Después de dejar a Mel en su casa volví a casa y me arreglé para salir a cenar. Mis padres salían juntos a cenar y mi hermano solo Dios sabía dónde estaría.
Mientras decidía que ponerme suena mi móvil y es una llamada, me sorprendo porque no espero a nadie, cuando miro quién es veo: Ale.
Estoy tan sorprendida de que Ale me esté llamando que decido no contestar y seguir buscando algo decente que ponerme. Después de estar un buen rato acicalándome voy hacia el comedor a preguntarle a mí madre qué tal, no me quería maquillar mucho y me he maquillado muy suave y un poco de color en los labios. Mi madre con una sonrisa de oreja a oreja me dice que estoy increíble. Pero que va a decir si es mi madre.
Me despido de ellos, preparo mi bolso y espero la llamada de Matt para irnos a cenar.
Matt tarda pocos instantes en llamar, le contesto diciéndole que ya salía.
Al salir estaba junto al coche, esperando para abrirme la puerta para subir. Me acerqué a él para saludarle con dos besos a lo que él respondió sujetándome las mejillas y un beso muy cerca de mi boca.
Al segundo se incorpora para abrir la puerta y subo al coche.
+Donde vamos capitán? -le pregunto.
-Pronto lo verás, impaciente. -respondió Matt con una sonrisa.
Tardamos unos 10 minutos en llegar. En la puerta un aparca-coches recogió las llaves y se llevó el vehículo a estacionar. Nosotros entramos, al entrar nos recibió una mujer y un hombre y se ofreció a guardar nuestras cazadoras. Yo no podía dejar de mirarlo todo como una loca. Era un restaurante muy elegante. Era todo excesivamente lujoso. Tenía apariencia de ser muy caro.
Matt me ofreció su brazo mientras nos asignaban mesa. Pase mi mano por su brazo y le sonreí.
El sofisticado metre nos dirigió a la lujosa mesa.
Estaba deseando llegar para poder hablar tranquilamente con Matt.
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AGARRA EL TIMÓN
Teen FictionJóvenes con historia, historias de jóvenes, jóvenes historias. Qué dice más? La verdad o la mentira?
