Fraternidad Evans

010

Me desperté al escuchar un ruido que provenía del baño, agarré mi celular y me fijé la hora, tres y media de la mañana. Una luz blanca y muy molesta provenía del baño, me levanté y caminé hasta allí. Froté mis ojos una, luego otra y otra vez ya que no creía lo que estaba viendo; Blacke estaba en el suelo, desmayado, su cara parecía no tener vida y su piel empalidecía cada vez más, caí a su lado y escuché su corazón, todavía latía, pero no por mucho.

-Blacke eres un idiota- dije mirándolo con desesperación.

Miraba a todos lados hasta que vi una empaque de lo que sería algún remedio, y luego se me ocurrió una cosa; metí mis dedos en la garganta de Blacke para producir el vomito, una arcada, luego otra y todo salió, era lo más asqueroso que había visto. Dejé su cabeza en mi hombro y comencé a gritar.

-Chicos! Despierten! Ayuda! Ayuda!- y casi como un rayo Scott vino, luego le siguieron Devi, Ryan y Jacke.

-Qué pasó?- preguntó Scott mientras levantaba a Blacke y lo llevaba, junto con Ryan, al sofá.

-Creo que intentó suicidarse- respondí con aire intranquilo.

-991 necesito que traigan una ambulancia...- dijo Devi por el teléfono- intentó de suicidio.

-Amigo, por qué lo hiciste?- repetía Scott mientras lo apoyaba en el sofá.

-Supongo que es por culpa de Matt- dije ya que Matt lo había estaba molestado todos estos meses.

-Le voy a romper la cara a ese maldito- dijo Scott y se dirigió a la puerta, la abrió y salió rumbo a la casa del frente.

-Scott no hagas nada estupido- grité desde la puerta- acuérdate lo de la beca- Scott paró y me miró, sabía que no podía hacerlo.

-No te preocupes, yo lo haré- dijo Ryan mientras llegaba a la casa de en frente, abrió la puerta sin más y buscó a Matt, luego de unos segundos los dos estaban en la calle peleando, a la pelea se le sumaron Devi y Jacke y dos más de la fraternidad enemiga.

Cuando la policía y la ambulancia llegaron todos dejaron de pelearse, pero Matt tenía un ojo morado y la nariz sangrando.

-No vuelvas a meterte con mi familia- dijo Ryan y volvió a la casa.

Acompañé a Blacke en la ambulancia y estuve con él en el hospital, los chicos venían todos los días para ver cómo estaba, hasta que un día llegó Camille.

-Qué haces aquí?- le dije enojada, ella me miró, parecía dolida.

-Necesito saber cómo está, necesito quedarme con él.

-Tú le hiciste esto, tú y Matt, yo no sé si Blacke quisiera que estés aquí, cuando despierte y si es que lo hace le preguntaré si quiere hablar contigo y si dice que sí, pues bienvenida. Pero ahora, largo.

Camille me miró, luego a Blacke y se fue. Pasaron días, semanas, que parecieron como trillones de años, hasta que por fin él despertó.

-Blacke?- pregunté cuando comenzó a abrir sus ojos, él apenas balbuceo.

-Quiero... agua.

-Sí, claro- le traje un vaso con agua y él lo bebió.

En menos de un minuto Scott apareció en la puerta, él había ido a buscar algo para comer mientras esperábamos, pero al ver a Blacke despierto, Scott dejó la bandeja en la mesa y se acercó a abrazarlo.

-Mi buen amigo, ya estás despierto- dijo muy feliz, Blacke sonrió.

-Y hace cuanto que estoy aquí? Dos días?- preguntó cuando el abrazo se deshizo.

-No, risitos de oro estuvo casi dos semanas en coma, es un nuevo récord- le dijo Scott.

-Y ustedes estuvieron aquí todo este tiempo?

-Nosotros, Devi, Jacke, Ryan- dije- nos turnamos para ver cómo estabas.

-Y alguna vez vino... ya saben quién?- preguntó.

-Voldemort?- preguntó Scott y luego me susurró- creo que quedo medio loco.

-No tonto, está hablando de Matt, de Matt, no?

-Ese idiota no me importa, no le permitiría venir aquí, estoy hablando de- suspiró- Camille.

-Pues...- comencé, miré a Scott, y luego a Blacke, no sabía si decir la verdad o la mentira, en cuál de las dos sufriría, entonces dije la mentira- no la vi por aquí, tal vez te visitó cuando estuvieron los otros chicos o tal vez no.

-Está bien, no pensaba en que se iba a acercar.

-Bueno, dejemos la melancolía y hagamos algo, le preguntaré al doctor cuando puedes salir- dijo Scott, lo frené y dije.

-Deja que yo vaya- sabía que ellos querían hablar, era mejor que no esté allí.

-Gracias- susurró Scott.

Me fui de la habitación y los dejé charlando, mientras tanto fui a buscar a un doctor para que me dijera la fecha de salida de Blacke. Entonces lo vi, acercándose por la entrada del hospital, con media sonrisa en la cara, con los ojos como los de un loco, estaba acompañado de Camille. Matt.