Enamorandome de mi protegido

Capitulo 12

Annabelle P.O.V

Vamos en camino a la sala de conferencias, debo reforzar la seguridad para que nada salga mal, conmigo vienen Mike y Liam, estos don son bastante unidos, cosa que me agrada. Cuando llegamos borro cualquier mueca de felicidad de mi cara y coloco mi mascara de Bestia. Los policías del lugar esperan mis instrucciones, las cuales no tardan en llegar, muchos de ellos reflejan su orgullo machista quebrado, mientras otros cuantos me miran con asombro e incluso puedo decir que con admiración. Una vez que los acomode, y planifique como se ubicara mi equipo uno de los uniformados chilenos se acerca a mí, no creo que tenga más de 25 años

--Buenos días señorita, vamos a salir por un café, quiere uno?—este uniformado mira el suelo todo el tiempo, no me ve a los ojos, lo cual simboliza una sola cosa: MIEDO

--Buen día, claro, 3 cafés negro, sin azúcar—lo miro y asiente—y una cosa más—mira mis ojos—No me llames otra vez señorita, soy Anna, o Bestia en su defecto, entendido?—asiente frenéticamente –Puedes marcharte hijo.

Sale cual alma que se lleva el demonio, y aparece tras haber pasado 15 minutos en los cuales Mike me reprende por asustar así al chico, cuando me tiende los 3 cafés, yo saco mi cartera, pero él niega el dinero que le entrego, en un ágil movimiento coloco el dinero en la mano del oficial, lo miro mal para que no devuelva, lo cual funciona.

Son las 9:30am se supone que mi equipo llegue en breves, y a las 10 am llegue Samuel. El sonido de 7 automóviles me saca de mis pensamientos, ellos han llegado. Bajan riendo frenéticamente, diciendo mi nombre y el de Samuel en la misma oración, mi padre rie con ellos, cosa que me extraña, cuando notan mi presencia, y mi cara de "No me molestes porque romperé cada hueso de tu cuerpo" se callan, hasta mi padre.

--Equipo Alfa, van a estar en el frente, en la puerta principal—los miro, y ellos asienten, y 5 personas salen del recinto—Beta, van a la parte de atrás, donde ingresaran Roberts y Harrison, luego se quedaran custodiando el auto—otras 10 personas salen del lugar—Delta y Pi, estarán adentro, 5 de ustedes estará conmigo, Mike y mi padre en el escenario, el resto van a camuflarse entre los espectadores, tengan los intercomunicadores encendidos en todo momento.—me miran y asienten, de retiran otros 10 a inspeccionar la sala, y quedamos mi padre, Mike, Liam, Zac, Hunter, Will, y Mark, dos de estos son novatos, tanto Will como Liam tienen un cierto nerviosismo en su mirada, la cual calmo con palabras alentadoras.

Dan las 10 am, los reporteros van llegando y al notar mi presencia en el recinto se tensan, es obvio que conocen mi fama, y lo que se dice de mi a cerca de mi relación con los reporteros. Cuando estos se ubican en sus respectivos asientos, una gran multitud de fans chocan contra las vallas que pusimos hace solo 30 minutos. Muchas de esas personas son mujeres con muy pronunciados escotes, que tratan de comprar un pase V.I.P a los guardias, ofreciéndoles no solo dinero, sino a ellas mismas, cosa que me repugna. Menos mal que minutos antes les advertí sobre estas actitud a mis dos novatitos, sino hubieran caído en sus redes. Por mi intercomunicador suena la voz de Mike, me notifica que Samuel llego al recinto, y que está en la parte de atrás, ordeno a mi equipo que se posicione en el escenario, mientras que yo me dirijo a la parte de atrás para escoltar a mi protegido, nada hoy puede salir mal.

Samuel P.O.V

Luego de ese momento donde quería hacerme invisible, decidí cambiar mi ropa, para salir de esa sala llena de personas que acababan de descubrir mis sentimientos. Luego de unos minutos, tal vez fueron horas, todo quedo en silencio, vuelvo a bajar y me encuentro a Gregy con otro hombre, solos, hablando en la cocina.

-- Donde están los demás?—pregunto mirando a ambos lados

--Se fueron Anna los llamo—mi corazón se detiene solo al escuchar su nombre—tenían que acomodar sus posiciones antes de que tu llegaras, y cuando la jefa se te acerque quita la carita de enamorado, o te la romperá –tanto Gregy como el ríen—crees ser el primer protegido o mejor dicho, hombre que va a tratar de cortejarla, he trabajado por años con ellos y te puedo decir que he visto a decena de hombres con la misma carita que la tuya, y esas caras son las que tuve que curar luego que ella lo notara, sigue mi consejo, cambia la cara, sino realmente sufrirás.

--No lo hago a posta, sonrío sin querer, pero seguiré tu consejo, tratare de mantenerme al margen.

15 minutos luego de esa conversación salimos de la casa de la Bestia, el camino fue silencioso, pero un gran bullicio se escuchaba cuando nos acercábamos a la sala de conferencias, el recinto estaba rodeado de fans, policías, y por lo poco que pude ver, del equipo de guardias. El auto estaciono en la parte trasera, donde nos esperaba un pequeño número de guardias, más bien 10 de ellos, me guían al interior donde estamos tras bambalinas, y allí, con su ropa de metalera, con ese hermoso cabello, y ojos negros tan profundos como la noche, se acerca la mujer de mis sueños, mi Bestia.

--Llegaron a tiempo, perfecto, hay por lo menos unos 50 reporteros, y unas 400 fans, estás listo Samuel? –Asiento, es la primera vez que me llama por mi nombre, y suena tan lindo como en mis sueños—Entonces andando, te esperan las cámaras—solo sonrío y la sigo, ella habla sola, creo que tiene un micrófono por el cual habla con el resto del equipo. Localizo a su padre, a Mike, y Liam en el escenario, en cuanto pongo un pie en este, los reporteros comienzan a cegarme con los flashes de las cámaras, y se dejan la voz para que conteste sus preguntas. Los minutos van pasando, y se convierten en horas, las preguntas van de las más triviales, hasta las más personales, en todo momento miro por el rabillo del ojo a Bestia, que hace señas, y habla por el auricular que tiene en su oído, cada vez que trato de abrir la boca para hablar, las fans gritan, me están dando migraña, ante mi incomodidad, Bestia se me acerca.

--Que te sucede?—su rostro muestra preocupación—quieres una aspirina o algo, contesta—grita/susurra en mi oído.

--Sácame de aquí, se me parte la cabeza, y me estoy mareando—le digo algo agotado, ella asiente

--La última pregunta, el señor Roberts tiene otros compromisos—dice en tono autoritario, las 50 manos se levantan, y ella señala a una al azar, sé que esta persona es la presentadora de un conocido programa de chismes

-- Señor Roberts, siendo la última pregunta, hay una incógnita que nos inquieta a todos, cual es la razón por la cual usted afirma, y cito "No hay ninguna mujer en mi vida, aunque hay una en mis sueños" y aunque este haya sido su testimonio, no podemos dejar de preguntarnos el porqué de estar pendiente de los movimientos de la señorita Annabelle, mejor conocida como La Bestia?—me descoloca esta pregunta, se dieron cuenta, que no la dejaba de mirar, claro, no son idiotas, y ahora qué hago?, piensa Samuel, piensa—El silencio otorga, se confirma una atracción del señor Samuel Roberts hacia la seguridad Annabelle Anderson?—sigo callado, los flashes retumban y los murmullos son constantes, no sé qué hacer.

--El señor Roberts se retirara, no está bien de salud, muchas gracias por su presencia, damos por concluida la ronda de prensa—Bestia se me adelanta, tras terminar de decir esto, me toma de un brazo y me lleva a la parte de atrás—Te encuentras bien Samuel—no digo nada, no puedo ni mirarla a los ojos—Respóndeme maldita sea, no te dejes influenciar por la arpía, busca un momento para demostrar que tengo corazón—ríe—Solo busca algo para comentar en ese espantoso programa de poca audiencia, busca fama a costillas de otros, no le hagas caso, sé que nadie se fijaría en mí, solo mírame—se señala con la mano—no soy una mujer funcional.

--No digas estupideces, quieres, deja de decir eso, eres la mejor mujer que conozco, eres la persona más valiente que he conocido en mi vida. —las palabras salen sin esfuerzo de mi boca, todo lo que tenía guardado se lo he dicho, ella solo me observa, buscando un rastro de mentira en mi rostro, pero al no encontrarla, solo sonríe y me saca del lugar.

Cuando casi llego al auto, unas 100 fans saltan la valla, y corren en nuestra dirección, Bestia me cubre con su cuerpo, la tengo a solo milímetros de mi cara, estoy entre ella y el auto, me grita que me suba, lo cual hago, intento que ella ingrese conmigo, pero cierra la puerta, una de las fans la empuja contra el auto, ella desde el suelo ordena que me saquen de ahí. Grito con todas mis fuerzas que vuelvan por ella, pero el conductor no me escucha, lo último que veo es a Bestia siendo pateada por un montón de fans luego un agudo dolor se instala en mi cabeza, y todo se vuelve oscuridad.