Capítulo I

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     Sky Jones es una típica chica adolescente acomodada de Brooklyn, Nueva York. Familia bien conformada, ropa de marca, estudiante del mejor instituto, mejor promedio en su clase, novio popular y atento... ¿Qué más podría pedir alguien de su edad?

     -¿Qué haces tú aquí? –preguntó la madre de Sky entrando rápidamente en la cocina, refiriéndose a por qué no estaba en el instituto en ese momento.

     -Me sentía un poco mal –respondió con un tono honesto, aún estando en pijama.

     -¿Terminaste con Peter o algo así? –preguntó pensando que su estado anímico se debía a su novio, Peter Mark, o a la ausencia de este mismo.

     -No, mi vida amorosa está bien –al escuchas esto su madre esperó a que le explicara qué era lo que le sucedía en realidad, mientras se servía una taza de café –solo me duele un poco el estómago, me ha dolido por un buen rato ya.

     -Cariño, ¿quieres que te lleve al médico? Hoy me tomaré el día libre –sonrió dulcemente mientras le acariciaba la cabeza.

     -No, no, no, porque me darían licencia y mañana tengo examen de historia –echó un vistazo a su teléfono, ninguna notificación o mensaje.

     -Hija, debes siempre poner tu salud por delante de un examen, sabes que de todas maneras aprobarás –sonaba entre una mezcla de seguridad y dulzura.

     -Es que no estoy a punto de morir, mamá, el médico puede esperar un poco más–ladeó la boca.

     -¡Ay! Tú siempre terca, eso lo has heredado de mí o de tu abuela. Está bien, anda a reposar a tu pieza, estudia con mesura y yo te llamaré cuando esté listo el almuerzo –la chica asintió mientras se ponía de pie y caminaba hacia su habitación en el segundo piso de la casa.

     Se tendió sobre la cama mirando hacia el techo, revisó su móvil, nada nuevo y pues claro, todos sus amigos estaban en el instituto, ocupados en sus labores. Soltó el teléfono algo decepcionada y comenzó a pensar en su vida futura, en cómo sería su vida junto a Peter, cómo serían sus hijos si alguna vez decidía tener, cómo sería su casa, cómo sería su familia...

     Tanto pensar ni siquiera supo en qué momento se quedó dormida, despertó con su madre agitando su hombro, el almuerzo estaba listo. Bajó rápidamente las escaleras y se encontró con su hermano sentado en la mesa, no alcanzó a preguntar por qué estaba él ahí cuando notó que traía un ojo morado y no tenía la mejor de las caras.

     -¿Qué te pasó en el ojo, Jamie? –preguntó Sky preocupada, mientras tocaba la cara de su hermano.

     -Tu hermano peleó en el instituto –respondió su madre anticipándose a la respuesta de Jamie.

     -¿Qué? ¿Por qué? ¿Con quién?

     -Con tu noviecito, Sky –respondió este de mal humor.

     -¿Con Peter? Pero ¿Por qué? –ella no entendía.

     -No te importa, no ahora.

     -Está bien, ahora no quieres hablar, pero después te cobraré la respuesta –Sky estaba intrigada, demasiado, la verdad.

     Su madre les sirvió almuerzo y comieron tranquilamente. Sky preguntó varias veces en el día a su hermano la razón de su pelea pero no logró sacar ninguna palabra valiosa de su boca.

     Al terminar el día, ella estudió para su examen, específicamente sobre la invasión británica, memorizó absolutamente todos los detalles, guardó sus cuadernos y se acostó a dormir, cumpliendo su objetivo a los pocos minutos.

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