Narra Tomás
Desperté en la enfermería, ese lugar que ya me era familiar. Luego de que Ariel se fuera perdí el conocimiento, no se que habrá pasado después, pero seguro Matías fue el que me trajo. Me levanto y salgo de la cama, sin embargo, un mareo repentino vino a mí, debido a eso, volví a tomar asiento en la cama. La enfermera se percató de que ya había despertado y se acercó a mí a revisar cómo me encontraba.
—dime, ¿Cómo te sientes?
—bien, solo tengo mareos.
—eso es debido a un medicamento que te dí, me gustaría saber porque estaba inconsciente y que hay de tus hematoma en tu vientre.
No sabía qué decirle, no podía hablarle sobre Ariel, de igual forma la doctora ya sabía lo del hematoma, es extraño que me lo vuelva a preguntar.
—eso fue porque me robaron, ya se lo había comentado, pero el golpe en mí cara fue un accidente, estaba con mis amigos haciendo un reto y salió mal.
Nuevamente volví a ver esa expresión de duda en la doctora, pero no dijo más nada al respecto.
—gracias por haberme cuidado, ¿Puedo preguntar que hora es?
Ella sacó su celular de su bata y miro la hora.
—son las 11:08am, dormiste una hora.
—¿Ya puedo ir al aula?
—si, pero ten cuidado, el efecto de la medicina todavía no se fue y puedes tener unos mareos.
—bueno lo tendré, gracias de nuevo—me levanté de la cama—disculpe, otra pregunta, había un chico que me trajo a la enfermería, ¿no?, ¿Cómo esta? ¿Dónde esta?
Estaba preocupado por Matías ya que el también salió lastimado.
—si, vino contigo en brazos, te dejo aquí y lo mandé al salón ya que el recreo había terminado, el no estaba lastimado, ¿acaso también estaba lastimado?
—no, el esta bien, voy llendo al salon, adiós.
—no quiero verte por este lugar otra vez, basta de jugar a lo bruto, ten cuidado.
—si, lo siento doctora.
Dije antes de irme de forma apresurada para que no empezará a interrogarme respecto a lo que había pasado.
Mientras caminaba en los pasillos para llegar al aula, tuve unos pequeños mareos debido a sonidos o acciones bruscas que hacía, al llegar al salón el profe me dijo que me acercará a él, la materia que teníamos a esta hora era salud y adolescencia, me pidió una justificación del porqué estuve ausente en su clase, tuve que mentirle, le dije que me desmayé y que luego desperté en la enfermería, en parte no era del todo una mentira.
El profe me pregunto si tenia una enfermedad o algo, yo lo nege y finalmente me dijo que tomara asiento.
Al dirigirme a mí banco junto a Ariel, me tropecé con una mochila, ocasionado que caiga al suelo recibiendo un dolor seguramente indescriptible, sin embargo, alguien me sujeto antes de que eso sucediera.
Levanté la mirada para saber quién fue él o la que me ayudó, al verlo no sabía que decir, me quedé mudo.
Su cara lo decía todo, el estaba sorprendido al igual que yo de su accionar. De igual forma debía agradecerle.
—gracias.
El profesor también se había alarmado debido a mí caída levantándose de su asiento, sin embargo, no se acercó.

ESTÁS LEYENDO
SU SONRISA
RomanceTomi es un chico de 15 años, muy alegre, que disfrutaba de su vida hasta que sus amigos se enteraron que era gay no solo dejaron de juntarse con él sino que también comenzaron a hacerle bullying al igual que la persona de la cual estaba enamorado la...