Prólogo

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Los veinte pasos hacia mi asiento se hicieron eternos, había un silencio sepulcral lo único que se escuchaba era el repiqueteo de mis tacones. Cuando llegué ahí me mantuve de pie hasta que entró la jueza a la sala, luego tomé asiento junto a mi abogada y las personas presentes en la sala también lo hicieron. La jueza estaba sobre el estrado y nos miraba a todos desde ahí. Luego de hacerlo dio inicio a la sesión.

Observé a mi esposo, cinco años estuvimos casados, cinco años con altos y bajos, pero al fin y al cabo fueron buenos años. Su mirada conectó con la mía, ya no me miraba como antes, ahora me miraba de una manera gélida y dura. Me estremecí, nunca lo había visto mirarme así, él siempre me miraba con amor, pero todo se destruyó. Yo lo destruí, todo fue mi culpa. Desvío la mirada rápidamente y la enfocó en la jueza.

Mi corazón latía rápidamente en mi pecho, mis manos sudaban y mi cuerpo tiritaba estaba muy nerviosa por lo que iba a pasar. Nunca antes había estado en una situación así, solo lo había visto por la televisión, pero ahora era en la vida real, mi esposo me estaba pidiendo el divorcio. Una parte de mi corazón no quería dárselo, pero sabía que era lo mejor...

No pude ocultar la sonrisa imprudente que apareció en mis labios cuando recordé como nos habíamos conocido. Probablemente había sido la manera más rara de conocer a alguien. Yo tenía 18 años, era el año 2009 y mis papás habían tenido que salir de la ciudad por asuntos familiares, hace algunos meses había sacado la licencia de conducir pero mi papá no me prestaba su auto, lo cuidaba más que a mi hermana y a mí. Pero recién había salido de cuarto medio y mis compañeros hicieron una pequeña fiesta en la casa de un amigo y me quedaba algo lejos, es por eso, que decidí sacar a escondidas el auto de mi papá, él nunca lo sabría, porque había hecho un trato con mi hermana, el idiota de su pololo se podría quedar a dormir hoy en la casa solo si ella no le decía a nadie lo del auto de mi papá.

Iba de lo más tranquila en mi viaje, cuando veo de reojo que el auto que venía en la calle perpendicular a mí se pasó un pare dando de lleno en mi auto. Frené bruscamente el auto y ahí quedé. Había chocado el auto de mi papá, el auto que mi papá tanto amaba y cuidaba, me iba a matar, hasta aquí no más llegó mi vida. Cuando él llegara y viera su auto destrozado, me iba a mandar a un convento, aunque pensándolo bien, eso sería lo mejor que me podría pasar.

Sentí unos suaves golpes en la ventana, pestañeé varias veces antes de girar mi cuello, cuando lo hice, este me dolió, hice una mueca de dolor. Luego me enfoqué en la persona que estaba tocando la ventana, era un hombre y tenía una cara de preocupación tremenda. Sin previo aviso, el tipo abrió la puerta del auto y con mucho cuidado me sacó de él y me sentó en el piso.

― ¿Estás bien? ― preguntó. Yo no podía hablar o no quería, no sé en realidad, estaba como en shock, igual había sido algo brígido ― Estas sangrando ― dijo mirándome y tomando mi cara entre sus manos. Por unos segundos lo miré directamente a los ojos, pero luego, desvíe mi mirada hacia mi auto, estaba destruido, tenía toda la puerta del copiloto hundida, esto me saldría demasiado caro y luego lo miré a él, al parecer él era el conductor del otro auto. Todo era su culpa ¿Cómo no había visto el disco pare?

― ¿Qué estas ciego acaso? ― le dije empujándolo por los hombros para que dejara de tocarme. El tipo cayó de poto en el duro cemento, ya que se encontraba en cuclillas. Yo me paré ― ¿Cómo no viste ese disco pare? Ahora por tu culpa mi papá me matará.

― No te preocupes ― dijo confundido mirándome desde el suelo aún ― Yo pagaré todo, si como bien dijiste tú, fue mi culpa...

Y de ahí en adelante, solo vinieron cosas buenas para los dos, pensé que podríamos ser felices los dos juntos, así como en los cuentos de hadas. Pero los finales felices no existen y eso me había quedado más que claro...

― ¡Todo es su culpa señora jueza! ― esas palabras me hicieron salir de mis cavilaciones. La sonrisa que se me había formado en el rostro desapareció por completo. Levanté la vista hacia la jueza y luego miré a mi esposo. Sé que soy culpable de muchas cosas, pero al perderme en mis pensamientos, ahora no podía saber de cual de todas las cosas que hice se me culpaba― ¡Ella fue la que destruyó nuestra familia! ― lo miré a través de mis pestañas. Su mandíbula estaba rígida mientras lanzaba esas acusaciones contra mí, luego me dedicó una mirada de odio. Sabía que me la merecía, pero lo que él decía no era verdad, yo no destruí nuestra familia, yo no lo hice sola, él también contribuyó en la destrucción de nuestra familia.

― ¡Eso no es verdad! ― exclamé. No podía quedarme callada mientras él decía no sé qué cosas sobre mí― ¡Tú también tienes la culpa! ― una lágrima se deslizó por mi mejilla al recordar toda la mierda que había pasado entre nosotros. Mucha agua había pasado bajo el puente desde el momento en que nos conocimos. Ahí éramos tan jóvenes, tan inmaduros, teníamos tantos sueños y tantas ganas de ser alguien en la vida, pero ya no quedaba ni un rastro de esos jóvenes que fuimos...

― ¡Por favor mujer! ¡Tú fuiste la que mandó todo a la mierda! ― prácticamente me gritó. Podía ver la rabia que sentía conmigo en sus ojos, es como si quisiera matarme con su mirada. A veces desearía poder volver el tiempo atrás, pero a pesar de que no tuve un cuento de hadas con él, lo que vivimos fue lindo...―¡Lo hiciste cuando...!

― Orden en la corte― dijo la jueza dándonos una mirada de advertencia― prosiga― le dijo a la abogada que defendía a mi esposo.

― Como decía señora jueza, estamos aquí ante una demanda de divorcio por causal, la señora aquí presente, esposa de mi defendido― me apuntó a mí― violó de una manera grave los deberes y obligaciones de un matrimonio ―respiré profundo. Nunca pensé que llegaríamos a esto― es por esto que mi defendido quiere la disolución de la sociedad conyugal. El matrimonio entre mi defendido y la demandada duró cinco años, por lo que mi defendido está dispuesto a darle la compensación económica correspondiente a la demandada por los años que el matrimonio duró y dado que la demandada no tiene trabajo― ahora me arrepentía tanto de no haber trabajado, de haberle hecho caso cuando me dijo que no era necesario que trabajara, que con lo que él ganaba era suficiente...― mi defendido está dispuesto a darle como compensación la casa en la que vivían en la ciudad de Santiago de Chile además de una suma de 10 millones de pesos― bueno con eso podría subsistir mientras encontraba un trabajo, lo cual estaba siendo muy difícil dado que tenga nula experiencia― se considera que esto es justo para la demandada y mi defendido y por los años que duró la sociedad conyugal. Señora jueza durante la sociedad conyugal, nació un hijo, del cual mi defendido quiere la tuición absoluta.

― ¡NO! ― exclamé mientras me paraba del asiento. Miré a mi esposo y él me dio una sonrisa perversa. Él no podía hacerme esto, no me podía quitar a mi Bastián, él era muy pequeño y me necesitaba y él me lo quería quitar, se lo iba a llevar de mi lado, eso era una crueldad, en especial por el hecho de que él no vivía en Chile. Él vivía en Alemania. ¿Qué iba a hacer yo sin mi hijo? Mi abogada me miró, su mirada me hizo cerrar la boca y volver de vuelta a mi asiento.

― Objeción señora jueza. Este juicio es con el fin de obtener el divorcio por causal y la respectiva compensación económica, no con el móvil de ver la tuición del menor.

― Mi defendido no vive en el país señora jueza, por lo que le gustaría que éste tema se zanje lo antes posible― dijo la abogada de mi esposo mirándome con ojos viperinos.

― Objeción denegada― dijo la jueza. Mi abogada suspiró derrotada y volvió a su asiento mientras la abogada de mi esposo continuaba hablando. Yo no iba a perder a mi hijo por nada en el mundo, él era lo único que tenía, iba a hacer lo que fuese necesario para que no lo apartaran de mi lado, iba a tener que decir la verdad... Iba a tener que decir que mi bebé no era hijo de mi esposo sino que de otro hombre...

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¡Holi! Bienvenidas todas a este nuevo proyecto. Esta superproducción brasileña #oknot es una obra en conjunto con mi queridísima drama queen y soulmate consuhermione 💘 Esto será algo así como con diez mil veces más drama que nuestras novelas así que be prepared girls!! 😏😏

Esperamos que esto les guste mucho mucho como nos gusta a nosotras jijiji

Muchos besos a todas 😘😘😘

Fran 👩🏻 y Consu 🐼

Unfaithful | Eduardo Vargas | Charles AránguizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora