Estamos Locos |Ruggarol|

25

Karol

Me miré al espejo y sonreí satisfecha por lo que veía. Había peinado mi cabello en un lindo moño bajo. Pasaría el año nuevo solo con Ruggero, me emocionaba mucho la idea. Estaba muy ilusionada con él.

Mi teléfono sonó, era Angie.

-Asere que bola.- contesté como cubana y Angie se rió.

-Playa, sol, fiesta, cubanos, ya sabes.- respondió.- ¿Qué planes?- 

Hable con ella cerca de diez minutos, chistes y cosas sin sentido no faltaban en nuestras conversaciones

-Bueno, te hablaré más tarde para desearte un feliz año y si no, pues te lo digo ahora. Feliz año nuevo, que este sea mejor que el anterior.- me dijo.

-Feliz año nuevo para ti también, amiga. Que tus sueños y metas se hagan realidad.- mencioné.

Dejé mi teléfono a un lado. Terminé de arreglarme, agarré mi bolso blanco y metí mi iphone y salí del departamento.

*

*

Esperé a que abrieran la puerta, froté mis manos ya que hacía mucho frío. Escuché la puerta abrirse, sonreí al verlo. Estaba vestido con una camisa blanca, corbata negra, jeans y zapatillas negras. Conclusión, estaba muy lindo.

-Hola.- saludé sonriente.

-Buenas noches.- saludó. Caballeroso, como siempre. Ruggero, me miraba sonriendo, bajé la mirada un poco avergonzada y regresé a mirarlo sonriendo.

-No me molesta que me mires, pero hace frío aquí.- dije.

-Lo siento, lo lamento, pasa, pasa.- se apresuró a decirme.

-Huele delicioso, ¿Pediste comida?- pregunté curiosa.

-No me dio tiempo de cocinar.- me respondió y yo asentí, dándole la razón.

Reí al ver la cara de Rugge, me miraba fijamente.

– ¿Me veo bien?- pregunté poniendo mis manos en la cintura y moviéndome de un lado a otro, como si modelara.

-Define bien, porque no creo que sea justo.- respondió y soltó una risa.- ¿Queres algo?- preguntó.

A ti, pensé.

-Algo de tomar, estaría bien.- contesté.

Caminé por la sala, me detuve a mirar el cuadro de una de las paredes y sonreí. Era una foto, él besaba su premio de los KCA. Esa foto me encantaba, siempre que no había alguien mirándome, la contemplaba y pensaba que Ruggerito no podía ser más... perfecto. Era guapo, tenía una personalidad encantadora y tenía muchísimo talento. Era una persona muy especial. Seguí caminando y miré los pequeños retratos.

-Hey, ¿Qué pasa?- escuché detrás de mí. Dejé de pensar más en eso y sonreí.

-Ah, nada, nada, solo pensaba.- respondí y me acerqué a él y recibí mi vaso de soda.- Siempre me ha gustado esa foto.- dije señalando el cuadro.

-A mí también me gusta.-respondió él- ¿Salgo guapo? –sonrió.

-Muy.

Nos sentamos en el sofá a hablar que solo faltaba hora y media para que empezara el año.

*

*

-Yo no soy tan fanática de las series, pero debo reconocer que me enganché con esta, eh- conté refiriéndome a "Soy Luna".- Angie y yo no nos perdemos un capítulo.