Al día siguiente recordé haber visto en el pueblo un letrero de ¨se solicita personal¨ en uno de los restoranes así que fuimos en la tarde a solicitar el empleo. Según el dueño del local necesitaban un cocinero y un mesero, le paga era bastante buena por lo que no lo pensamos dos veces y aceptamos, aunque después de unos días me di cuenta de que no es el mejor trabajo del mundo de hacho comienzo a detestarlo y todo por culpa de un grupo de tres idiotas que vienen a comer todos los días y solo se la pasan diciéndome idioteces y haciendo alusiones ofensivas a mi cuerpo, siempre trato de ignorarlos pero el día de hoy fue el colmo; después de tomar su orden me di la media vuelta para dirigirme a la cocina pero uno de ellos aprovechó para darme una nalgada aprovechándose de que traía falda ese día, me giré muy molesta solo para ver como él y sus compañeros se reían.
-¿Qué te pasa mi reina? No te enojes es que tenías un bicho en la falda, deberías agradecérmelo ¿Qué tal un besito de gratitud, mi querido ángel caído?
-¿Sabes qué maldito viejo, cara de asno?..- Puse mi mano de golpe en la mesa de metal en la que se encontraban sentados pero esto solo era una distracción para aprovechar y calentar la mesa a 1000 C con ayuda de mi logia (Sin producir fuego en mi mano, solo calor) - Si yo fuera tú tendría más cuidado al hacer mis pendejadas... Porque puede que yo tenga la cara de un angelito pero creme cuando te digo que en realidad estás ante un verdadero demonio
Una vez que me retiré, escuché como el que me había tocado gritó de dolor al tocar la mesa seguido de sus dos compañeros, nunca había hecho tanto esfuerzo para no reírme pero no conforme con eso se me ocurrió intentar alga más; los tres habían pedido un tarro de cerveza, así que antes de llegar a su mase metí mi dedo índice en cada uno de los tarros de madera para poner el líquido al rojo vivo con mi habilidad de la fruta, les serví sus tarros y me quedé parada al lado de su mesa para disfrutar el espectáculo; al sentir el líquido hirviendo en sus bocas los tres se escupieron mutuamente directo en la cara y comenzaron a gritar mientras yo, sin poder contenerme más, comencé a reír sin control.
-¡Mierda! ¡Esto quema como el mismo infierno!- Dijo el que me había tocado—Pero yo sé con que se me va a quitar- Ese idiota me cogió por la cintura e intentó besarme a la fuerza pero en ese momento Sanji salió de la cocina y terminó por moler a patadas a ese tipo y al resto de sus camaradas quienes salieron corriendo del restorán como almas que se lleva el diablo.
-¿Estas bien (Tn)-san? ¿Te hicieron daño?
-Descuida, gracias a ti no pasó a mayores- Dije sonriendo dulcemente
-¡PAR DE IDIOTAS!- Se escuchó una voz enfurecida desde la oficina de nuestro jefe- ¡IMBECILES! ¡GRANDICIMAS EXCUSAS DE SERES HUMANOS! ¡Vengan a mi oficina inmediatamente!
El viejo nos dio un buen sermón por haber golpeado a uno de sus mejores clientes y terminó por descontarnos 100 berries del sueldo a cada uno.
Llegamos a nuestro apartamento muy cansados, pues además del descuento, también tuvimos que fregar todos los platos. Cerré la puerta y caminé a paso de zombi hasta el sillón de la sala en donde me dejé caer pecho tierra.
-Kume na sai, Sanji-kun- Dije tristemente
- ¿Por qué te disculpas?
-Por mi culpa pasó todo esto, no debí ser tan agresiva me porté como una niñita haciendo bromas tontas... creo que mi oni-chan tiene razón; soy una caprichosa que no piensa en las consecuencias de sus actos.
- Oe... te dije que ignoraras las palabras de ese idiota, el que no piensa en consecuencias es él... y además el tipo ese del restorán se lo merecía ¡Nadie intenta besar a MI chaca!
-Demo...
-(Tn)-san- Se acercó a mí y sonrió arrodillado a mi lado y apoyando los brazos en los cojines del sillón- Deberías pensar en que... tal vez lo que te dijo Zoro lo dijo sin pensar; el tipo estaba molesto, no te lo tomes tan en serio, ahora quiero que sonrías y dejes de preocuparte por eso ¿Vale?
-... Vale- le sonreí
-Iosh- Se levantó- Entonces iré a prepararte algo rico para cenar ¿Cómo qué se te antoja?
-Cena tú yo.... No tengo hambre
-¿De verdad?... Pues tal vez necesitas comer otra cosa, digamos...- Se me subió encima- Digamos un poco más de carne.
El rubio unió sus labios con los míos en un dulce beso, cerré lentamente mis ojos al sentir la invasión de su lengua en mi boca, deslicé mis manos por detrás de su espalda acariciando levemente sobre la tela de su camisa, de pronto noté que el cocinero se había quitado la corbata y de que su camisa estaba totalmente abierta, puse mi mano en su pecho y lo alejé un poco de mí.
-Discúlpame Sanji pero...
-¿Aún... no?
-Lo siento pero aún tengo mucho miedo, no es que desconfíe de ti es solo que... bueno yo... digamos que tengo mis dudas, simplemente no me hago a la idea y no me siento preparada para esto aún.
-Entiendo... tranquila, seré paciente y esperaré el tiempo que sea necesario hasta que estés lista, pero... ¿Por lo menos puedes venir a cenar conmigo?
-De acuerdo- Dije sonriendo y me encargué de volver a cerrar los botones de su camisa para después cenar juntos e irnos a dormir
CONTINUARÁ...
Saben que?... creo que despues de escribir esto ahora si lo tengo bien decidido: si las frutas del diablo existieran yo me comería la Mera Mera No Mi
Que por qué?...
Pues por que en mi pueblo donde yo vivo hay muchos idiotas como el que describí en el cap... ya sabes de esos cuarentones que nomas ven pasar a una chava y empiezan a decir idioteces
Así que ya saben
Yo me comería la Mera Mera para darles una lección
Y ustedes, nakamas? Comenten cual se comerían y por que
Bueno nos vemos
Gracias por leer
Sayonara...
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La hermana menor de Zoro. (Sanji Y tú)
FanfictionRoronoa (Tn), conocida por el gobierno como el Gorrión Dorado, es una arquera bastante habil cuya destreza la llevará a formar parte de la tripulación de los mugiwaras en donde se reencontrará con su hermano mayor y además, terminará por conocer el...