Siempre pensé que en mi mente solo habría espacio para el vóley...era todo lo que me importaba, era todo lo que me llenaba, era todo lo que amaba...al menos eso pensaba, pero cuando lo conocí todo cambio. era tan radiante que llegaba a ser molesto...
Abrí los ojos, mirando a mi alrededor, no me había dado cuenta en que momento me había dormido. Iba a levantarme cuando fije la vista en Hinata
-dormiste bien?
-después de lo que hicimos mejor que nunca -rio Hinata
no podía evitar perderme en sus ojos tranquilos y serenos, eran realmente embelesadores, aprovechaba para bajar la mirada a cada centímetro de su perfecta anatomía,me acerque y lo beso con ternura Hinata se limitó abrir un poco sus labios para dar paso a mi lengua , era demasiado excitante. Entre aquel beso avían demasiados jadeos y gemidos por parte de los dos. ya no podía continuar el beso por falta de aire, así que me separó unos centímetros de la boca de Hinata.
-K...kageyama... - fue lo único que dijo con un pequeño hilo de voz . Él estaba ruborizado, junto con nuestras respiraciones agitadas.
-quieres hacerlo otra vez ...tres veces es mucho por un día
-si fuera por mi no pararía nunca
-la lujuria es mala mi amor ,es un pecado capital
-Yo seré tu dulce tentación, Y tu mi pecado mortal.Me he vuelto un adicto a tu boca Te has convertido en mi perdición Eres mi vicio, mi tentación y mi pecado Yo no me explico que le hiciste a mi corazón
-Si amarte es mi pecado, me iría al infierno no me canso de pecar, por estar a tu lado-hinata rio ante lo que me dijo
-creo que debo arreglarme es hora de irme — el asintió algo triste
me levante y me empece a vestir junto a Hinata bajamos asía la sala y me miro como diciendo no te vayas ,esa mirada me mataba pero no podía quedarme mucho tiempo
-Oye...no estés triste, nos veremos mañana ¿ok? —Hinata sonrió, me condujo hacía la puerta de entrada.
—Nos vemos... —Hinata se puso en puntillas, depositando un beso en mis labios
al llegar a casa, entre con el mayor sigilo posible y me dirigí al comedor, encontrando a mi madre y a mi padre comiendo.
-Que bueno que ya llegaste hijo ¿adonde te habías ido cariño?
mi padre se distraía comiendo y viendo la televisión, milagro que por fin estuviera algo tranquilo.
-fui a distraerme un rato -comente sentándome al lado de mi madre.
-Me imagino que no te topaste con aquella sabandija ¿o si? —dijo mi padre
-Tiene nombre...y no...no me topé con el —lo mejor era mentirle, tal vez que cosas podía hacer y mas si se trataba de Hinata.
-Sabes que...no te creo nada! —se levantó con brusquedad de la silla, trate de alejarme, pero mi padre ya estaba agarrando mi brazo con fuerza.
-Amor ya suelta lo!! Deja lo en paz!!
-Agh! Y-Ya...sueltame!! d-dejame! S-Si sigues...no podre...jugar Volei, mi padre me tiro del brazo tanto así que me hizo caer al suelo.
- ya dejanos en paz!! — grito mi madre desesperada
-Si no fuera por mi esta familia estaría en la ruina!! Par de mal agradecidos!! —dicho esto se fue a su cuarto
yo me levante adolorido sin decir ni una sola palabra me fui a mi cuarto no quiera que mi madre me viera llorar ,entre al baño y mis lagrimas empezaron a recorre mis mejillas
