El sábado, después de haber estado en el bar, me dediqué a conseguir algunas cosas que me faltaban. Me desperté a las diez de la mañana para poder hacer a tiempo todo. Los chicos seguían dormidos y seguro que lo estarán todo el día.
Me coloqué un jean negro y una remera básica para el día a día. Salí de la casa y tomé la bicicleta de Scott, pedaleé por un buen rato hasta llegar a un mercado. Vivir con cinco chicos y que nadie haga las compras era un poco difícil, principalmente porque me moría de hambre; entonces compré algunas frutas y verduras, comida congelada y helado para el postre, después algunas galletitas, que no iban a durar mucho.
Ya casi era de mediodía y decidí tomarme un té, mi madre me pegó la costumbre de tomar té a todas horas, pero ahora había perdido la práctica.
Cuando me fui a sentar pude notar la presencia de alguien conocido, la miré a los ojos y me acerqué, la chica me miró confundida, pero luego sonrió al saber quién era.-Hola- dije.
-Hola, tú eres Cara, no? La que vive con Ryan?- me preguntó, mientras me estiraba la mano.
-Sí, esa soy- correspondí el saludo- tú eres la chica de Ryan, no?
-Bueno- miró para un costado- si se puede llamar así... oh que tonta, ven siéntate.
-Gracias- dije y me senté en frente de ella- cómo que no sabes que eres de él?
-Pues, es difícil, hace como unos cuatro, cinco meses que estamos saliendo pero nunca dice que soy su novia, ni me presenta ante sus amigos, bueno... te conocí a ti, pero eso es porque nos descubriste. La verdad es que ya no sé si le gusto.
-Qué? Yo sabía que estaba un poco perdido, y raro, hasta que me di cuenta de que le gustabas, está loco por ti. Pero creo que tiene miedo a que los demás chicos te rechacen, supongo que eres muy importante para él.
-Sí, eso espero- bebió un gran sorbo de café- la verdad es que me gusta mucho, y no es el típico chico malo, tiene un corazón y es muy bueno.
-Lo sé, lo descubrí cuando te miraba- dije y le sonreí, ella me devolvió la sonrisa- si quieres puedo hablar con él, preguntarle porque no te presenta con los demás chicos.
-Oh, eso sería asombroso, sígueme en Instagram y hablamos por mensaje directo cuando te conteste- me dijo, la seguí y ella a mí.
-Bueno, me tengo que ir, si sigo aquí voy a terminar comprando todo- le dije mientras me levantaba- nos vemos.
-Adiós!
Salí de la cafetería y me dirigí a la casa; no había pensado muy bien con lo de la bicicleta, ahora no sé cómo haría para llevar todo lo que tengo. Traté de poner todo y subirme a la bici pero era imposible, mientras trataba de hacer un segundo intento un auto frenó en frente mío y tocó el claxon.
-Y a ti qué?- dije un poco molesta al conductor, este bajó la ventanilla y lo reconocí.
-Qué pasa? Un viejo amigo no puede ayudarla?
-Jackson? Qué estás haciendo aquí?- le pregunté al notar la cara conocida, él bajó del auto y me saludó.
-Vine porque mi padre se mudó por acá y bueno, ya sabes cómo es la cosa- los padres de Jackson estaban separados, él era mi vecino los martes, miércoles y jueves, y los restos de los días era mi compañero de clase.
-Hace mucho tiempo que no te veo- le dije.
-Un año? Tal vez, no lo recuerdo- me miró con sus ojos color ámbar y sonrío, era una de las pocas personas que conocía que tenía la sonrisa más reluciente de todas.
-Bueno, gusto en verte- dije haciendo ademán a irme.
-Espera! No quieres que te llevé? Te he visto que no pudiste dar ni dos pasos con todo eso.
-Eso estaría bien, gracias.
Ambos colocamos todo lo que compré en el baúl, y la bicicleta de Scott la enganchamos atrás. Me subí al asiento del acompañante y luego partimos hasta mi casa.
-Y dónde vives? Tu madre me dijo que estabas en una fraternidad- me preguntó.
-Oh sí, vivo en la Fraternidad Evans.
-Evans?- arqueó su ceja- cómo tu apellido?
-Sí, todos los que vivimos ahí tenemos apellido Evans.
-Interesante- dijo mirando hacia adelante- y qué tal tus compañeras? Tal vez me puedas presentar a alguna.
-Ja, no creo que te quieran, pero si tú quieres puedes entrar a conocerlas- Jackson aceptó con la cabeza, se iba a llevar una gran sorpresa.
Al llegar me ayudó a bajar todo y dejé la bicicleta de Scott tirada en un rincón. Abrí la puerta con mí llave y entré, atrás mío venía Jack. Dejó todo en la cocina y se acomodó el cabello castaño.
-Cómo estoy?- me preguntó.
-Para matar- le contesté- chicas! Vengan!
Luego de unos cuantos minutos se escucharon unas cuantas pisadas de arriba y algunas de abajo. El primero en bajar fue Jacke que me miró confundido, luego Devi, y por el costado de la cocina salieron Scott y Ryan, y el último fue Blacke.
-Y? Qué opinas de mis compañeras?- le dije a Jackson que me miró con una mezcla de confundido y enojado.
-Nos dijiste chicas?- preguntó Scott, asentí- y este? Quién es?
-Nadie, un viejo amigo que vino a conocerlas- empujé a Jackson hacia ellos, los chicos me miraban confundidos- Jackson los chicos, los chicos Jackson. Era mi amigo de la secundaria, y mi vecino.
-Aah- contestaron todos.
-Bueno, vamos a divertirnos- dijo Scott y tronó sus dedos, Jackson me miró con miedo.
-No hagan mucho ruido, yo seguiré durmiendo- avisó Jacke y fue hacia arriba.
Cuatro contra uno, quién ganará la batalla?
Hola!!
Espero que les guste.
Si es así denme un voto y o comentario, se los agradecería mucho!Nos vemos en dos días,
Bye.
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Fraternidad Evans
Teen FictionScott, Devi, Ryan, Jacke y Blacke son de la fraternidad Evans, que casualmente también es su apellido. Cara entró en la universidad hacia relativamente poco, todas las fraternidades de mujeres fueron ocupadas, entonces por excepción dejaron que ent...