El ascensor se detiene. Bajo y con algún que otro problemita típico de las maletas consigo cargarlas y salir del edificio. Acto seguido oigo a mi madre gritar mi nombre, y de repente una sensación agradable invade mi cuerpo y voy hacia ella para darle un fuerte abrazo y fuerte beso. Entre las dos subimos las maletas al coche y nos disponemos a volver a casa.
Durante el trayecto le voy contando a mi madre todas las buenas y malas experiencias que he vivido, mi madre se ríe y me dice que soy una joven muy lista. A lo que ambas sonreímos. Al llegar a casa saludo a mi padre y a mi hermano. Luego aprovecho para sacar de las maletas mi ropa, cuando entra mi madre y me informa de que está noche hemos quedado con los vecinos para cenar, luego sale de la habitación y se dirige a la cocina a preparar algo para comer. Como la maleta la puedo deshacer más tarde aprovecho para sacar a los perros así mi madre no tendrá tantas cosas por hacer. Mientras voy paseando con los perros chiqui y rihanna voy pensando en cómo iba a ser este verano. De repente mi móvil suena, lo saco del bolsillo de mis tejanos y veo que Lorena me está llamando.
+ Hola amor! Acabo de llegar, estoy paseando a los perros, tú que tal? Has llegado ya? -Digo yo.
- Cris! Si, acabamos de llegar, hemos quedado con Alberto en que pasábamos esta semana en mi casa y la semana siguiente iríamos a la suya, y luego ya miraríamos. Habéis llegado bien? Alguna novedad? -Lorena.
+ Todo correcto. Y ninguna novedad. Ves como no debías de preocuparte por la distancia con Alberto ? Si yo lo sabía! Bueno amor, más tarde hablamos que voy a subir y a comer.-dije yo.
- Vale, ahora te escribo por whatsapp. Dijo Lorena mientras colgaba el móvil.
Mientras subía a casa iba mirando entre mis contactos. Se me pasó por la mente llamar a Ale, pero rápidamente esa idea se desvaneció al entrar en casa.
Cuando entré fui hacia la cocina a preguntarle a mi madre si la ayudaba en algo a lo que me contestó en poner la mesa. Mientras ponía la mesa me vino a la mente la de veces que habíamos comido juntas Lorena y yo. En realidad Lorena se había vuelto para mí una persona especial. Una gran amiga.
Después de comer y ponernos al día familiar me tumbé en el sofá a hacer aquello que mejor sabía, que era, no hacer nada.
ESTÁS LEYENDO
AGARRA EL TIMÓN
Fiksi RemajaJóvenes con historia, historias de jóvenes, jóvenes historias. Qué dice más? La verdad o la mentira?