ADICTA A TI...

Llegada

Capítulo 2

-Pasa, bienvenida a tu hogar. - dijo caminado detrás de mí, Ay! Dios si no fuera porque es mi tío juraría que esto era un sueño

Entre con torpeza al departamento aun no podía creer que iba a vivir con ese bombón de hombre era tan...tan tentador por no decir otras palabras, durante un año. Su departamento era muy amplio y de lujo, rodeado mayormente por ventanales en los que se podía ver la ciudad, adentro había una sala negra de piel enfrente de una pantalla de plasma, junto a la sala había una terraza que tenía una hermosa vista, la cocina y el comedor se encontraban en el otro extremo.

-Esa es tu habitación ...-dijo en tono frio señalando la habitación la cual tenía la puerta cerrada.

-Gracias ti...-No pude completar mi frase ya que se había caído una de mis maletas; por lo cual el accedió a levantarla.

-Sakura no me llames tío...solo dime Sasuke-dijo levantando mi maleta.

-Está bien ti...Sasuke...- dije torpemente, era la primera vez que me ponía tan nerviosa frente a un chico no podía concebir que hubiera un chico tan jodidamente sexy en el planeta.

Segundos después entre a mi habitación era amplia y al igual que en la sala tenía dos ventanales grandes pero esta vez tenían vista al mar, muy parecida a la que tenía en California, a lo menos podía ver el atardecer y sentirme un poco más como en casa, junto a ella había un escritorio donde coloque mi laptop, aun costado había una cama de tamaño matrimonial y al otro extremo de ella estaba el armario el cual se veía demasiado pequeño para toda mi ropa.

Encendí mi celular al parecer mis amigos me extrañaban más de lo que pensaba, Tenten e Ino me habían dejado 20 mensajes de voz en los cuales no paraba de decir cuánto me añoraban y Sasori 25, en los cuales me decía que me amaba, que no importaba la distancia y que le hablara en cuanto viera sus mensajes. Me coloque los audífonos de inmediato, y le hable primero a Sasori en verdad necesitaba escuchar por lo menos su voz, al escucharlo se notaba realmente desesperado al no saber nada de mí.

-¡Sakura! ¿Cómo estás? ¿Llegaste bien? - pregunto preocupado.

-Tranquilo...Estoy bien...si no me paso nada en el vuelo...- trate de sonar lo más entusiasta posible para poder tranquilizarlo.

-Es bueno escucharte...todavía no pasa ni un día y ya te extraño.- dijo más tranquilo.

-Yo también te extraño más de lo que crees, pero voy a estar bien mañana inician las clases en la universidad y estaré ocupada así que no tendré tiempo para deprimirme- dije mientras acomodaba mi ropa en el armario, mis zapatos y accesorios.

-Está bien te creeré ya que tú nunca me has mentido...por cierto ¿cómo es tu tío? - dijo con más curiosidad de la esperada

- Mi tío.......- No sabía que decirle, el solo recordar su mirada, su cabello y torso húmedos hacia que me sonrojara y que se acelerara mi corazón -...pues supongo que como todos...aun no lo he tratado muy bien.

-Si es lo más probable... oye por cierto Ino está más desesperada por hablar contigo no dejo de llorar después de que tomaste el avión- dijo en tono burlón

-Jajaja...nunca cambia -podía imaginarla desesperándolo- si en un rato más le hablo.

-Te amo...no lo olvides mi niña - en su voz se notaba mucha tristeza escucharlo decir eso me hacía sentir su ausencia mucho más tanto que mis lágrimas comenzaron a salir.

-Yo también te amo...- fue lo único que pude decir las lágrimas y el nudo que se me había hecho en la garganta me impedía seguir hablando.

Después de unas horas después de acomodar casi toda mi ropa en el armario, salí a buscar algo de comer a la cocina. Al llegar a la sala vi a mi tío sentado viendo la televisión, traía unos jeans negros con una playera azul sin mangas que dejaba al descubierto sus fuertes brazos; hay dios este hombre era la personificación del pecado.

Me dirigí hacia a cocina, abrí el refrigerador me preparé un sándwich y me serví un poco de jugo al terminar me dirigí a mi habitación para comer más a gusto.

-Sakura...- dijo en tono frio sin voltear a verme.

-S... ¿Sí? ...-dije nerviosa aun no me acostumbraba a su voz grave, a la forma en que pronunciaba mi nombre tan sensual hacia que mi corazón se acelerara.

-Tus papeles de la Universidad están en la mesa- dijo

- Gracias ahorita los reviso- me dirigí a mi habitación a dejar la comida y volví hacia la sala y me dirigí a la mesa del comedor.

-Ya dejaste de llorar- dijo susurrándome al oído.

-Yo...yo no estaba llorando-di un salto al escucharlo como había llegado tan rápido, tomé los papeles y fingí leer.

-No te asustes solo soy yo. -dijo en tono burlón; me tomo de los brazos, sus manos eran grandes, se posesionaron de mi con tal firmeza que era capaz de rendirme ante el en esos momentos.

-Eso ya lo sé Sasuke ...- trate de sonar tranquila, pero al sentir su pecho contra mi espalda aceleraba más y más mi corazón tanto que creí podría escucharlo.

-Al parecer ya no tienes los ojos hinchados como los tenías en la tarde...-dijo mientras me volteaba hacia el sin soltarme.

-Eso fue...por...- dije aún más nerviosa la tranquilidad que tenia se había esfumado es solo un instante. Tomo mi rostro con su mano haciendo que nuestras miradas se cruzaran, su mirada era cálida y profunda, su labios eran un deleite.

-Los extrañas ¿verdad? -dijo sin apartar su mirada.

-...si y mucho extraño a la torpe de Tenten e Ino con sus...-solo recordarlas me partía el corazón. - y Sasori ... Su voz, sus abrazos...sus besos......-Mis lágrimas comenzaron a salir, no las podía contener, había guardado toda esa tristeza  ytristeza y ahora el con solo una pregunta me ponía así, hacía que le mostrara otra parte de mí.

Por alguna razón no podía mentirle, su mirada veía atreves de mí, me abrazo fuertemente cuando vio que no dejaba de llorar, coloco mi cabeza sobre su pecho así estuvimos como diez minutos en lo que dejaba de llorar.

-No sé cómo ayudarte para que no añores tanto a tus amigas, pero... - hizo una pausa mientras evaluaba mi rostro. - Tengo una idea para que no extrañes tanto a tu novio- dijo levantado de nuevo mi rostro.

-Que...quieres decir con eso...........-Dije más tranquila, su mirada me envolvió, acerco sus rosto hacia el mío, podía sentir su respiración en mi piel, rozo sus labios contra los míos...pero solo se limitó a darme un beso en la mejilla.

-Por ahora lo dejaremos así...- dijo  con voz seductora al momento que se alejaba de  mi rostro- Tengo  que salir  llego al rato....

Tomo sus llaves y se fue.... me sonrió de despedida. Al escuchar el portazo despertéportazo desperté del trance en que me había dejado, me deje caer sobre mis rodillas, ¿cómo es que estaba pasando esto? ¿Cómo sucedió tan de repente? solo fueron alguna de las cientos de preguntas que comenzaron albergar en mi  ahorami ahora confundida mente; y lo peor  me había dejado llevar por mi debilidad  hacia él y sobre todo a la tristeza  producida a la soledad que sentía en ese momento.