J&A[ChicaxChica]

Capitulo 5

Narra Jimena

— ¡Oigan! ¿Que hacen todavía aquí?—

Alguien había entrado, me separe de Alejandra y aparente estarla abrazando.

—Cualquier cosa estabas llorando y yo vine a consolarte— le susurre al oído, a lo que ella sólo asintió. Me separé de ella para encontrarme con el jefe de intendencia en la puerta, al parecer apenas iba a limpiar este salón.

— Oh disculpe, es que ella estaba triste y vine a consolarla— nos observo un par de segundos, pero las lágrimas que aún quedaban la cara de Alejandra me ayudaron a convencerlo — Ya estamos bien así que nos iremos— le dije mientras tomaba de la mano a Alejandra para irnos

—Eh... ¿Están bien? Puedo hacer que llamen a sus padres— nos dijo mientras salíamos.

—No, no se preocupe estamos bien; hasta mañana— me despedí rápido y salimos de la escuela.

— Estuvo cerca— me dijo Alejandra con algo de timidez mientras caminábamos por la calle.
— Sí pero pudimos salir de esa así que estuvo bien— en ningún momento había soltado la mano de Alejandra, algunas veces, cuando me acercaba un poco más a ella, podía sentir como se tensaba.

— ¿Qué te parece si vamos al cine?— le pregunté para calmarla y también para poder pasar más tiempo con ella.

—Si...buena idea— no pudo evitar sonrojarse.

Es tan tierna.

Habíamos llegado y entramos a sala ,mientras estábamos ahí quité el descansabrazos que estaba entre Alejandra y yo para poder tomarla de la mano esto hizo que empezar a tensarse de nuevo; demonios es muy tierna, cada vez que hace algo así me dan ganas de besarla.

— Está algo aburrida—dije después de un bostezo.

— ¿Te gustaría que saliéramos?—me respondió

— Si, vamos a tomar un café— salimos y compramos un par de cafés para sentarnos en las mesas del área de comida; quería platicar pero al parecer Alejandra estaba algo nerviosa ya que no separaba las manos de su bebida y evitaba mirarme a los ojos.

Estaba a punto de decir algo para evitar estos silencios incómodos, pero Alejandra habló primero.

—Am...Nosotras ¿estamos saliendo?— La observé un par de segundos impactada por lo que había dicho —Bueno me refiero como...pareja— eso me dejó en shock, no es algo que ella diría, pero me recompuse.

—Pues para ser una pareja uno debe preguntarle al otro si quieres ser su novio o novia ¿no? —Le dije con un tono divertido.

—Si...supongo— hubo un poco de desilusión en sus palabras porque obviamente yo no se lo había pedido; es tan lindo que eso le preocupe.

—Bueno qué te parece... estaba a punto de hablar pero lo interrumpí mientras tomaba sus manos y me acercaba un poco a ella.

— Alejandra ¿te gustaría salir conmigo? —le susurre muy cerca, sus ojos se abrieron enormemente y su cara estaba roja como la de un tomate.

—S-si— me contesto casi inaudible
— ¿Que dijiste? No escuche— le conteste con un tono gracioso; la había escuchado, solo quería que lo dijera de nuevo.

—Si...quiero— dijo desviando la mirada al suelo.
Sinceramente era extraño escucharlo de una mujer a otra, pero eso no me importaba ahora.

—Bien— me acerque para besarla y ella se quedo tiesa como una momia —Oye si no abres tantito tus labios no es divertido— le dije haciendo un puchero. Me acerque de nuevo a ella pero esta vez sus labios se abrieron.

La bese lento y ella me correspondía; duramos así unos segundos, realmente besarla era como comer algodón de azúcar.

Después de eso pasamos toda la tarde junta hasta que la acompañe a la parada.

—Gracias por todo— me dijo al ver que su transporte se acercaba.

—No hay de que— le dije mientras ella solo sonreía.

Le di un beso en la mejilla antes de que subiera, cuando me asegure de que estuviera bien empezó a caminar hacia mi casa; me sentía la chica más feliz de todas, tal vez sea un problema que ambas seamos mujeres, pero en ese momento nada importaba; nada más que las dos pudiéramos estar juntas.