Capitulo 13.

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Draco's P.O.V.


El miércoles pasado, había tenido una excelente noche con Hermione, una cena fuera de lo habitual, sin duda una noche inolvidable, sobre todo por ese momento, en el que la tuve tan cerca de mi. Ella iba a tropezar con uno de los cojines del sofá, pero mi cuerpo se lanzo sobre ella impidiendo su choque contra el suelo, haciendo que la hermosa chica chocara contra mi cuerpo, su calor fue como agua en el desierto, una sensación extraña para mi, como si mi cuerpo necesitara de el. Era algo hironico, pues, es verdad que últimamente no había estado con ninguna chica en la cama, pero sabia como era esa sensación de tener a alguien tan cerca de mi piel desnuda, y sin duda, lo que sentí con Hermione, no era nada parecido si quiera con eso.

Justo esa noche me costo mucho dormir, pues, algo que jamás creí que pasa sucedio, jamas imagine tener así a la chica que tanto tiempo hice sufrir, pero eso no fue lo que me hizo perder el sueño, si no que, al llegar a casa me encontré con una mirada penetrante y acosadora, unos ojos hermosos color verde se habían clavado en mi, Astoria Greengrass, la chica con la que había compartido intimidad durante mucho tiempo, la que no me pedía mas nada que permitirle estar a mi lado, no puedo mentir, ella me atraía físicamente, pero a pesar de ser una chica dulce, comprensiva, amable y cariñosa, mi corazón no correspondía a su amor por mi. Yo solo podía corresponderle en la cama siempre que ella lo pedia, sismpre, hasta esa noche.

Ella me miraba, estaba sin camisa, me pregunto porque venia de ésa manera, yo ignore su pregunta, solo me acerque a ella y le di un beso en la mejilla en modo de saludo, en ese momento me abrazo y beso la comisura de mis labios tratando así de provocar mis bajos instintos, el beso comenzaba a profundizar cuando, mi mente me llevo a un lugar desconocido para mi, mis labios ya no besaban a la chica de ojos verdes, si no a la chica de cabellos alborotados, a la dueña de esos ojos color miel, lo que me parecía realmente sensual, la seguí besando tomandola por la cintura, ella acariciaba mi espalda. -Vamos Draco, no me hagas esperar-. Me dijo, al escuchar su voz reaccione, abrí mis ojos, no era Hermione a quien besaba, si no a Astoria, me separe de ella y solo pude pronunciar -Lo siento-. Me Di media vuelta y me retiré a mi habitacion, dejandola ahí parada en medio de la estancia. La había rechazado por primera vez.


A la mañana siguiente llegue al departamento de la preciosa castaña, ella me esperaba con el desayuno listo, eso me pareció muy amable, sus atenciones comenzaban a gustarme, tanto que podía acostumbrarme a ellas. Le comente que no hacia falta que se molestara, pues a mi me encantaba ser quien la invitara, pero ella me contesto algo que me gusto y me desánimo al mismo tiempo: -A mi tampoco me incomoda, y también me gusta pasar tiempo a tu lado "amigo"-. Esa ultima palabra había logrado producir un eco en mi interior. Pero claro, que podía esperar, ella esta con la comadreja, siempre ha estado enamorada de el, como esperaba que sintiera algo por mi, si yo siempre la humille, ademas, lo que había pasado anoche, solo fue producto de mi imaginación. Trate de no hacer notar mi decepción. Pasamos el día como si nada, porque en realidad eso paso, nada. Como todos los dias, la lleve a su casa,  íbamos en un incomodo silencio, note que quiso hablar para romperlo pero me adelante, la invite a cenar a casa en nombre de mi madre, le invente que mi madre quería cenar con ella el viernes. Ella comenzó a titubear, estaba seguro de que se negaría, no la culpaba después de todo lo que paso, pero trate de convencerla y finalmente lo logre. Llegamos a su casa y bajo del auto, como de costubre, no me fui hasta no verla dentro del edificio. Vole directo a mi casa para hablar con mi madre, pues la había involucrado en mis asuntos.


Subí a su habitación, toque la puerta y su voz me pidió qué pasara, se encontraba recostada en su cama leyendo un libro, no pude notar cual, pues al verme atravesar la puerta lo cerro y lo puso bajo su almohada. Comencé a explicarle la situación, incluso le dije que estaba comenzando a sentir cosas sugerentes por ella, pero que ella estaba comprometida con la comadreja. Ella me miraba atentamente y me dijo algo que hizo que mi esperanza aumentara de cero a cien. Me dijo que cuando el amor se presenta, hace de las suyas aunque uno no este de acuerdo, así que el que ella estuviera comprometida, no significaba que yo no podía hacer mi labor de conquista. Me retire a mi habitación con una gran satisfacción, ahora solo debíamos esperar a lo que ocurriera en la cena.


El viernes por la mañana nueva mente la hermosa Hermione tenia en la mesa un exquisito desayuno preparado con sus suaves manos. Estaba nerviosa, lo note a simple vista, pero en fin, el día paso rápido. Nada me importaba tanto como estar a su lado, lo que ocurriera hoy en la cena, pues sabia que mi madre seria cómplice de mis locuras. Llegue a una pastelería por petición de mi acompañante, y me sorprendió demasiado que tuviera gusto por el mismo postre de mi mama, eso iba a ser un buen tema de conversación.


Todo iba bien, pero mama comenzó a ponerse sentimental y de pronto ya estaban abrazada llorando, lo que me pareció tan tierno y decidí unirme al abrazo, quedando frente a frente a los ojos miel se la chica por la que comenzaba a babear. Oficialmente lo he aceptado, me gusta Hermione Granger.


La cena concluyo, la verdad deseaba tanto que eso pasara pues, mama estaba avergonzandome con sus recuerdos de mi infancia, aunque para ser sincero, me encantaba la cara divertida de Hermione al escucharlas.


Pasamos nuevamente a la estancia para seguir conversando, y de pronto una persona entro directo hacia nosotros, era Astoria, se quedo parada ahi, la salude como de costumbre, bese su mejilla y la invitamos a sentarse, a lo cual se negó y dijo que mejor volvía otro dia, mostrándose un tanto molesta por la presencia de Hermione. Todos insistimos, incluso Hermione, quien siempre ha sido de buena intencion, pero nuevamente Astoria se nego, esta vez con la intención de insultar a Hermione, la sangre comenzó a hervirme, me sentía muy molesto, así que no la mire cuando decidió marcharse. Le prometi a Hermione que jamás permitiría que la insultaran nuevamente y lo voy a cumplir.


Luego de mucha platica mi madre se fue a dormir, dejando nos solos a mi y a esos ojos de miel dulce, lo que creí que pudo ser un momento romantico con el sonido se la lluvia como fondo, cambio sin si quiera comenzar a serlo, pues mi chica favorita decidió que era hora de marcharse. La acompañe hasta su chimenea, pues la lluvia estaba demasiado fuerte Homo para conducir. Regrese a casa y me fui a mi cama, pensando en que jamás me había sentido tan feliz como hasta ahora.


Hoy por la mañana en el almuerzo mamá me veía con ternura, pero no entendía porque.


-Porque me miras asi, que te sucede madre.


-Te veo diferente hijo, se te ve enamorado.


-Me siento enamorado mama, jamas creí que sentiría eso por alguien, y menos por ella.


-Siempre creí que te quedarías al lado de Astoria, pero, los ojos con los que vez a esa niña no son los mismos que con los que vez a Hermione.


-Ella es muy buena conmigo y es hermosa, no puedo negarlo, a cualquier hombre lo puede enamorar facilmente, pero yo, no puedo sentir nada mas que amistad por ella.


-Lo se, así es el amor, lucha por ella, solo no te hagas daño, recuerda su compromiso, respeta su decision siempre.


-Eso haré mamá.


Me fui a mi habitación para enviarle una carta, con el pretexto de pedirle el numero telefónico que le brindaron. Y así lo hice, aunque su respuesta me desánimo mucho. Si, me dio el numero con el que ahora podía llamarle por teléfono, pero me escribió que hoy vería a su amado después de una larga semana. Así es, mi corazón se partió en mil pedazos pero, aun así no me rindo, haré lo posible para enamorarla.

Delicioso Dilema.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora