| Capítulo 1 |

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- No entiendo por qué no puedes ir.

- Sólo no quiero ir y ya, Agus.

- Te vas a divertir.

- No te consta.

- Te lo aseguro yo, vamos Karol, te hace falta una salida.

- Últimamente siempre ando en la calle.

- Me refiero a una buena salida, sin que te emborraches y termine yéndote a buscar a un bar. - me dijo Agus malhumorado mientras veía que disfraz colocarse, de los que había en la tienda para la fiesta de Halloween de Gastón.

- Pues déjame ir, no sé por qué sigo en Estados Unidos, no tengo empleo ni lugar dónde vivir. - le dije algo frustrada, caminando detrás de él por toda la tienda.

- ¿Y mi casa, qué?

- Me siento incómoda al estar como una vaga en tu casa, Agus, además ya se me está acabando el dinero que tenía ahorrado.

- Claro, si te lo gastas en cervezas. - Me regañó. Por Dios, si andaba un poco alcohólica últimamente pero no tanto, al menos le he reducido en los últimos meses. - Dios, maldigo el día en que cumpliste 21 y pudiste tomar legalmente como loca.

- Entonces déjame ser libre y volver a mi hermoso país.

- Ser libre no es huir, Karol. - me dijo mientras veía un disfraz de spiderman en sus manos.

Sé que tenía razón, libertad no es huir, pero es que en sí, yo quería liberarme de este puto país en el cuál todo me recuerda a él, aunque se que volviendo a mi país va a ser igual, por mi mala costumbre de escuchar sus canciones, pero que hacer si lo que te calma es también lo que te hace daño.

- ¡Karol! - me gritó Agustín sacándome de mis pensamientos.

- ¡Que!

- ¡Te estoy hablando!

- ¿Que pasó?

- ¿Crees que este disfraz me quedaría bien?

- ¿Spiderman? - lo miré riéndome, el asintió. - Es Halloween, Agus, tiene que dar miedo.

- Mi sobrino le tiene miedo a spiderman.

- Está bien, tú verás, compra lo que quieras.

- ¿Y tú que vas a comprar?

- ¡Nada, ya te dije que no voy a ir! - le grité haciéndole saber que es mi decisión final.

...10 minutos después...

- ¡No me voy a disfrazar de enfermera sexy! - soy débil, lo sé.

- ¿Por qué no? Vamos, es el disfraz perfecto.

- No, nada que sea sexy, por favor.

- No quieres encontrar el amor.

- No de nuevo, por favor. - le dije fastidiada mientras le tiraba el disfraz de enfermera en la cara.

- Han pasado casi 10 meses, Karol, es increíble que tú y Ruggero aún no lo superen. - me quedé callada viendo un disfraz de Dora la exploradora entre mis manos. Ruggero no lo ha superado... o sea que no soy la única sufriendo aún y martirizándome por los recuerdos.

- Nada sexy, te dije. - le dije ignorando el comentario anterior, sentí su bufido caminando detrás de mí, viendo más disfraces.

TUYA | segunda y tercera temporada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora