¡Déjame en paz!© NeymarJr

Capítulo 21: Demuéstramelo en treinta días.

Narra Adriana:

Miré todo a mi alrededor. Estaba de nuevo en la casa de Neymar, la que no pisaba desde hace casi un mes. Mis cinco maletas enormes con toda mi ropa estaba en el salón, él me dijo que las pondría en el armario.

—¿Donde dormiré yo?— pregunté.
—Conmigo— dijo obvio.
—Deja de actuar como si siguiésemos siendo algo, no dormiré contigo. Dormiré en el sofá— fruncí el ceño mirándole.

—Claro que no, es malo para el bebé— replicó, blanqueé los ojos.
—Y tú eres deportista, dormir en el sofá te hará mal— le miré.

¿Se puede saber por qué me estoy preocupando por él?

—Por eso te dije que durmiésemos juntos— contestó. Resoplé y asentí.
—Tengo que salir...— dije en bajo. —Vuelvo en un rato.

Asintió, cogí mi bolso y cuando estuve a punto de salir por la puerta me volvió a llamar.

—Adriana— me giré para ver que quería. —No quiero que estés incomoda, puedes hacer lo que quieras. Como en tu casa.

Forcé una sonrisa sin mostrar los dientes y asentí.

—Gracias— me limité a decir, entonces salí por la puerta teniéndole una vez en mis pensamientos.

[...]

Terminé de reír, me dolía el estómago de tanto hacerlo.

—¿Como puedes decir tantas tonterías a la vez?— dije todavía riendo.
—Es un don— respondió él sonriendo y volví a reír una vez más.

Cuando ya me calmé y hubo un silencio de un par de segundos, me decidí a contárselo. 

—Sergio, hay... una cosa que te tengo que decir. Espero que eso no cambie entre nosotros— dije en bajo.
—Tranquila, nada va a cambiar— susurró acariciándome la mano y me tranquilicé un poco más.
—Es que yo... estoy embarazada— miré a otra parte. El se quedó petrificado.

—Sergio...— movió la cabeza quitándose el embobamiento.
—¿Embarazada?, ¿D-D quien?— preguntó intrigado.
—De Neymar...— susurré en un hilo de voz. Su boca se entreabrió.

—¿Estás embarazada de un futbolista millonario?— dijo con los ojos como platos.
—Me temo que si. En un mes tengo la cita con el doctor— hice una mueca.
—Eh... yo... no sé que decirte, más que obviamente siempre estaré allí para ti... y si el no quiere ocuparse de el o de ella yo seré un padre para— le interrumpí.
—No, Sergio. El si quiere tenerlo, pero a mí como comprenderás no me gusta ser madre a los 19, además de alguien que me engañó— suspiré entrecortadamente.

—Se que es duro para ti— me abrazó con fuerza. —Te puedes quedar en mi casa si quieres, porque... tus padres no lo saben, ¿No?— negué con la cabeza.
—Gracias pero ya me estoy quedando en su casa...— dije refiriéndome a Neymar. —Le dije a mis padres que iría a casa de mi amiga a pasar unas semanas.

—Está bien, pero si las cosas se complican ya sabes que siempre está mi casa— asentí sonriendo como pude.

Narra Neymar:

Mis amigos querían quedar hoy conmigo en mi casa, les dije que no porque quería que todo estuviese bien para Adriana y ella con nosotros se estresaría mucho. Las embarazadas son sensibles...