...NUEVE

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Cole escucho el grito. Un pito comenzo a sonar en su oido, doloroso y molestoso, sus ojos ordian por la cantidad de luz que habia visto, sentia como si se estubieran quemando. En ese momento reaccionó y se dio cuenta que no era un sueño. Corrió hacia Kira y la abrazo. A pesar de el dolor que el estaba sintiendo se quedó con ella.

El grito retumbó en toda la casa. Lo cual despertó a todos. Kai y Aka fueron los primeros en presentarse luego vino Zane y Pixal seguidos de Nya, Jay estaba en cama reposando por lo tanto no aparecio. Luego siguio el padre de Kira junto con Wu y Misako y luego el resto.

-¿Que le hiciste a mi hija? -Acusó a Cole.

-Yo nada. Fueron las sombras - aclaró, se sobó los ojos, estos ardían de dolor.

-¿Que fue lo que paso? -preguntó Lloyd viendo a su hermana llorando en el piso.

-Las sombras iban a atacarla, pero ella...- un fuerte pito sono en el oido derecho de Cole. Hizo una mueca y continuo la frase- ella mandó un grito, en realidad fue como una onda - se sobo los ojos- junto con una cegadora luz.

-Está bien -dijo Garmadon- vuelvan a dormir.

-No se preocupe sensei... Yo la cuido - le sonrió Cole.

-Esta bien hijo -todos se fueron de vuelta a la cama.

Cole tomo a Kira en los brazos y subió las escaleras. La recostó en la cama y le limpio las lágrimas debajo de sus ojos. Acarició su cabello, en un instante este se empezó a tornar rubio, aparte de que ya le habian salido rayos en el pelo antes, ahora tenia más, era casi rubia como su hermano. Cole abrio los ojos hasta el topé pero no le mencionó nada a ella.

-Gracias Cole.

-No es nada -le besó la frente y se dirigió hacia la puerta.

Antes de que pudiera dar un paso, ella le agarró la muñeca y lo giró hacia ella.

-Cole...Tengo miedo. No quiero dormir sola.

Un rayo de esperanza broto en el chico.

-¿Quieres que te acompañe hasta que te duermas?

-Hasta que despierte -le corrigio ella. Le dio un lado al pelinegro. El se recostó al lado de ella y se acomodo. Kira agarró su brazo y lo colocó debajo de su cabeza. El chico la abrazo y atrajo hacia ella, ella se acurruco en su pecho, le encantaba su olor, era como una droga para ella, sonrió, su respiración se calmó dando a entender que se había dormido.

La noche pasó y llego la mañana. Cole seguía durmiendo al lado de Kira. El abrió sus ojos lentamente y pestaño. Se giró artas veces en la cama, algo le incomodaba.

-Cole ya deja de moverte, quiero dormir.

-Kira...-Dijo preocupado.-Kira...- la giró hacia él y la movió para que despertase.

-¿Qué pasa? Deja de molestar.

-Kira hablo enserio -ella se sentó en la cama mirando al chico. Tenia los ojos abiertos, miraba perdidamente el techo -No puedo ver-Parpadeo pero no dio resultado.

-¿A que te refieres?- se empezo a preocupar

-Todo esta negro...Kira estoy ciego.

-¡Que! ¿Y como paso eso?... ¿Pero no ves nada?, ni una sola luz.

-Nada.

Cole se levanto lentamente de la cama y tropezó con unos zapatos -Estoy bien, estoy bien- Kira estaba preocupada.

- Voy al baño no te muevas, ¿ Entendido?

-Si.

Kira caminó hacia al baño, en el habia un espejo que cruzaba de esquina a esquia. Abrió la llave del lavabo y se mojo la cara. Agarró la toalla de manos y se la paso por la cara. Se miro al espejo con todavia la toalla en la boca. No podia creer lo que estaba viendo. Ayer su pelo era de un castaño claro a consecuencia de los reflejos que se le hicieron la primera vez que usó su poder, luego hoy estaba el doble de rubio que antes.

-Cole- dijo preocupada mientas se examinaba el cuero cabelludo en busca de una respuesta - ¿Qué fue lo que le paso a mi cabello?

-¿Ah? Ah si... Anoche despues del incidente con las sombras se torno un poquito más rubio que antes- el segui en el mismo lugar en el que Kira de dojo que se quedara.

-¿Un poquito?

-Bueno quizas... Un poco más que un poquito.

Kira se acercó a Cole y pasó su musculoso brazo por los hombros de ella. El chico daba un paso y frenaba, luego otro paso y frenaba.

-Cole si vas a caminar así mejor haslo solo - le soltó el brazo.

-No, no, no- intentó agarrarla pero no la encontro- no me dejes solo.

Ella le agarro la cara con ambas manos. Lo miró a los ojos a pesar de que él no la podia ver.

-¿Confias en mi?

El buscó la mano de la chica.-Si.

-Entonces sigamos.

Bajaron las escaleras y llegaron a la cocina donde estan los demás tomando desayuno.

Kai los miró extrañado -¿Que fue lo que le paso a tu...?- señalo al pelo de Kira, luego miro a Cole y dio un pequeño salto de asombro- ¿Y qué fue lo que? - Apunto a Cole y luego miró a su hermana.

-Estoy ciego.

-¿Como que estas ciego? -preguntó Zane - ¿Qué fue lo que hicieron?

-¿Que? Nada -respondió Kira. Llevó a Cole a tomar asiento.

-¡Esto es asombroso! -Dijo Garmadon. Todos lo miraron dudosos -Con tu poder puedes dejar ciego a una persona he incluso romper el timpano de una con tu grito. ¡Nunca habia visto a alguien que pudiera hacer esto! - dijo asombrado y se hacerco a la chica, le acarició la cabeza- tu cabello intensifica el rubio mientras más utilizas tu poder, hasta que llege el momento que quedes como...- miró a su otro hijo- Lloyd.

Kira hizo una mueca. Señaló a su hermano y luego mordio su labio inferior - Yo no quiero ser como él- aclaró.

- ¡Tenemos que potenciar tu poder! Es increible -dijo su padre.

Luego se sentaron a comer, Zane cocino sopa china con verduras y fideos. Cole intentaba vuscar los palillos chinos para poder comer. Toqueteo la mesa y dio vuelta un vaso vacío.

-Me das lástima hermanito -dijo Kai burlandose.

-Kai...- Nya lo regaño. Se sentó junto a Cole.

-Habre la boca. Te voy a dar de comer.

-¿Y Jay? -preguntó Kira.

-Oh, lo habia olvidado- dijo Nya- Kira puedes llevarle ese plato a su habitación- Kira agarró el plato con comida.

-Si, obvio.

Tocó la puerta y entró.

-¿Como te sientes Jay?

-Voy mejorando.

- Te traje esto - Jay se sento en la cama y apollo en el respaldo, Kira le entrego el plato.

-Gracias.

-¿Como va la herida? ¿Puedo ver? -Jay asintió y levanto su polera. Kira removió el parche- Dame tu mano - le ordeno al chico.

-¿Que? ¿Porque?

-Solo haz lo que te digo - el le entrego su mano. Kira empezo a absorber el dolor del chico. Las venas de su brazo se tornaban negras. Y el dolor de Jay disminuyó.

-¿Como hisiste eso? - le agarro la muñeca y la miro, sus venas seguian negras- ¿Porque lo hiciste?

-Tenia que quitarte ese dolor.

-Gracias.- le sonrió.



Ninjago, La Ultima ProfeciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora