, la abracé fuertemente.

«¡Mis hijos están naciendo!»

«¿QUÉ?» gritó la morena llamando la atención de todos

«Regina está dando a luz» respondí poniéndome nerviosa «Tengo que irme»

«Voy contigo»

Corrí lo más rápido que pude, entonces Mary me llamó de nuevo avisándome de que acababa de llegar al hospital con Regina, Adam, Neal y David. Minutos después estacioné el coche en uno de los aparcamientos y corrí al interior del hospital buscando a Regina.

«¿Dónde está?» pregunté cuando divisé a David

«Emma, por aquí» dijo Mary saliendo de una de las salas

«Emma...» me acerqué a Regina, agarrando fuertemente su mano. Regina sudaba y gritaba de dolor «No sé si lo voy a soportar»

«Mi amor, eres fuerte. Lo conseguiremos, ¿ok?» besé su cabeza, entonces el Dr. Whale entró con tres enfermeras avisando de que se llevaría a Regina «Yo quiero ir»

«Muy bien, Emma» Whale comentó explorando a Regina «¡Vamos entonces!»

«Todo va a ir bien, mi amor» miré profundamente los iris castaños intentando traspasarle confianza y fuerza.

«¡Nacieron!» grité entrando en la sala de espera. Todos sonrieron aliviados con la noticia, entonces comencé a recibir abrazos y felicitaciones. Al entrar en el cuarto, encontré a Regina con una enorme sonrisa mientras amamantaba a Helena, me acerqué a ella, y le di un prolongado beso en la cabeza. Fui a mirar a Anna y a Henry que dormían como ángeles «Él se parece a ti»

«Anna tiene el cabello rubio como tú» comentó Regina con voz ronca «Y Helena se parece a las dos» concluyó sonriéndole a Helena que estaba en sus brazos.

«¿Puedo entrar?» miramos a la puerta y vimos a Adam con una tímida sonrisa

«Claro, mi amor, ven a conocer a tus hermanitos» dije en un tono bajo y haciéndole una señal con la mano. Él se sentó al lado de Regina y comenzó a jugar con Helena cuando Henry comenzó a llorar «Déjame a mí» cogí al pequeño en mis brazos mientras abría los ojitos con pereza «Creo que alguien tiene hambre»

«Pon a Helena en la cuna y tráemelo» pidió Regina

Al amanecer, desperté y miré a Regina que dormía tranquilamente. Me acerqué a las cunas donde Anna, Helena y Henry dormían como ángeles y sonreí. El resto del día trascurrió normal, recibimos visitas, pasé por casa para tomar un baño y comer algo y después volví al hospital.

«Whale acaba de salir» dijo Regina haciéndome una señal para que me sentara en la cama «Mañana me dará el alta»

«Eso es una buena noticia, mi amor» besé su mejilla «¿Preparada para pasar noches sin dormir?»

«¿Tú lo estás?» ella sonrió rozando su nariz con la mía

«Con certeza...» susurré encerrando sus labios en una apasionado beso «Te amo mucho Regina»

«Lo sé» sonrió volviendo a besarme otra vez «Yo también te amo mucho, Emma»


Losing your memoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora