LA OPORTUNIDAD DE AMARTE - [Gay]

CAPITULO 10

Jared movido por saber algo de Adam se movilizó al ático. Allí  todo estaba en completo silencio con las luces apagadas las cuales prendió. Después de buscar en cada rincón se sentó en el sillón resignado, Adam no estaba allí. Lo primero que se le había ocurrido era hacer un encuentro casual con la excusa de necesitar unos documentos que había dejado allí pero ahora no tenía una excusa para ir a tocar su puerta treinta pisos más abajo.

“lo mejor será regresar a casa” – pensó.

Pero primeo bebería algo de vino tinto en silencio. Miró por el ventanal, las cortinas nos estaban cerradas así que apreciaba las luces del edificio de al frente. Pasó la vista un piso más arriba, sonrió. Una pareja hacia el amor frente al vidrio del ventanal, eso era muy común en la ciudad, la razón era la adrenalina que recibías por el peligro de ser visto follando, al final hacías del sexo una exhibición campal donde la mayoría de los espectadores se esconden en la oscuridad para seguir observando, eso era el morbo, la especie humana era muy morbosa…

Una puerta se abrió para después escucharse el clic de cerrado, unas risas se mesclaron pero Jared no quiso levantarse e interrumpir, quería ver como se daban las cosas, quería ver a los dueños de esas carcajadas que inundaban el vestíbulo de sonidos.

-          ¿Viste la cara del profesor?- decía Adam a su amigo y compañero de curso  Taylor.

-          No tan solo la de él, el resto del curso se quedó mudo.- decía Taylor con una sonrisa cómplice.

Adam había salido muy temprano a la universidad para estudiar más el  tema de su tesis y a pedir consejos a sus profesores pero cuando hubo llegado la tarde se unió con Taylor en labor de avanzar más rápido con la búsqueda de información.

Taylor era guapo con un cabello castaño claro y unos ojos verdes esmeralda que atrapaban a quien lo mirara si a eso le aumentabas el tener un cuerpo bien trabajado. Adam que nunca había coqueteado con su amigo se sintió emocionado y halagado de llamar la atención de alguien demasiado perfecto. Se la había pasado comparándolo en su mente con Kevin y con Jared toda la tarde llegando a la conclusión de que Taylor era diferente en muchos ámbitos a Jared y un poco parecido a Kevin.

-          Dame tu abrigo – pidió Adam a Taylor para después colgar los abrigos en el closet que ocultaba una puerta corrediza del vestíbulo.

-          Cambiaste de apartamento – dijo Taylor observando el lugar – me gusta la decoración.

-          Gracias, la verdad es que aún sigo teniendo el de más abajo pero aquí me siento más cómodo – Taylor estiro el brazo y atrajo a Adam a sus brazos para besarlo suavemente.

Adam se sentía observado dándole el impulso de separarse debido a la incomodidad. Era raro para él, no se había sentido incomodo cuando se besó con Taylor delante de toda la clase y del Licenciado Jones.

-          ¿Quieres algo de beber? – ofreció Adam para borrar la confusión de la cara de su amigo.

-          No sé ¿Qué tienes?

-          De todo pero acompáñame a tomar ginebra.- Adam sonrió de lado dándole una expresión seductora a su rostro. Taylor sonrió excitado.- esa sonrisa la tomo como un sí.

Jared sabía que el jueguito de su amante se acabaría en el momento en que lo descubriera y eso sería a solo unos instantes. Adam se acercó al minibar prendiendo las luces cercanas a los ventanales en su paso. Se detuvo en seco al ver una botella de vino en la mesa de centro y luego al hombre de traje con copa en mano que lo miraba de manera frívola con apariencia de estar relajándose serenamente. Adam no pudo evitar que su corazón diera saltos, parecía que no lo hubiera visto en un largo tiempo y lo veía demasiado guapo y demasiado tentador, por su mente pasaron pequeñas escenas eróticas de lo que le hacían Jared y se sintió excitado y mareado al instante sabiendas que Jared había regresado a cumplir su promesa de apresarlo por haberlo desafiado.