Capítulo 37: Pasado

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Camila

-Lauren, se nos está haciendo tarde para desayunar. 

-Tengo sueño, y lo que hicimos ayer me dejo agotada.

-Solo jugamos parqués- dije.

-¿Parqués?- río tonta- cada vez que te comías una ficha me hacías desvestir.

-¡¡Shh!!, no sigas eso, es incómodo.

-¿Te gustó lo que viste?- su mirada era tan parecida a la de un felino hambriento.

-Vamos, necesito comer, no quieres ver a tu...

Espera, Lauren y yo ¿que carajos somos?, ¿amigas?, ¿amigas  con beneficios?, ¿ex?, ¿sin compromiso?, ¿novias?, novias no lo somos, hasta que ella me lo pida.

《Tú rompiste con ella, tu deberías pedirle》

¿Que carajos somos?

-Tu..., porque te quedas callada- volvió a reír.

-Nada, es la falta de nutrientes en mi cerebro, es tu culpa- me pare hacia la puerta.

-Vamos, Culobello- me detuve en seco.

-¿Culobello? Que elegancia- dije sarcastica.

-¿No te gusta?, lo acabo de inventar.

-Está bien, Firulais- solte una carcajada y ella me pegó una nalgada y apretó con fuerza mi trasero.

Solté un gemido y Lauren me acorraló contra la pared. Su pierna paso entre las mías y se detuvo en mi centro.

-¡Déjame comer!

-Firulais no te da permiso- su seriedad duró poco y me soltó.

-Vamos a comer.

-Vamos nena- su voz terciopelada me dio un cosquilleo. Mis dragones volaban en mi interior.

Amo esa sensación. Esos momento son los que me habían dejado un vacío que nadie pudo llenar en mi, ella era quien me daba lo mejor de la vida. Éramos tan pequeñas, pero a pesar de eso, ella me hacía sentir como una mujer, me dejaba ver el mundo con otros ojos,  no me llenaba la cabezas de ideas ridículas,  me daba esperanza de poder cumplir mis metas.

Cuando me dijeron que mamá tenia cáncer,  deseé con toda mi alma que ella estuviera conmigo para acompañarme, para decirme que mi mamá estaría mejor. Papá  y nosotras, Sofi y yo, sufrimos mucho. Pero fui yo la culpable de que Lauren se fuera, por lo tanto no podía esperar que ella estuviera ahí, acompañándome, dejando que llorara en su hombro. Se que ella jamás me abandonaría, simplemente,  pasó, sucedió lo que yo nunca pude evitar.

Ahora mamá está muy bien, nuestra familia resurgió de las cenizas y vemos ese suceso como algo del pasado. Somos muy unidos. Pero fue traumante ver como mi mamá era consumida por esa agobiante enfermedad. El cáncer no distingue razas, religión,  sexo, rango económico; esa enfermedad ataca sin piedad. Es doloroso ver a una de las personas más importantes de tu vida, dependiendo de un hilo. La impotencia era parte de mi día a día.

Lauren no estaba para escucharme.

Ya habíamos salido de la habitación y decidimos bajar por las escaleras. Hoy, Lauren se había levantado con el humor coqueto y pervertido que a mi me encantaba pero no le diría,  su ego ya era suficientemente grande como para decirle algo más.

-¡Lauren!- grité  y ella pegó un salto con la mano en el pecho.

-Dios mío, casi me da un infarto, no voy a llegar ni a los 25 si sigues en ese plan.

-Ayer se me olvidó contarte algo- su cara de susto cambió a una realmente seria- Lauren, no es nada de chicos...ni chicas.

Ella dejo escapar un suspiro y relajó la mirada.

-Dime, entonces.

-Mis papás vienen de visita, para acá.

-¿Cuando?- su voz era neutra, y sus ojos de un gris intenso.

《Mierda, esta molesta o preocupada, no me voy a arriesgar a preguntarle》

-No... recuerdo, no se si me lo dijeron.

-¿Por qué no me lo dijiste antes?- bueno, ahora si estaba molesta.

-Porque estábamos con Lucy.

-Llámalos, quiero saber cuando vienen.

-No ahora Lauren.

Sus hombros se endurecienron y su mirada era fuerte e imponente, era como el macho alfa. ¿Macho alfa? Que tonta.

Optó por una compostura defensiva, y protectora. Sus brazos me rodearon  dejo un beso casto en mi frente.

-No me gusta la presencia de tus papás.
Sabes que los respeto, pero han pasado tantas cosas que me marcaron, no los puedo tratar como tu quisieras. No quiero fingir que me caen bien.

-Te entiendo, bebé. No te voy a obligar a tener que actuar como si nada. Pero prefiero que no los veas.

-Yo también estaba considerando esa opción- su brazo paso por encima de mi cabeza y el otro estaba en mi cadera. Respire su perfume y miles de recuerdos me llenaron laguna que habían estado durante estos años.

Se me estaba agotando el aire. Rayos, me voy a desmayar. Necesito aire.

-Lolo, me estas cubriendo completamente.

Lauren se sonrojo y se alejo un poco de mi. El calor que soltaba de ella se perdió mientras ella alejaba su cuerpo.

-Te amo.

-Te amo más- besé sus labios y ella dejo ver la sonrisa por la que yo me derretía.

Necesito tanto de ti, que jamás será suficiente. Soy una egoísta que si pudiera te tendría en mi cama siempre. Mis labios extrañaron tu llegada. Nuestro " hasta nunca"  en realidad fue un "hasta que nos volvamos a ver". Te amo amor, lo lamento por todo.








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El Vuelo (camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora