Ghost

15. No por el

/ Brenda /

Había perdido la cuenta de los días transcurridos, las horas pasaban como gotas de agua pero las desgracias en aquel lugar parecían nunca acabar. Esa mañana la misma mujer que me  miraba el primer día que llegué a esa casa, me dio comida, no era muy amable, tenía la impresión de que fuera una esclava de David. 

Mi vida estaba acabada.

-Dave te quiere  ver- una mujer mal maquillada abrió la puerta avisándome, yo no hice ningún movimiento y ella procedió a entrar y levantarme a la fuerza de la cama bruscamente. 

-yo no voy a ir a ningún lado- la miré mal. Ella me jaló presionando mi brazo dolido.- ¡ouch!- chillé cuando me arrastró hacia la puerta, el cuerpo me dolía aún.

La blusa de tirantes me hacía sentir más insegura de lo que me sentía en aquel lugar. Llegamos a la planta baja y David me recibió con una sonrisa sínica, me llevó con el hasta la que debía ser la sala, sentí la mirada de varios hombres, todos con un objetivo. Sabía que David negociaba para vender a jóvenes, aquellos hombres iban a comprarme. 

-¿no es linda?- Me tomó por la cara estrujándome, traté de quitar su manos de mi cara pero su fuerza era mayor. Todos rieron. - Ve con Shelly- me empujó con la mujer que me llevó desde un principio hasta el.

Estaba aterrorizada. 

Me llevó con un grupo de chicas en la misma situación que yo, me miraron como a un  bicho raro, yo solo me hice bolita en algún rincón tratando de ignorar sus miradas que reflejaban angustia y horror. 

Shelly me cubrió los ojos con una tela obscura, me amarró las manos hacia atrás con una soga y me guió hasta la sala con los hombres. Todos silbaban y gritaban como animales, me sentí desesperada por no ver ni poder moverme, era repugnante lo que hacían, eran sucios, asquerosos, patanes y yo nada podía hacer. Sollocé y ¿cómo no sentirse mal si sabía que mi vida estaba acabada?. Comencé a tratar de desatarme las manos y fue cuando lo logré segundos después, seguido de esto me quité la venda de los ojos y juro que jamás había imaginado lo que estaba viendo.

No sabía que pensar al verlo, no sabía si me estaba traicionando o si estaba ahí para salvarme. En cuanto me quité la venda de los ojos paró de reír como un imbécil, pues miró que yo me dí cuenta de su presencia, lo odié. Mis lagrimas me quemaban la piel y el no hacía nada más para sacarme de aquel lugar y llevarme a casa.

-Derek...-articulé en un sollozo

Y todo se salió de control, todas las chicas gritaban y los hombres en la sala se alarmaron al ver a Alexander apuntándoles a todos con un arma muy peligrosa, David me arrastró con el antes de ser visto, pero Alexander percibió sus movimientos. Me llevó al sótano y me golpeo contra el muro, mi cabeza rebotó.

-¿¡que fue lo que hiciste perra!?- me gritó como una bestia, sentí que veía estrellas, comencé a ver borroso.

-¡Brenda!-Esa voz era familiar, David me cubrió la boca con su mano antes de que pudiera responder, rezaba porque me vieran. Escuché que los pasos se alejaban y yo no iba a dejar que me olvidaran y me dieran por muerta. Le dí un fuerte golpe con la rodilla a David en la entrepierna y grité lo más fuerte que pude, David de jaló del cabello azotándome al suelo, nuevamente restregándome la cara, ya estaba sangrando. Sabía que en cualquier momento me desmayaría del golpe o del alivio al ver a Garret dentro, no me importó lo que estuviera haciendo con David, yo ya me sentía aliviada de ser encontrada.

/Alec/

Escuché al final del pasillo la voz de Alexander y corrí hacia el lugar, ahí estaba ella. Bocabajo tratando de levantarse, sentí un escalofrío al ver las heridas en su cuerpo, me quité la gabardina negra y se la coloqué sobre su espalda al mismo tiempo que la ayudaba a levantarse sosteniéndola de los hombros. Sus huesos eran notorios, su rostro reflejaba dolor. La abracé delicadamente sintiéndola nuevamente entre mis brazos. Creí que jamás la volvería a ver, la angustia que sentía me hacia sentir la persona menos valiente por haber permitido que David se la llevara. 

-Alec...- sollozó- el está aquí, tengo que verlo-terminó por ponerse la gabardina 

-¿de qué hablas?- pregunté mirándola a los ojos

- Derek, necesito hablar con el- caminó hacia el pasillo y la jalé de la cintura

- No puedes hacer eso - Mierda, no podía decirle

- ¿por qué? - me quedé callado unos segundos, después la llevé de la mano fuera de la casa . Garret dejó inconsciente a David, probablemente lo había matado.

Salimos de la casa, no podía decirle lo de Derek, era demasiado para ella. Se detuvo en seco cuando iba a subirse al auto.

- ¿qué haces? - pregunté confundido ante tal acción

-debo volver- corrió hacia la entrada y antes de que hiciera algún estupidez la cargué hacia el auto y la acomodé dentro de el, pataleó pero ya estaba dentro del auto y después yo también estaba dentro de el.

-¡déjame salir!-  pidió golpeando mi hombro, sentí como mi mandíbula se tensó 

/Brenda/

-Brenda no podemos volver- su voz era seria, no dije nada. Me miró a los ojos, necesitaba una explicación -Sé que debí decírtelo desde un principio, pero no quería que te llevaras un dolor más grande del que ya tienes ahora, es demasiado tarde- Orilló el auto en la carretera, soltó el volante un momento para tomar mis manos, definitivamente algo había cambiado en el.

- Alec...- temía la respuesta, no quería saberlo.

- Derek ha estado entrometido en esto durante mucho tiempo- trataba de calmarme - todas las cosas que el te dijo, son mentira- se me hizo un nudo en la garganta -el estuvo dentro de tu secuestro todo el tiempo...-- 

-Tengo la necesidad de volver y...--

-No tienes que hacerlo, eso no te ayudará en nada- Bajé la mirada, me sentía realmente traicionada, la confianza que una vez le tuve a Derek había desaparecido, pero no quería llorar, no por el- Brenda -subió mi rostro a el, sentía que me desmoronaba cuando me miraba a los ojos- No puedes confíar en el - miré sus labios, el miró mis labios y el espacio cada vez disminuía más. 

Tensó su mandíbula y se alejó de mí tomando nuevamente el volante.