the girls power

124 5 0
                                    

En resumen de lo qué pasó el resto del finde semana.
Dejé el sábado a Pandora en su casa, estaba bien, pero no mejor.
Hablé con mi padre y quedar en que iría a dormir el viernes, quería que cenasemos juntos él, su novia y yo, accedí porque mi padre es muy bueno con Dani y conmigo, nos ayuda económica y está pendiente de nosotros, no como la mantenida de mi madre que lleva sin ducharse semanas.
Le di un ultimátum a Sam y decidí que el Lunes haría algo con Nick.
Y ya era Lunes, Pandora no vino, y las demás estaban a su bola, en clase o haciendo alguna tontería para matar el tiempo.
Yo estaba sentada en un banco afuera del instituto, no había ido a ninguna clase, tenía mi plan pensado, Nick iba a ser mi blanco.
Tantos años siendo un desorden contra la autoridad me tendrían que servir para llevar a Nick a la mierda más lejana y asquerosa del mundo.
Oí la campana que anunciaba el comienzo de la primera hora para los alumnos, para mí, era el comienzo de mi venganza.
Como sabía que Pandora jamás me perdonaría si le dijera algo a el director, decidí tomarlo por mi cuenta.
Tenía un viejo amigo que vendía marihuana a buen precio así que le compré cuatro bolsas, me había gastado el dinero de tres meses que mi padre me daba.
Tenía la mochila preparada y me dirigí hacía la parte trasera del instituto, donde estaba Nick con alguno de sus amigos.
El pasillo estaba Casi vacío, me encontré con algunos compañeros de diferentes clases que corrían por los pasillos hacía sus aulas.
Y cuando ya estaba al final del pasillo, ahí estaba, la taquilla de Nick.
Una sonrisa malévola se dibujó en mi cara.Abrí la mochila, y el olor me tiró para atrás, como nuestras taquillas estaban con candados no sería muy difícil abrirla con una horquilla.
-Las clases ya han empezado Taiga-Una voz de hombre grave me sacó de mi concentración para abrir la taquilla y cuando me giré solo pensé en una palabra.
MIERDA
James me miraba a la vez que miraba mis manos pilladas in fraganti intentando abrir el candado.
-Tu taquilla está en la otra parte del instituto, por lo que debo suponer que está no es la tuya, por lo que por eso la estás intentando abrir y- Puso ceño fruncido y empezo a respirar exagerado, miró la mochila y la cogió.
Se acabó, a la mierda el plan.-¿Qué es ese olor?-Sacó de la mochila uno de los sobres de marihuana y suspiró.
-No me lo puedo creer Taiga,¿Qué te pasa?,¿CÓMO TRAES AL INSTITUTO MARIHUANA?.
Sus ojos estaban llenos de sorpresa y su voz era fuerte, estaba enfadado.
-No es mía, bueno sí es mía, pero no lo entiendes.
-¿Te has hecho camella?-No era una situación para bromear pero casi me río.
-No, pero no puedo decírtelo-James se acercó a mí y puso su mano en mi barbilla.
-Sabes que puedes decírmelo, llevas haciéndolo dos años-Cogí mi mochila y lo seguí por el pasillo, el mismo camino pero está vez el destino era más fácil.
Atravesamos varias puertas cerradas y algunos despachos, hasta llegar a una puerta que la conocía bien, donde se veía puesto psicólogo.
Ambos entramos y yo me senté en mi silla, James cogió la silla que había al lado y la puso en frente de mí.
Sabía como funcionaba esto, y sabía que me lo acabaría sacando.
-Entiendo que ya no quieras venir, Taiga, pero te viene bien hablar con alguien, hablar conmigo, y sé que lo nuestro está mal, estuvo mal, pero poco a poco podemos ir trabajando.
-No,vengo porque tú jefe me ha castigado dos semanas por las tardes, a parte sí está mal lo nuestro.
Lo miré a los ojos y por primera ver desde que nos dejamos de ver,sentí vergüenza, me daba vergüenza​ que había estado viéndome con un profesor, bueno no era profesor, peor, mi psicólogo, y lo peor estaba por venir.
-Taiga, se que no me miras cuando nos cruzamos por los pasillos, yo lo siento, pero creo que ambos tenemos que hablarlo, aparte de tu problema.
-¿De qué tenemos que hablar?, nos acostamos y ya está.
Y ahí estaba yo sensibilizando el asunto, desde luego no iba a dejar que me viera afectada.
James había llegado al Instituto Madon hace tres años.
La primera vez que nos vimos fue después de clase, me había peleado con una de las chicas de mi clase de matemáticas.Me llevaron a su despacho y ahí empezó el tonteo que luego se convirtió en más cuando un día fuimos a su casa y nos acostamos después de un año y medio yendo al psicólogo del instituto.
Tiene treinta años y perdí mi virginidad con él, y le contaba todo, así que podía confiar en él.
-La marihuana era para Nick
-¿EL novio de Pandora?-Esta vez, James no estaba anotando nada como todas las veces que venía.
-Sí, se la iba a meter en la taquilla, iba a dar un chivatazo para que le expulsaran-Mi plan perfecto se iba convirtiendo en el plan hundido.
-Se que no te cae bien, Taiga,pero si a Pandora le gusta tienes que respetar a tú amiga-Tenía razón, pero cuando le contase lo demás se cambiaría a mi bando.
-Llevo días pensando que la pega.
Habían discutido y el viernes todas nos fuimos a Destruction y en los baños me lo encontré forzando a Pandora.
James se quedó sin pestañear, sabía que iba a reaccionar así.
-La vio...
-Sí-No quería que acabara la palabra porque ni yo en mi mente la había pensado.
-Taiga, eso es horrible, es denunciable.
-¿Ahora entiendes lo de la marihuana y la exposición?-Me incliné hacia él.
-Eso no es suficiente, tiene que ser denunciado, Pandora tiene que denunciarle, eso es un delito, y una humillación hacía la mujer-Se levantó y empezó a dar vueltas.
-Pandora no dirá nada, sigue estando perdida y no quiere hablar con nadie.
-¿Tú no lo vas a denunciar?, eres su mejor amiga-Casi me río al oír la palabra denunciar por mi parte.
-Me tienen fichada por el robo del instituto.
Hace un mes, cuando empezó el Instituto, el director creyó que comprando una estatua horrible del logo del equipo de fútbol animaría a los estudiantes, y lo que hizo fue animarnos a robarla.
-Es verdad,¿Porqué lo hicisteis?-Dijo James.
-Porque era horrible, cada vez que pasaba por allí mis ojos sufrían de quedarse en negro para siempre.-Además sé que le hice también el favor a otros muchos alumnos, aunque miré más por mí.-¿Porqué no lo denuncias tú?-Era genial, seguro que a él le harían caso.
-Taiga, ¿cómo explico que a Pandora, una alumna del instituto donde trabajo fue abusada por su novio?.
-Tú eres el adulto, tú sabrás.Pero bajo ningún concepto puedes decir el nombre de Pandora o el mío, te lo pido por favor, James.
Mientras él se acariciaba la barba de apenas unos días, yo me hacía un coleta con mi pelo cobrizo enmarañado.
Después de muchas vueltas por el cubículo, James accedió a mi petición y se fue al director.
Cuando estaba ya fuera del instituto decidí llamar a Dani.
-Hola-La voz de Dani sonaba agitada y se oía de fondo música y unas máquinas, estaba en el taller.
-Hola, necesito hablar contigo sobre Pandora-Sabía que le importaba cómo estaba Pandora y sabía que si quería que viniera a por mí en vez de volver andando, tendría que esperar a que se lo dijese en persona.
-¿Qué tal está?,¿Ha ido a clase?, ¿Está contigo?-Puse los ojos en blanco al oír su tono de desesperación.
-¿Puedes recogerme?-Le corté su patético diálogo.
-Eh,sí, pero ¿Y Pandora?-Dijo
-Está en casa, es demasiado temprano para que vuelva a clase, le ha dicho a su madre que se encontraba mal.
-Vale, en diez minutos estoy ahí.
-Adiós-Me despedí y le colgué.
Tenía pensado ir a la cafetería, avisar a mis chicas y esperar los diez minutos, hablando y poniendo verde a todo el mundo, así que, eso es lo que iba a hacer. A esta hora las hermanas Ross tenían educación física y siempre se la saltaban y se iban a la cafetería.
Me dirigí al patio, para rodear el edificio por la parte de atrás para que nadie me viera y me mandara a clase, cuando estaba por la mitad del camino, un chico de espaldas a mí estaba apoyado en un árbol fumando.
Era alto y vestía de deporte, se le acentuaba un pelo rubio desordenado.
-Hijo de puta-Solté y él chico me oyó porque se giró y esbozó una pícara sonrisa.
-Hola puta, no he visto hoy a mi novia,¿Dónde está?- Cuando empezó a hablar yo ya estaba plantada en frente suya, lista para matar a ese monstruo.
-Ella no es tú novia, y apartir de ahora tú no tienes nada que ver con su vida.
-Cuidado que la gatita saca las uñas,¿Está enfadada por lo que paso el viernes? Venga si sólo fue un polvo.
-Serás maldito cabrón, hijo de puta, basura, la Violaste, maldito-Se me iban a salir los ojos y mi garganta dolía por cada insulto que salía de mi boca, mientras le empujaba con mis brazos.
-Es mí novia y puedo hacer lo que quiera, porque es mía, cielo.
Piensas que es tuya-empezó a reírse-Piensas que ellas como son fieles a ti, te pertenecen, pero Pandora es mía, si quiero que haga algo lo hace, si quiero que diga algo lo dice y si quiero follarla me la follo.
No he sido muy defensora de la violencia, pero quería matarle, lo quise hacer cuando me los encontré en el baño, cuando Pandora se hacía daño en la ducha, cuando lloraba vacía y descompuesta.
Así que le estampe mi mano en forma de puño en la mandíbula, Nick se tambaleo sin llegar a dar un paso atrás, y aproveché para irme de allí.
Salí corriendo hacía la puerta del instituto, no se si Nick me seguía o no, pero no me iba a parar a comprobarlo.
Quedaban cinco minutos para que Dani me recogiera, cinco minutos que sabía que se iban a hacer eternos.
Estaba dando vueltas en la entrada, cuando mi teléfono comenzó a vibrar, abrí mi mochila y el olor a la marihuana me desconcertó algo, aparte las bolsitas a un lateral de la mochila, y cogí el móvil.
-¿SÍ?-No me había dado tiempo a mirar quién me llamaba.
-Taiga, soy James, el director a llamado a la policía, van a arrestar a Nick-Un alivio se formó en mi pecho, se iba a hacer justicia y lo iba a pagar, Nick tenía que sentir el odio que sentía, tenía que pudrirse.
-Estoy en la puerta, mi hermano va a venir a recogerme, acabo de ver a Nick detrás del instituto.
-Vale, Taiga te tienes que ir, la policía no puede verte, te pedirán que declares aunque no es necesario-subí mi cabeza al oír un motor de un coche, pero no era el de Dani, era un coche de la policía.
Colgué a James y le di las gracias por todo lo que había hecho.Del coche de policía, se bajaron dos hombres serios y hablando entre si, vi que señalaban a lo lejos y me giré, el director estaba saliendo de la puerta principal del edificio, yo salí corriendo para la otra zona del patio para que no me vieran.
Cuando los dos policías estaban cruzando hacía la dirección del director, un coche azul metalizado aparcó unas plazas más allá de donde estaba el coche policía, salí corriendo y me metí en el coche, Dani estaba viendo el coche policía y se giró a mí cuando me notó entrar.
-¿Qué has hecho Taiga?-Preguntó Dani mientras yo dejaba la mochila en el asiento de atrás.
-Un Columbine, sobraba muchos gilipollas en el Instituto-Dani tenía el rostro serio, y sé que si no estuviéramos en la situación que estamos hasta se hubiera reído.
-¿Es por Pandora,verdad?-seguíamos en el aparcamiento y no era muy seguro seguir ahí con la poli.
-Sí, por eso arranca el coche, vamos a la casa de Pandora y ahí os lo contaré todo.
Dani asintió y nos fuimos de allí a toda velocidad, mientras pensaba en como me gustaría estar presente en la detención de Nick, ver como todo se acababa y sentir la vergüenza si es que le quedaba alguna.
Ahora todo se había acabado, Pandora volvería a las clases y haríamos como si no hubiera pasado nada, incluso podría plantearme que hablara con Dani si se sentía mal en algún momento.
Todo estaba bien, pero todo dura poco, y cuando una tormenta se va y la calma es un instante fugaz, el Apocalipsis comienza y arrasa con todo lo que hay de por medio.

MALAS INFLUENCIAS(+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora