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Enero del 2011.

Hace dos años fue cuando lo vi por primera vez, y ha pasado tanto en estos dos años, todo empezó cuando él chocó el auto que yo manejaba, todo fue mágico, luego del accidente seguimos en contacto, solo por teléfono ya que estuve un par de meses castigada por la súper embarrada que me había mandado, y bueno, no bastó mucho para caer perdidamente enamorada de él.

El 2009 fue un año excelente junto a él y el 2010 fue mucho mejor que el anterior, porque nos casamos, sé que era una locura, que los dos éramos muy jóvenes y que no llevábamos mucho tiempo de conocernos, pero los dos nos amábamos mucho y no teníamos dudas de nuestro amor, aunque nuestras familias sí lo tenían, en especial la mía. Mi mamá me decía que tenía que esperar a terminar mi carrera, disfrutar de la vida, conocer a más gente, experimentar más porque él era mi primer pololo, pero no le hice caso, yo estaba segura de que con él era con quien quería pasar el resto de mi vida. Nuestro matrimonio fue algo muy modesto, solo nuestras familias y unos pocos amigos. Todos me decían que estaba loca y quizás era verdad, estaba loca, pero de amor y acababa de hacer una locura de amor, me había casado con apenas diecinueve años y mi esposo no era mucho mayor que yo, solo tenía veintiuno.

Igual a pesar de todo y de lo mucho que nos amábamos, tuvimos un difícil comienzo porque él se tuvo que ir durante todo el año a vivir a Argentina por trabajo, y yo me tuve que quedar en Chile estudiando en la universidad. Pero eso fortaleció nuestra relación, la hizo aún más fuerte de lo que era porque al fin y al cabo, no terminamos como todos esperaban, así que por eso cuando él vino a Chile por las vacaciones de invierno nos casamos, luego de eso él tuvo que volver a Argentina y yo seguí aquí en Chile, hasta ahora...

Mi amor ha vuelto a Chile, por su trabajo volvió al país, él hizo todo lo posible por regresar y lo consiguió y yo estoy demasiado feliz por eso. Probablemente esté todo el año junto a mí, todo será perfecto. Al fin viviremos nuestra relación como una pareja normal, sin todos esos estúpidos kilómetros separándonos.

Desde la Navidad que él está acá en Chile, fue nuestra primera navidad juntos y fue maravilloso. Luego de eso hemos pasado todos nuestros días juntos, pero hoy es diferente porque él empezó a trabajar. Así que ya no estará tanto conmigo...

Me giré en la cama y ésta estaba fría. Abrí mis ojos y vi que mi amor ya no estaba aquí, probablemente se había ido a trabajar. Ni siquiera se despidió de mí, aunque debo haber estado profundamente dormida y no me quiso despertar. Me estiré en la cama, aún tenía mucha flojera. Miré el reloj que estaba en mi velador e indicaba que eran las nueve de la mañana, era hora de levantarse. Siempre me levantaba temprano hasta en vacaciones, mi hermana siempre se quejaba por eso, porque ella era una floja de porquería siempre despertando después de las doce en vacaciones y en tiempo de clases se quejaba todo el rato por despertar temprano, pero extrañaba sus reclamos.

Me levanté y fue a la cocina a preparar desayuno, era tan extraño estar sola, siempre que me despertaba estaba mi mamá pero ahora no, porque desde la Navidad que me mudé al departamento de mi amor porque no podía seguir viviendo con mis papás porque estaba casada. Pero era tan raro despertar en una casa que estaba completamente sola. Prendí la televisión para no sentirme tan sola, mientras me preparaba un simple yogur con cereales, chocapic, mi favorito. Igualmente, la cocina y yo no éramos muy buenas amigas, pero mi mamá me había dicho que tenía que aprender a cocinar porque a los hombres se les conquista por el estómago, y que ahora que era una mujer casada, debía cocinarle a mi esposo, yo solo la había ignorado, era un desastre en la cocina y eso sería muy difícil de cambiar.

Los matinales eran muy aburridos, no entretenían nada y no eran como la compañía de una persona, tomé mi celular y le mandé un mensaje a mi amor. Al instante en que lo mandé vibró un celular en la mesa. Levanté mi vista y ahí estaba su celular. Lo tomé entre mis manos y sonreí al ver una foto de nosotros dos dándonos un beso en su fondo de pantalla, era tan lindo. Tendría que ir a dejarle el teléfono porque él iba a estar unos días afuera y moriría sin escuchar su voz por tantos días.

Unfaithful | Eduardo Vargas | Charles AránguizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora