Ghost

4.¿qué habría pasado por su mente?

/Brenda/

Estoy nerviosa, sentada en una silla algo incómoda a lado de una chica que luce hermosa, parece que su maquillaje le ayuda mucho, en definitiva todas las chicas se ven hermosas, mientras tanto yo; ¿qué puedo decir? nunca me ha importado mucho mi aspecto, en realidad me da igual como vista los siete días de la semana.

Mis manos están algo sudadas, el esmalte que uso en mis uñas hace buena combinación con mi vestido, un vestido muy lindo que sin duda alguna mi hermana escogió para mí, y de no ser por su ayuda vendría a esta ceremonia en Jeans obscuros.

La primera alumna subió a la plataforma para dar unas palabras, Lara. Ella lucía tan bien, tan bonita. Se notaba claramente en su rostro que estaba demasiado nerviosa, tenía ese ataque de pánico que solía sucederle pero la miré de tal manera que ella también me mirara y entendiera mis señas.

"está bien" formulé con mis labios y sonreí ligeramente, ella intentó devolverme la sonrisa pero salió una mueca forzada. 

Voltee mirando en una vista rápida las personas que llenaban el auditorio, ahí estaba el; sentado con el birrete de graduación perfectamente bien acomodado, miraba en otra dirección, notó mi mirada y me cachó, me sonrojé.

(...)

Todos los graduados estaban emocionados, algunos lloraban, otros reían a carcajadas, pero yo estaba ahí, observándolos detenidamente, un recuerdo vino a mi mente.

Mi madre soñaba con estar presente en esta fecha tan importante. Me tomaba el tiempo para imaginarla; me toma de los hombros y me abraza fuertemente, besa mi frente delicadamente, me mira a los ojos "esa es mi niña" "lo has logrado" te amo tanto" me dice, y es cuando yo respondo con un abrazo...

-¿Brenda?-Derek me mira preocupado, yo salgo de mis pensamientos

-lo siento, estaba... - bajé la mirada apenada

-¿qué pasará después?- pregunta y suspira

-podemos quedarnos a celebrar, o tal vez no- sugiero, el me toma de la mano y comienza a caminar- ¿qué estás haciendo?-

-quiero mostrarte algo- sonríe misteriosamente

Mis pies no aguantan mucho y mi paso comienza a hacerse lento, me detengo. El se detiene de igual forma y me mira riendo.

-No puedo más, estos zapatos me queman los pies cada vez que doy un paso más- el se acerca y me carga, lo cual me sorprende. -Derek, más vale que sea rápido, mi familia debe de estarme esperando- le dije en cuanto llegamos, me bajó de sus brazos.

-no pienses en eso ahora-miró su alrededor-ahora solo estamos tu y yo- me miró misteriosamente.

-¿qué pasará?-mi voz se debilitaba, el posicionó sus manos en mi espalda, atrayéndome hacia el, yo respiraba descontroladamente.

El viento rozaba mis brazos, estábamos debajo de un árbol que se encontraba dentro del campo de la escuela, pero no era muy notable,  habían tantos árboles que nadie se daría cuenta. La verdad es que yo nunca me había topado con ese lugar y me sorprendía haber llegado hasta ahí, pero eso no era tan importante. Hojas secas de árboles caían a nuestro al rededor, en algún momento creí que sería una escena cliché.

- Brenda, quiero que seas sincera conmigo, por favor - lo miré a los ojos un poco confundida

- ¿de qué estamos hablando exactamente? - articulé finalmente. De alguna manera vino a mis pensamientos el pelirrojo con el que por meses había estado soñando y deshecho rápidamente la imagen.