El engendro de Hoseok «Hopemin»

Jung Hoseok

—¡Jungkook!—Jimin trataba de llamar a su mejor amigo que se encontraba fuera del baño.

Jungkook entro al baño y tomó la prueba que estaba en la tapa del retrete.

—Jimin, esto aún no está listo, no seas molesto.

Los dos jóvenes se encontraban en el baño, esperando a que la prueba de embarazo de Jimin diera los resultados, los últimos días sentía nauseas y malestares matutinos, se sentía más cansado de lo habitual, y jungkook había notado que Jimin tenía muchos cambios de humor.

—Jungkook te juro que si sale positivo, voy a matarme—Jungkook río pensando que era sarcasmo hasta que vio la mirada del mayor.

—Lo siento.

—No tiene sentido que te disculpes, tú no tuviste la culpa de nada.

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—Jimin...—la prueba estaba lista y Jungkook la tenía en sus manos, la puso frente los ojos del castaño, el sollozo de Jimin retumbó en las paredes, estaba escondiéndose entre sus piernas mientras sus lágrimas caían.

—Jimin, sabes que estoy aquí para apoyarte.

—Necesito estar solo, podrías por favor...—Jungkook lo interrumpió.

—Está bien Jimin, estaré en la sala.

En cuanto el menor dejo el baño, Jimin grito y golpeó el lavabo, estaba demasiado frustrado y enojado con si mismo.

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—Jimin ¿Qué piensas hacer?—Dijo el chico de labios carnosos que llegó después de que Jungkook le llamara.

—No tengo ni la menor idea, solo soy un chico que está en penúltimo último año de universidad, que trabaja en una cafetería para pagar sus estudios, con necesidades sexuales, que folló con un desconocido, y no solo eso, sino también se embarazo, y que no tiene ni con un solo centavo en su cuenta bancaria, definitivamente soy la persona más idiota en este planeta.

—Jimin, sabes que si hablamos de dinero Namjoon y yo podemos ayudarte con eso, no será un problema para nosotros, seríamos como sus tíos—Jin le dio una leve sonrisa que después se cambio a una de horror.

—¿Qué es lo qué pasa?—Jimin no había notado que estaba sangrando de la nariz.

Al ver la mirada del peligrosa acercó sus dedos a su nariz, estaba teniendo una hemorragia. Se sintió un idiota al no darse cuenta del sabor metálico que le llegaba a la boca.

Jin y Jungkook intentaron todo para detener la hemorragia, pero está parecía no ceder.

—Mierda, tenemos que ir al hospital—dijo Jin mientras tomaba las llaves de su auto. Jungkook salió detrás de él llevando Jimin con un trapo haciendo presión en la nariz.

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—Buenas tardes, ¿En que puedo ayudarle?—después de diez minutos llegaron al hospital, ahora Jin se encontraba frente a la secretaria del hospital explicándole lo que pasaba, mientras que Jungkook y Jimin estaban sentados en las sillas del hospital, la hemorragia había disminuido pero no había parado por completo.