🐉El Amo De Los Tres Clanes🐉La Conexión [1] {Borrador}

🐉Capítulo 9🐉

"Por fin apareció la magia
Y  no solo la mía"

-Pueden irse -dije a lo que los guerreros obedecieron y salieron de ahí. Samuel había confiado en la vampiresa, yo haría lo mismo.

Todo estaba pasando demasiado rápido... Ni siquiera había terminado de procesar una cosa cuando otra llegaba a mi puerta y entraba sin ser invitada. Aún no entendía mucho de todo esto de los clanes, magia, almas gemelas...

-Gracias -dijo Julia tomando aire.

Ninguno se había levantado del suelo. Seguían sentados y con las piernas cursadas. Ambos recuperándose del mal trato con el que los habían recibido.

-No hay de que, no debieron tratarlos así.

-Era de esperarse. Tienen que protegerte -dijo el chico en tono un poco cansado.

-Maloc, no seas igualado -dijo Julia, golpeando con el codo a su hermano. Maloc gimió de dolor.

-Lo siento, Majestad.

-Tranquilos, está bien. Sólo llámenme Irina. Aún no me acostumbro a lo de ser el amo...

Mi voz se detuvo cuando abrieron la puerta.

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Salimos de la cabaña para ver que estaba pasando y cuando llegamos a donde se encontraban los guerreros, nos dijeron que Irina se encontraba en la oficina principal.

Iram y yo dejamos a Matt con Angelina y no habíamos cruzado palabra alguna desde que habíamos salido de la cabaña de Iram.

Era extraño pensar que antes su presencia me molestaba y ahora simplemente no quería tenerlo lejos en ningún momento.

Cuando llegamos a la oficina, abrimos la puerta sin pedir permiso antes.

Dentro se encontraba Irina con dos Colmillos Blancos sentados en el suelo. Los conocía a ambos. Eran los infiltrados de Samuel. Los hermanos Evermore.

Iram dio un paso hacia delante y yo lo detuve con una mano en su pecho. Quise ignorar la electricidad que apareció cuando lo toqué. Su calor estaba más que presente a pesar de la tela de su camiseta. Un escalofrío recorrió mi espalda. Solté un suspiro antes de hablar.

-No es por ser grosera, pero ¿qué hacen aquí? Creí que llegarían en un mes -dije tratando de que mi voz no sonara temblorosa.

-Así sería, pero Arcarius no quería que Irina estuviera sola -dijo Julia elevando ambos brazos hacia mi para que la ayudara a levantarse y así hice-. Además se presentó la oportunidad de salir antes.

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Arcarius seguía preocupándose por mis relaciones sociales.

Hace unos años yo no hablaba con nadie y Arcarius siempre era mi escolta. Nunca me dejaba sola. Sólo se apartaba cuando Samuel estaba conmigo. Después llegaron Chris, Iram e Ismael. Los tres eran de mi edad, así que fue fácil acercarme a ellos. En la aldea no había chicas, así que Umbra era mi primera amiga.

Me dolía que de la nada Arcarius no estuviera a mi lado. Por muchas personas que estuvieran a mi alrededor, yo sólo lo quería a él.

-¿Desde cuándo se conocen? -pregunté sin saber que más decir.

-Hace cuatro años Samuel nos reclutó como espías. Umbra, te enseñaría lo que fuera necesario que aprendieras; Maloc y yo te cuidaríamos de nuestro clan y al individuo que tuvieran del clan de las brujas te protegerían de dicho clan.

-Dijiste que sabías dónde econtrarlos -le recordé a Julia.

-Y es verdad. Viven en el lado este del bosque.

-Bien. Saldremos al medio día. Aún es demasiado temprano. Será mejor que descansen.

Todos salimos de la oficina, la cabaña donde se quedarían los hermanos Evermore quedaba en la misma dirección que la de Iram, así que íbamos todos juntos.

-¿Ya consiguió encontrar su magia? -le preguntó Julia a Umbra.

-No. Aún no.

-Bueno, no es lo más fácil del mundo -dije haciendo un ademán con las manos. Al hacer esto un haz de luz salió disparado en dirección a Umbra. Iram logró quitarla a tiempo tomándola de la cintura.

Iram se acercó más a Umbra y unió sus labios con los de ella...

¡Por fin!

Al parecer no sólo había aparecido mi magia.