Capitulo 7: Incomodidad.

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Maldito y estrecho auto, pensé.

Estaba tan malditamente perdida en sus besos que no me di cuenta en que momento me monté en sus regazos. Él me apretaba fuertemente de la cintura con una mano para acercarme más, y con la otra mano, frotaba mi muslo hasta el pegue de mi trasero.

No juzgo a Anastasia, entiendo perfectamente cómo se sentía bajo las caricias de Grey.

Él en algún momento bajó de mi boca, hasta mi mentón y de mi mentón hasta mi cuello. Toqué el maldito cielo. Se sentía tan…

-          Emma. – Interrumpió James con su boca pegada en mi cuello y yo con mis manos agarradas a su cabello.

-          Hmm? – Que vergüenza. Estaba tan excitada que mi voz no me salía de la garganta.

-          Podrías callar tu maldito celular? – Mierda. No lo había escuchado sonar. Me separé rápidamente de él y estiré mi mano para tomar mi celular de mi mochila. Lex. Miré la hora, 9:30 p.m.

-          Mierda. – James me dio una mirada de confusión. Había estado más de media hora en el Audi de James. Solos. Esto definitivamente no podía terminar bien. Ignoro las miradas interrogantes que me lanza James y con la mayor vergüenza del mundo me arreglo la camisa que se me había levantado unos cuantos centímetros y cabizbaja me cruzo al otro lado del auto, donde debería de estar y no en las piernas de James, en el lado del copiloto.

Nunca había estado tan avergonzada en mi vida. Mi celular sigue vibrando en la mano.

-          Si? -  Es lo único que me digno a decir debido a que después de tremenda demostración de lenguaje, no he podido calmar mis hormonas ya alborotadas.

-          DONDE PUTAS ESTÁS, EMMA? ¡HACE MÁS DE UNA MALDITA MEDIA HORA LLAMÉ A LA CAFETERÍA Y ME DIJERON QUE SALISTE HACE UN POCO MENOS DE UNA HORA!

-          Cálmate, Lex. Lo siento,  me he encontrado con un amigo y me ha dicho que me podía dar el aventón. Lo siento, he perdido la noción del tiempo. – Casi me deja sorda con los gritos de gata en celo que acabo de presenciar. Escucho un suspiro a través del teléfono. Bien. Se está calmando.

-          Vale. –Se podía oír en si voz que no sonaba muy convencida.

Esperé a que fuera ella la que terminara la llamada. Y así lo hizo. Había olvidado donde me encontraba, y con quién. Rayos y relámpagos. En el instante en que terminó la llamada con Lex, un aire de incomodidad y vergüenza recorrió mi cuerpo. Guardé mi celular en la mochila e intenté acomodarme mejor en el asiento del copiloto. Ninguno de los dos hablaba. Yo tenía mi vista fija la oscura noche y la vista de James estaba fija en mí, como inspeccionándome.

Silencio.

Incómodo.

Otra vez.

James carraspeó.

-          Sabes… -Empezó a decir para que yo concentrara mi atención en él. Sí, mi atención más no mi vista. -  No tienes porqué sentirte incómoda, Emma. Lo siento, fue mi culpa. Yo empecé el beso, lo he querido hacer desde que entré a esa maldita clase y tú tan inocente… - Se notaba que se estaba alterando al yo no decirle nada.

-          No tienes porqué disculparte – Lo interrumpí. – ¿Puedes llevarme a casa?

Él no dijo nada, solamente asintió con la cabeza. Yo estaba temblando, estaba tan nerviosa y tenía tanta vergüenza.

Los últimos 5 minutos que nos quedaban de camino fueron silenciosos e incómodos. Él no dijo nada y yo tampoco lo hice. Solo quería salir de ese maldito Audi y no volver a ver a James nunca más.

Empecé a desabrocharme el cinturón de seguridad para salir del auto pero la voz de James interrumpió mi acción.

-          Espera –Dijo al mismo tiempo que salía del auto. Lo vi recorrer la parte delantera del auto bajo la pesada y fría lluvia para emplear su siguiente acción. Yo lo miraba atenta y descaradamente. Adonis. Lo siguiente que hizo fue abrirme la puerta del coche para que saliera.

-          G-g-gracias por traerme. Siento muchísimo lo que pasó, en serio. Lo lamento. – Recitaba yo al mismo tiempo que salía del auto con mi cabeza mirando al suelo. Al salir del auto mi cuerpo quedó al frente del pecho de James. Él era más alto, me ganaba como por unos 15 o 20 centímetros.

Mi piel se erizó cuando sentí una mano en mi cintura acercándome a ese malditamente delicioso pecho y otra en mi barbilla, levantándola lentamente como pidiendo permiso. Yo no hice ningún movimiento. Quería saber que iba a hacer James, quería saber e iba a esperar para averiguarlo.

-          Sabes… - Empezó a decir James cuando sus ojos tenía acceso total a los míos. – Eres hermosa.

No me dio tiempo de decirle un “Gracias” ni de siquiera ruborizarme porque inmediatamente después de decir eso, sus labios atraparon los míos. No fue para nada como la sesión de besos que sucedió minuto atrás. Este beso fue tierno, amoroso y delicado.

Sus manos empezaron a apretar mi cintura y las mías involuntariamente se empezaron en envolver alrededor de su ello y mis dedos a entrelazarse con su hermosa cabellera.

Alguien carraspeó sacándonos de nuestro mutuo trance e inmediatamente me puse color carmín. Qué vergüenza.

-          Lamento interrumpir – Dijo una voz femenina al frente nuestro al mismo tiempo que  emprendía su camino hacia donde estábamos. 

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Holaaa  n.n/ 

Lamento tanto haber durado en subir capitulo. He estado super ocupada y nerviosa. Ya dentro de una semana entro nuevamente al colegio y este es mi último año, entonces por eso he estado super nerviosa. Y también como ya casi entro, mis padres dicen que pasar leyendo todos los días no es disfrutar las vacaciones (Para ellos) entonces hemos estado saliendo y así. 

En fin. Gracias a los pocos pero fieles lectores que tengo. 

Voy a intentar subir más seguido. 

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Los amo. Bye c:

Same shit, Different dayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora