Siege 《YoonSeok》

Cuatro

Cuando Hoseok despertó escuchó el ruido de pasos fuera de su habitación, la luz que entraba por su ventana le indicaba que estaba amaneciendo. La puerta de su habitación se abrió dejando ver a una enfermera que no conocía.

-Debes ser el nuevo - sonrió- soy Jin Ah.

Hoseok asintió e hizo una pequeña reverencia -Soy Hoseok.

La chica sonrió - Es hora del desayuno, ve a asearte y sal al comedor. 

-Está bien- sonrió  y antes que la chica saliera la detuvo -¿Qué sucedió con Namjoon? 

La sonrisa de la chica desapareció -Está ocupado con otro paciente.

Antes que Hoseok pudiese hacer otra pregunta la enfermera salió de la habitación cerrando la puerta tras ella. El castaño se levantó de la cama para ir al baño, al estar listo salió al pasillo y caminó hacia el comedor. Llegó a una mesa vacía y sentó, esperaba ver a Yoongi pero no había señal del chico, cuando sirvieron el desayuno Hoseok seguía sin poder ver al pelinegro. 

Jin Ah supervisaba a todos los pacientes, Hoseok pensó que tal vez sería prudente preguntarle sobre Yoongi así que cuando ella se acercó a su mesa no dudo en hacerlo.

-¿Sabe dónde está Yoongi? 

-En su habitación y dudo mucho que salga.

-¿Cree que podría verlo? 

-No

Caminó hacia otra mesa y dejó a Hoseok. El castaño jugaba con su comida pensando en lo que sucedió con Yoongi la noche anterior, el pelinegro le ocultaba algo pero no podía reclamarle nada, después de todo no eran nada más que conocidos. 

Después de desayunar caminó hasta la sala central de su área, donde se repartían los medicamentos, recibió sus pastillas y se sentó frente al televisor. Miraba la televisión sin observar nada, su mente pensaba en el rostro de Yoongi y la manera en que rogaba porque ellos se callaran. 

Se levantó de la sala, no se sentía cómodo estando con los demás, llegó a su habitación y estuvo a punto de abrirla pero la idea más loca vino a su mente. Miró a ambos lados del pasillo y justo cuando una enfermera estaba distraída, corrió al lado contrario de su habitación y entró a la de Yoongi.

La cortina estaba sobre la ventana tapando cualquier rayo de luz del exterior, se acercó sin hacer ruido a la cama y vio a Yoongi hecho un ovillo sobre ella, estaba dormido. Hoseok se sentó en un espacio a la orilla de la cama. 

-¿Qué haces acá?- escuchó la voz ronca de Yoongi.

-Yo... quería saber si estabas bien.

Yoongi abrió los ojos y se levantó lentamente para sentarse en la cama y poder ver a Hoseok. El castaño, con la poca luz de la habitación, observó a Yoongi con un libro en sus manos.

-¿Es el libro que te di?- preguntó Hoseok señalando el libro.

-Sí - sonrió Yoongi o al menos eso pensó Hoseok.

-¿Qué te pareció?- dijo Hoseok con emoción en su voz.

-No lo he leído, en realidad no puedo leer en inglés. 

-¿Por qué no lo dijiste? 

-No quería parecer un tonto- Yoongi se rascó la parte de atrás del cuello.

-¿Quieres que lo lea por ti? 

Yoongi asintió, la poca luz que entraba por la habitación hacía ver la piel de Yoongi más blanca, su cabello se confundía con los tonos oscuros que rodeaban la habitación. Los chicos se sentaron con sus espaldas en el respaldo de la cama, Yoongi se sentó junto a Hoseok quien sostenía el libro.

-¿Puedo correr las cortinas? Necesito un poco de luz.

-No- contestó Yoongi de forma brusca mientras tomaba el brazo de Hoseok para que no se levantara de la cama -Si entra luz ellos podrán verte.

Hoseok se mantuvo en su lugar mientras miraba a Yoongi, tomó el libro entre sus manos y trató de leer a pesar de la escasez de luz.

- "Bastará decir que soy Juan Pablo Castel, el pintor que mató a María Iribarne; supongo que elproceso está en el recuerdo de todos y que no se necesitan mayores explicaciones sobre mipersona.Aunque ni el diablo sabe qué es lo que ha de recordar la gente, ni por qué. En realidad,siempre he pensado que no hay memoria colectiva, lo que quizá sea una forma de defensa de laespecie humana. La frase "todo tiempo pasado fue mejor" no indica que antes sucedieran menoscosas malas, sino que —felizmente— la gente las echa en el olvido. "

Fue así como Hoseok comenzó a leer el libro, mientras Yoongi lo observaba y ponía toda su atención en lo que le chico decía. El castaño se moría por preguntarle a Yoongi que es lo que sucedía por su cabeza, necesitaba saber quienes eran ellos y porqué el pelinegro les temía tanto. Pasó un tiempo hasta que Yoongi dormía sobre su hombro. 

Hoseok se levantó mientras acomodaba a Yoongi sobre la cama, poniendo su cabeza sobre las almohadas con cuidado de no despertarlo. Namjoon entró en el instante que Hoseok se dirigía a salir de la habitación.

-Sabes que no deberías estar acá.

-Lo siento- contestó Hoseok- Pero estaba preocupado por lo que sucedió anoche y decidí visitarlo.

-¿Sabes qué hora es?

Hoseok negó, Namjoon lo tomó del brazo para sacarlo de la habitación y cerrar la puerta. 

-Te saltaste la hora del almuerzo y casi es hora de cenar.

-No lo sabía, estaba leyéndole un libro a Yoongi.

-Ten cuidado- Namjoon apretó el hombro de Hoseok y comenzó a caminar.

-Espera- gritó Hoseok haciendo que Namjoon se detuviera.

-¿Quiénes son ellos? 

-Es mejor que te lo diga él cuando se sienta preparado. 

Namjoon caminó en dirección a la sala principal, Hoseok entró a su habitación para lavarse la cara y las manos. Caminó, luego de salir de su habitación, hasta el comedor para poder cenar, nuevamente se sentó solo con la voz de Yoongi diciéndole que ellos no debían verlo. No sabía lo que sucedía, pero tenía la necesidad de estar cerca del chico para alejarlo de ellos.

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Lo siento por no actualizar desde hace 6 días, pero estoy en época de exámenes en la universidad y me consume la vida. 

Gracias por leer y permitir que Siege llegue y pase las 100 vistas, agradezco inmensamente que me den la oportunidad de entretenerlas con mis historias :D